Capitulo 28
-¿¡Que!?.-Preguntó y tomó una de mis manos.-¿De dónde sacaste eso, ____?.-Su ceño se frunció notoriamente. Mierda, lo había hecho todo mal….
-Harry, amor… yo…-Comencé a decir pero el me interrumpió.
-¿¡De donde mierda has sacado eso, ___!?.-Preguntó, enfurecido.
-Harry… tranquilízate.-Pedí posando mi mirada sobre sus ojos, él suspiró frustrado para luego pasar su mano libre por su cabello, despeinándolo.
-¿Cómo quieres que me calme si me dices que Lux no es mi hija?.-Preguntó mirándome a los ojos.-¿Quién te dijo eso?.-Preguntó un poco más tranquilo, mirándome a los ojos.
-Josh… él me dijo que…-Él volvió a interrumpirme, enojado.
-¿Josh? ¿¡Y le creerás a él luego de que te engañó!?.-Exclamó, molesto.
-Harry, ¿Puedes dejarme hablar de una buena vez?.-Pregunté enojada, ya me estaba enojado que fuera así conmigo, aunque lo comprendía.
-Está bien.-Suspiró y se acomodó en su asiento, centrando toda su atención en mi.
-Josh… hace unos días me dijo que Ashley le contó que Lux no es tu hija, sino de Brad otro hombre con el que está saliendo tu…. Mujer.-Comenté intentando ser suave con cada cosa que le decía, no quería que se alterara demasiado.
-¿Qué?.-Preguntó abriendo sus ojos como platos.-¿Brad? ¿¡Quien mierda es Brad!?.-Exclamó molesto y soltó repentinamente mi mano, suspiré intentando buscar una forma para poder tranquilizarlo aunque sabía que sería difícil.
-Harry… no sé quién es él, Josh solo sabía eso y…-Me interrumpió.
-No…no lo puedo creer.-Tapó su rostro con sus manos y escuché algunos sollozos escapar de su boca. Mierda, no quería que llorara, no quería que estuviese mal…
-Harry.-Lo llamé y él apartó las manos de su rostro para mirarme. Sus mejillas estaban mojadas gracias a las lagrimas y podía ver esa tristeza resaltar en sus ojos esmeralda.-Aun no sabemos si es cierto, podría ser una mentira de Josh…-Me interrumpió.
-Como podría no serlo.-Comentó serio.-De Ashley me esperaba cualquier cosa, pero nunca pensé que… que… Lux no fuera mi hija, es que… quiero tanto a esa pequeña.-Las lagrimas volvieron a aparecer en su rostro y él bufó, enojado.-Me siento tan estúpido.-Susurró y yo me acerqué a él para poder abrazarlo.
Sus brazos rodearon fuertemente mi cintura y su cabeza fue directamente hacia mi cuello, escondiéndolo allí. Lo único que podía hacer en este momento era contenerlo, aunque no sabía cuánto tiempo pudiera soportar escucharlo llorar sin terminar igual que él. Comencé a acariciar sus rizos, intentando tranquilizarlo pero no dejaba de llorar y eso me preocupaba. Tal vez había hecho todo mal, tal vez el hecho de decirle este mal porque no es algo en lo que yo me tenga que meter, pero simplemente me parecía injusto que él pensara que es su hija cuando… al parecer no lo es.
-Tranquilo amor, aun no sabemos si es cierto.-Susurré para luego besar su cabeza.
-Lo sé, pero…. Me molesta tanto esto.-Comenté con su cabeza en mi cuello haciendo que se me dificultara un poco entenderle, sonreí a medias.
-Lo sé cariño, pero.. Si quieres te puedo ayudar.-Él se separó un poco de mi, para poder mirarme, atento.
-¿Cómo?.-Sus ojos algo rojos se posaron sobre los míos y le sonreí tiernamente par luego acariciar su mejilla.
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