Capitulo 57.

381 17 0
                                    

Narra Angie.

Todo el camino de vuelta fue algo incómodo. Nadie decía nada. Me sentí segura cuando le había hablado así a Ryan, supongo que sabía que no podía hacerme nada con Harry y Louis delante. También sentí rabia y miedo cuando me agarró del brazo y no podía soltarme. Realmente pensé que acabaría consiguiendo llévame con él. Le iba a agradecer a Harry eternamente que no dejara que lo hiciera, a saber lo que hubiera pasado, ni siquiera yo era capaz a imaginármelo. Llegamos a nuestro edificio y los tres nos bajamos del coche. Caminamos hasta el ascensor y una vez dentro saqué las llaves de casa. Al llegar a nuestra planta Vi como ellos caminaban hacia la casa de Harry.

-¿Os apetece tomar algo conmigo?- Pregunté nerviosa.

-¿Segura?- Dijo Louis, estaba siendo muy agradable.

-Os debo una por esta noche- Dije yo un poco triste- Nada ha salido como me esperaba.

-Por un trago no pasa nada ¿no?- Dijo Harry sonriendo.

Los dos entraron en mi casa. Les mandé pasar al salón. Entré en la cocina y cogí de un armario tres vasos. Vodka negro con coca-cola. Llené dos vasos con esa horrible bebida y otro con agua bien fría. Los llevé al salón y me senté en uno de los sofás con ellos. Me miraban en silencio y finalmente hablé.

-Espero que os guste- Dije yo- No tenía nada más.

-Vodka negro con coca cola- Dijo Louis tras dar un trago- Perfecto.

-Es lo que bebe Ryan, él lo compra- Dije yo.

-Hablando de Ryan…- Dijo Louis, Harry estaba demasiado callado- ¿Qué coño ha pasado allí? Había mucha tensión…

-Bueno… él es un poco… difícil- Dije, no quería hablar mal de él.

-¿Difícil?- Dijo alzando una ceja- Realmente me tienes que estar vacilando, ¡se estaba aguantando para no darte una hostia allí mismo!

-Eso no es verdad- Dije, realmente sí era verdad.

-Me estas jodiendo- Dijo él- o estás muy enamorada o eres tonta.

-Él siempre está ahí cuando lo necesito- Dije yo- Es verdad que es demasiado posesivo, él no quería que me juntara con nadie y créeme, es mejor no hacerlo enfadar, cuando reñimos… digamos que es muy bruto y un idiota total.

-¿Alguna vez te ha puesto la mano encima?- Preguntó él.

-¿Qué? No, no, alguna vez me ha empujado pero jamás ha llegado a hacerme daño físico.- Dije yo- a veces pienso que no debería seguir con él…

-¿Por qué piensas eso?- Preguntó de nuevo.

-Cuando empecé a salir con él me daba miedo, realmente sentía miedo al estar con él- Empecé a decir- Luego me demostró que en verdad me quería y bueno, digamos que intentó ayudarme en todo, pero también hacía lo posible por apartarme de los demás… creo que ya he aguantado bastante con todo esto, quiero hacer lo que quiera y estar con quien quiera sin preocuparme de que él vaya a pegarles o intimidarles después.

-Deberías hablar con él- Dijo él.

-Creo que después de lo de hoy, no querrá saber nada más de mí- Dije sonriendo- Aunque si no es así, por supuesto que hablaré con él.

-Es un verdadero hijo de…- Harry empezó a hablar pero no pudo acabar la frase por qué tapé su boca con mi mano.

-Lo primero, yo soy la que tendría que decir eso no tú, y segundo, su madre no tiene la culpa de que él sea como es- Dije y sentí los dientes de Harry rozar la palma de mi mano, la aparté- ¿Acabas de intentar morderme?

-También tengo derecho a decirlo, por si no lo recuerdas a mí sí me agredió- Dijo él riéndose- y sí acabo de intentar morderte ya que tenías la mano en mi boca.

-Eres idiota- sentencié y cambiamos de tema.

