Capitulo 40
-Tranquilízate y siéntate un momento.-Ordenó mi hermano tomándome de los hombros para luego dirigirme hacia el sillón. Empujó un poco para abajo mi cuerpo y accedí a sentarme, estaba cansada aunque no sabía de qué si solo había estado llamando a Harry. Llevaba más de una hora intentando que me contestara y lo único que lograba era que la contestadora saltara y comenzara, con su tan molesta voz, a hablar.-¿Quieres un vaso con agua o comida?.-Preguntó Jake mirándome, negué con la cabeza.
-No, lo único que quiero es que el idiota de Harry me conteste.-Me quejé, él suspiró.-Lo siento Jake, se que te debo estar cansando pero..¡Es que no sabes lo difícil que es para mí estar sin mi hija!.-Exclamé y él se sentó a mi lado para luego tomar mi mano.
-No es por eso que me quejo, linda.-Susurró.-Es que aun no puedo creer lo idiota que es Harry, aunque sea por una buena causa me parece que podría haberse ido él y no llevarse a Sharon con él.-Comentó, asentí.-Iré por un vaso con agua para ti y te traeré algo para que comas, ¿Si?.-Volví a asentir y él se paró para luego dirigirse hacia la cocina. Tomé nuevamente el teléfono y marqué el número de Harry, seguiría intentando hasta que me contestara. Sonó una, dos, tres y….
-Llamada-
-¿Es que no puedes dejar de molestar ni un solo momento? Estamos ocupados.-Se quejó una voz chillona desde el otro lado. ¡Oh, mataría a esa rubia cuando la viera!.
-Eres…. Eres una…-Me interrumpió, impidiendo que la insultara.
-Oh cariño, no te gastes con tus insultos, yo sé muy bien lo que soy.-Comentó.
-Una perra.-Comenté en un susurro pero supe que lo escucho cuando rió fuertemente.
-Puede que eso también sea, pero…¿Crees que hubiera llegado a donde estoy sin serlo?.-Preguntó y rió nuevamente al escuchar que no diría nada.-Y ahora, además, logré tener nuevamente a Harry y a la pequeña Shar.-Siguió, intentando hacerme enojar y vaya que lo estaba logrando.
-¿Qué quieres con Sharon? ¿Qué ganas con llevártela a ella también?.-Pregunté, enfurecida.
-¿Qué quiero con Sharon? Mmmm… aun no lo he pensado, pero luego veré que hacer con la pequeña.-Comentó y por su tono de voz supe que sonreía maliciosamente, seguramente imaginando que me encontraba llorando y lamentándome por ser tan idiota, pero en cambio me encontraba seria, intentando controlar mis ganas de comenzar a gritarle.-¿Qué gano con llevarme a ella también? Gano ver como tu familia perfecta se destruye poco a poco, aunque aún me quedan los dos bebés que estas esperando, pero ya veré que hacer con ellos.-Comentó y apreté mis labios.
-¡Devuélveme a mi hija!.-Exclamé, enojada.
-Cariño, Sharon no quiere ir contigo… te odia.-Comentó y sentí como si me estuvieran clavando un cuchillo en mi espalda repetidas veces.
-¡No puedes hacerme esto, Sharon no tiene nada que ver con Harry!.-Exclamé.-Ya tienes a Harry de nuevo contigo, ¿Para que la quieres a ella?.-Pregunté, ella rió.
-Ya te he dicho que no lo sé.-Contestó.-Claro que tiene que ver con Harry, si ella te hace feliz como lo hace Harry, entonces… ella tiene que estar separada de ti para que no lo seas mas.-Comentó y abrí mis ojos como platos, ¡Estaba aun más loca de lo que pensaba!.
-Pero….-Ella me interrumpió.
-Mira, no pienso seguir discutiendo contigo por aquí.-Comentó con fastidio.-Iré a tu casa, Harry no deja de molestarme para que no te haga nada y de verdad no lo soporto.-Soltó un bufido y supuse que rodó los ojos.
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