El alivio que Anna sintió cuando al abrirse la puerta vio a Piero fue inigualable. Se acercó al auto y entró. En el auto estaba el chofer, también el hombre calvo que la había ayudado a salir antes estaba sentado en la zona del copiloto, y los tres chicos en la parte trasera. El trio se recorrió dejando espacio para que Anna se sentará, como era muy delgada entró sin mayor problema, quedo a un lado de Piero. El coche se puso en marcha.
- Hola – dijo tímidamente.
- Ciao Anna – contestó Ignazio.
- Hola Anna... ¿Qué hacías a mitad de la calle? – respondió Gianluca.
Piero estaba en silencio.
- Mi celular está descargado, no encontré ningún teléfono, y Mónica ya no estaba así que tenía que buscar la manera de llegar a casa, me daba miedo subirme a un taxi así, sin más– respondió ella.
- ¿Y entonces preferiste caminar por la calle, sola? - cuestionó Piero con reproche
Anna le lanzó una mirada inquisitiva.
- Pensaba hacerlo hasta encontrar un Oxxo o una gasolinera... O algún lugar que me permitiera pedir un taxi de manera segura... - le respondió ella a la defensiva.
Piero solo le regresó la mirada.
Por Dios – contestó Ignazio – que bueno que te encontramos.
Sí - respondió ella - muchísimas gracias. Aunque, estoy segura de que hubiera llegado bien a casa.
Todo se quedó en silencio durante un momento, la tensión en el ambiente comenzaba a sentirse.
- No sabía que habías estado en el concierto – dijo Gianluca intentado animar un poco el asunto.
Sí – respondió Anna quien ahora miraba por la ventanilla, al parecer Piero no les había contado nada de su encuentro, comenzaba a sentir un frio inusual dentro del coche – estuve ahí. Fue un concierto genial. Felicidades.
- Gracias – respondió Gianluca
- ¿A dónde tenemos que llevarte? – preguntó Piero con un tono bastante agrío.
Anna le dio la dirección, el chofer asintió con la cabeza, y puso la dirección en Google Maps para llegar al lugar.
- Esta como a 30 minutos aún, si gustan pueden dejarme en una tienda Oxxo, de ahí buscaré un taxi – dijo Anna
De ninguna manera - contestó Piero – te llevaremos.
Transcurrieron un momento hablando del concierto, todos excepto Piero, el chofer y el hombre calvo. Anna comenzó a sentir escalofríos. Sin darse cuenta ya estaba castañeando los dientes.
- ¿Te encuentras bien? – le preguntaron al escuchar aquel inusual castañeo.
Sí – dijo ella hablando con dificultad – podrían por favor apagar el aire acondicionado. Me estoy muriendo de frio.
Ignazio y Gianluca se miraron. Piero regreso a verla, y la tomó de la mano.
- Estas ardiendo en fiebre, Anna – dijo Piero al sentir el calor de su mano. La tomó del rostro solo para confirmar su aumento de temperatura.
No, estoy bien, solo necesito llegar a casa - contestó ella tratando de controlar el castañeo y el temblor de su cuerpo – y dormir, es que me siento un poco cansada.
- Tenemos que llevarte a un médico – dijo Piero sin disimular su preocupación.
No, no – dijo ella – estoy bien, solo necesito llegar a casa... la fiebre pasará, ha sido por estar expuesta al frio de esta noche.
Piero solo asintió con la cabeza.
ESTÁS LEYENDO
Il Love
Fanfiction¿Quién no ha tenido un crush en algún cantante alguna vez? Les invito a leer Il Love, una historia de amor que narra la vida de Anna, quien desde que se enteró que su banda favorita llega a su país hace hasta lo imposible por ir conocerlos, pues es...