Mi vida es excelente, tengo un empleo que me gusta, muy buenos amigos y la independencia que siempre quise. Además de una pareja a que amo y una hija maravillosa, nunca creí ser capaz de ser padre tan joven, pero después de un año lejos de casa todo empieza a ser bueno para mi. Mi prometida ha preguntado varias veces por mi familia y yo aún no se que decirle, cuando me mudé mi teléfono no servía aquí y tampoco podía comunicarme con ellos, después de un poco de esfuerzo y trabajo logré conseguir un teléfono que cubriera mis necesidades y que funciona para el extranjero, pero cuando llamaba la grabadora decía que el número fue cambiado, Michael jamás respondió así que me rendí, entendí que no querían saber nada de mi al abandonarlos de esa forma, pero esta bien ahora mi vida es mejor. Incluso pude superar a Atenea, ella fue mi primer amor, pero hasta ella debe odiarme pues nunca respondió a los múltiples mensajes que le dejé.
Me cambié el nombre y obtuve la nacionalidad porque mis amigos me adoptaron como a su hermano.Mi vida de pareja no podía ser mejor, ella me atendía y cuidaba con amor pero también entendía lo que yo hacia por mi cuneta y no se oponía, íbamos a caminar como dos personas totalmente normales, mis cicatrices de la cara estaban casi desvanecidas gracias a un ingenioso invento de Tyler para su universidad que por cierto, se llevó todo el mérito y el primer premio. Yo fui su conejillo de indias,pero los resultados fueron favorecedores, solo me queda una que es la más grande pero no quiero que me la quite, me siento genial con ella pues es la más grande. Mi vida no podría ir mejor, incluso me mudé de la casa de Tyler, al tener pareja quería estar a su lado y no estaba cómodo con que ella viviera con nosotros.
M- ¿Que tienes pensado para esta noche?- Estaba sentado en mi escritorio leyendo algunos artículos de una revista en braille que a veces puedo conseguir, así que cuando se acercó me sobresalte ligeramente.- No hemos salido y me estoy aburriendo- Todo me lo susurraba tan cerca de mi oido. Bajaba su mano por dentro de mi playera, me erizaba la piel pues empezaba a llegar a mi vientre.
-M-Molly c-cielo, ¿Q-que haces?- Escuché una leve risita acompañada de una ligera mordida a mi oreja.
M- Nada profesor, es sólo que me estoy aburriendo y usted esta tan ocupado que no me hace caso. - Su voz era más seductora a cada palabra, mi cuerpo temblaba y había partes de el que no podía controlar.- Vamos profesor, necesito una clase de anatomía.- No se que me excitaba más, que me hablara así o lo que hacia con su mano metida en mi abdomen, la cual debió quedarse ahí pero decidió seguir bajando.- Huuy, alguien ha despertado...
- Molly...- Ya ni siquiera era posible que articulara palabras, me levante bruscamente del asiento y me puse frente a ella.- Te he dicho que...- Sus labios se pusieron con los míos, me quito las gafas y solo pude escuchar como azotaron contra el piso.
M- No finjas que no lo deseas...- Su mano recorrió lentamente mis partes bajas desabrochando mi pantalón, yo seguia besándola mientras mi mano entraba bajo su blusa y acariciaba sus suaves senos, con mi mano libre buscaba el botón de su pantalón, nuestro movimiento era tanto que no podía encontrarlo. Salvajemente puso mi mano en su vientre y mi adrenalina subía ante el tacto con su intimidad, desabotone sus jeans y sin pensarlo los bajé. Mi mano acarició su intimidad una y otra vez al mismo tiempo que ella hacia lo mismo con la mía.
Sin separarnos y dejar de besarnos la cargué de manera que sus piernas abrazaron mi espalda baja, busqué el sillón con la mano que tenia libre pero también tenía cuidado de no chocar o caer. La acosté y me quité la playera, ella seguía besándome y se intentaba aferrar a mi espalda, yo buscaba la manera de sacarle los pantalones y ella los míos. Se los bajé hasta las rodillas seguido de su panti, me acosté sobre ella y al mismo tiempo ambos nos deshacíamos de nuestra ropa extra. No sabia si estaba a punto de entrar en ella así que comencé a tocarla aún más. Encontré nuevamente sus senos y seguí mi camino hasta encontrar lo que buscaba con cuidado entré en ella. Estaba arriba de ella sin lastimarla o estar completamente acostado, ella daba pequeños gritos cada vez que me movía, me tomó del cuello y bruscamente me jaló hacia ella, cuando caí dio otro grito más fuerte.- ¿Te lastimé? - Intenté parar pero ella me respondió rápidamente.