Después de un par de bebidas más y un gran rato hablando los chicos se fueron. La verdad que cuando se lo había dicho a Ryan, había sido sin pensarlo, pero una vez lo pensaba más detenidamente, era verdad que estos chicos eran lo más cercano a amigos que había tenido. Me puse el pijama y me metí en la cama. Miré durante un rato el twitter y hablé con mi hermano por WhatsApp. Después de esto me dormí.

A la mañana siguiente me desperté temprano. Por fin era sábado. Desayuné bastante para coger energía y me vestí. Preparé la mochila para el gimnasio. Metí en ella ropa para hacer deporte, un bañador y gorro por si íbamos a la piscina, gel y champú, un peine, y ropa para ponerme al salir. Guardé la cartera y el móvil y salí de casa. Caminé hacía la puerta del rizoso y piqué. Me abrió y ya estaba listo. Bajamos por las escaleras ya que el ascensor estaba en reparación y emprendimos nuestro camino hacia el gimnasio.

Narra Harry.

Llegamos al gimnasio y cada uno entró en el vestuario correspondiente. Me puse mis pantalones cortos y una camiseta de tirantes. Guardé la mochila en una taquilla y la cerré. Salí y esperé a Angie, en realidad no se tomó mucho tiempo. Cuando apareció iba con unos pantalones cortos negros, una camiseta fucsia y el pelo recogido en un moño. Perfecta, y no me cansaría nunca de decirlo. Me sonrió y subimos al gimnasio. Corrimos y levantamos pesas. La chica estaba en forma.

-¿Estás cansada?- Le pregunté.

-Para nada- Dijo sonriendo- ¿Y tú?

-Tampoco- Respondí, esto no era nada para mí- ¿Te apetece un poco de boxeo?

-No, no, no, yo no hago eso- Dijo ella, era muy graciosa- ¿Qué te parece si nadamos?

-Me parece bien- Dije levantándome- Vamos a poner el bañador.

Entramos en los vestuarios de nuevo y puse mi bañador. Menos mal que lo había metido. Salí por la otra puerta. Daba directamente a las escaleras para bajar a la piscina. Allí  me encontré con ella. Oh dios mío. Hacía mucho tiempo que no la veía así. Bajamos las escaleras y dejamos las chanclas a un lado.

-¿Echamos una carrera?- Me preguntó sonriente, me encantaba cuando sonreía.

-¿Apostamos algo?- Pregunté, era bueno nadando, podía ganar.

-Claro- Dijo ella- Si ganas tú, haré lo que quieras por un día, si gano yo, lo harás tú.

-Me parece bien- Dije yo- Ida y vuelta ¿vale?

-Perfecto- Dijo ella.

Contó hasta tres y nos lanzamos al agua. Juraría que iba ganando pero cuando realicé la ida y la vuelta y vi que llagaba primero me arrepentí de haber apostado. ¿Tendría que hacer lo que ella quisiera? Bueno, sería divertido.

-Eres buena- Dije saliendo de la piscina.

-Lo sé- Dijo ella sonriendo victoriosa- ahora tengo que pensar que hacer contigo.

-No te pases pequeña- Dije extendiéndole la mano para ayudarla a salir.

Regresamos a los vestuarios y nos duchamos y cambiamos. Había sido una mañana movidita. Salí y la esperé. Volvimos a casa y cada uno entró en su piso.

Narra Angie.

Entré en casa y aventé la mochila al sofá. Al entrar en la cocina para tomar un vaso de agua, me percaté de que encima de la mesa había un paquete de mis bollitos de chocolate favoritos. También había una nota. “Te has metido con el hombre equivocado nena, te dije que te alejarás de él. Disfruta mientras puedas. Ryan.” Ahora sí que me había asustado. Picaron al timbre. Fui a abrir. Por un momento me eché a atrás. ¿Y si era Ryan? Estaba entrando en pánico. Estaba sola y desprotegida. No tenía a nadie a mi lado para defenderme de él. Abrí la puerta….

------------------------------------------------------------------------------

Hola!!! Espero que os guste el capitulo, me encanta que me leais. Hoy voy a recomendar la historia de una de mis amigas, Keis, se llama Un sueño, una dirección. Está muy bien. Ojala os guste como me gusta a mí. Un beso chicas.

Votar, comentar y recomendar!

Os quieroooo <3<3<3

Un pasado para recordarDonde viven las historias. Descúbrelo ahora