M- Ni se te ocurra...- No podía verla pero imaginaba la expresión de su rostro. Cuando quería parar ella no me lo permitía, estaba arañando mi espalda con mucha fuerza, seguía moviéndome cada vez más rápido y ella como yo lo disfrutábamos- ¡A-A-ALEX! ¡AAAAHHH!- Escucharla tan extasiada me provocaba aún más. Me incorporé en mi posición anterior pero esta vez no la dejaría tirarme, busque sus manos y las retuve a sus costados,sentía el forcejeo de su cabeza queriendo liberarse pero no se lo iba a permitir, le besé los labios y comencé a bajar por el cuello, ella se contraia con cada roce de mis labios en su piel pero eso solo aceleraba las cosas, seguía bajando hasta que llegué a sus bustos, fue inevitable no soltar sus manos pero solo fue para acariciar sus pechos mientras le besaba uno.
Continuamos hasta el cansancio, nuestros cuerpos estaban pegajosos por el sudor, Molly estaba acostada y yo la abrazaba, estábamos muy juntos pues el sillón no era tan amplio para ambos. Se cubría con mi playera para que no le diera frío, solo escuchaba nuestras respiraciones, ella estaba durmiendo ya, pero no podíamos quedarnos en un sillón toda la noche.
-Amor, vamos a la habitación... estarás más cómoda ahí.- Sólo sentí un movimiento, pero no fue para pararse sino que solo se acomodó más. Me levanté y busqué mi pantalón en el suelo, me lo puse y volví al sillón para buscar a Molly. La cargué y me aseguré de que llevará la playera aún con ella, fue de lo más difícil que ha hecho, por fortuna tenía un bastón al pie de la escalera la cual no estaba lejos del sofá. Con el me iba guiando para llegar a nuestra habitación, fue dificil pues no podía llevar a Molly e ir maniobrando el bastón al mismo tiempo. Cuando estuve frente a la puerta de la habitacion dejé el bastón a un lado y abrí la puerta, con más cautela busqué la cama y metí a Moll entre las cobijas.
- Si descuida, estaremos ahí está noche.- La llamada de Tyler me despertó lo cual agradecí o me habría quedado dormido.
M- ¿Quien era cielo?- Habia despertado ya, puso su mano en mi pecho y empezó a hacer pequeños círculos con su dedo
- Era Tyler, nos invita a un evento que tendrá por haber ganado con su artefacto extraño.- La busqué y la abracé, seguía desnunda aunque ponía mi playera como protección. No dijimos nada en un buen rato, ella estaba recostada en mi pecho y yo seguía teniéndola entre mis brazos. Comencé a acariciar su cabello y después le di un beso en la frente.- Me iré a duchar, tengo que ir a buscar más libros para la niña.
M- Está bien, supongo que iré a ver como está y a hacer el desayuno.- Le di un beso y me levante, fui a la ducha a tomar una bastante larga. Me vestí y al salir me senté en la cama la cual ya estaba hecha. Tomé el bastón de anoche y bajé a la cocina.
- Buenos días.
M- Buenos días papi...- Molly hizo una muy mala imitación de voz tierna
- ¿Cómo amaneció mi niña adorada?.- Busqué mi silla, doblé mi bastón y lo guardé en el bolsillo de mi chamarra.
M- Mmmm... no tan de buen humor, esta molesta. Tal vez algún cólico.- Sonreí, adoraba cuando mi niña estaba molesta, era la criatura más adorable de la tierra.- Cielo, cuando te vayas puedes pasar a la farmacia por favor.
- Claro, ¿te sientes mal?
M- Para nada, necesito jarabe para la tos... le está dando muy fuerte.
-Insisto en llevarla al medico.
- ¡No!
- Haaa... si estas ahí, pensé que mamá bromeaba conmigo.
M- Ja ja... muy gracioso, ya te puse el plato frente a ti. La fruta a la izquierda los huevos a la derecha. Tu café esta en el lado izquierdo cerca de tu mano y los cubiertos a la derecha a un lado del plato.- Ella siempre hacia eso, lo cual agradecia, a veces lo olvidaba y terminaba todo un desastre.
Terminé de desayunar, subí a lavar mis dientes y me dispuse a salir.
M- Cariño espera...- Frené antes de abrir la puerta, volteé y Molly me despidió con un beso, llevaba a la niña en brazos pues la aplastamos un poco.- Cuídate mucho.
-Lo haré. Adiós princesa, adiós amor. Pasaré por ustedes para el evento de esta noche.- Salí de mi casa y con bastón en mano comencé a caminar muy sonriente. Una mejor vida no pude pedir.
ESTÁS LEYENDO
El Braille De Tu Amor|| EDITANDO
RomanceMoverse en la luz, pero no verla, saber del existir de las cosas y no saber como son; asi Dos vidas... Dos caminos... Un destino... Se unieron en las tinieblas, se encontraran en el momento más inesperado. Una chica modelo, un chico promedio se unir...