And now? - Scalia

Capítulo 3

- - - Juego de Honor - - -

Juego de Honor. Es el último partido que los graduados tienen en el equipo de Lacrosse de Beacon Hills. Cada año, la generación graduada juega con la generación sucesora y vaya que no queda otra opción más que ganar sí o sí. Aunque toda generación quedara registrada por siempre en los documentos de la escuela, el equipo podía tener una oportunidad de ser recordado por el resto de la eternidad en la pared de reconocimientos y trofeos de la escuela.

Los jugadores de la generación graduada se encontraban en los vestidores preprarándose para el mejor de los partidos. Entre ellos estaban Stiles y Scott, quienes disponían con animar al equipo o a la mitad de ellos para poder ganar con gran orgullo un lugar entre los mejores equipos de la historia de Beacon Hills.

Stiles se colocó encima de las bancas de metal y comenzó a hablar a lo alto.
-¡Bien! ¡Atención todos!

Todos instantáneamente voltearon a verlo y guardaron silencio para escucharlo.

De repente, Stiles sintió nervios y pánico. Probablemente no creía que todos le harían caso al primer instante.
-Bueno, eh... -Comenzó a tartamudear y a sentirse ridículo por lo que estaba haciendo. Como única salida, dijo lo siguiente: -Scott tiene unas palabras para ustedes.

A su lado, el verdadero Alpha lo miró con recelo una vez que Stiles logró posar las miradas de todos en Scott. Al mismo tiempo, McCall dio un paso dudando de lo que haría y luego se enderezó poniendo el pecho en alto y hablando con autoridad y confianza.
-A finales del verano del año pasado les dije que éste sería el último año. Y ahora, éste es el último partido. Ya saben que si quieren ser recordados por las próximas generaciones...

-¡Por los hijos de nuestros hijos! -Agregó Stiles.

-Tenemos que dar lo mejor de nosotros en éste deporte que nos ha unido como un verdadero equipo. ¡Vamos!

-¡SII! -Gritaron los demás al unísono.

Salieron de los vestidores debirrando todo lo que se les tenía en frente. Casi en el sentido literal. Podían escuchar el sonido de las personas de las tribunas esperando su gran momento. Scott encabezaba la última caminata hacia la cancha de Lacrosse. Podía ver desde lejos que el resto del euqipo de la generación de Liam se encontraban ya en la cancha bajo las intensas luces. Y las personas, arriba de ellos, moviendo los pies de modo que el ritmo que formaban los impulsaban cada vez más. En el momento en que salieron, la gente gritó con más entusiasmo y euforia. La banda de guerra e incluso personas de otras escuelas cerca de la zona de Beacon Hills, se econtraban allí. Scott visualizó de entre las gradas a su mamá con una réplica de la camisa del uniforme de Scott la cual hace meses mandó a hacer para llevarla ésta noche. Al lado de él, Argent también le sonreía y le transmitía apoyo. 

También logró ver a Malia sentada al lado de Mason. Ella le regaló una sonrisa extensa y lo saludó con más euforia. "Hoy ganas, confidente" -Gritó. A pesar del sonido y la larga distancia que ambos tenían, Scott logró escucharla y le sonrió.

El coach llegó con un hot-dog en mano y se acercó a ellos.
-Bueno chicos, no me queda más que decirles que tengan un buen partido, ya es de ustedes si quieren ganar o no. -Dijo con despreocupación. -Esperen... -Pausó. -No, más les vale ganar. No quiero dañar mi reputación como si fuese un pésimo coach ¡¿Entendieron?! ¡Sobre todo tú, Stilins...! ¿En dónde está?

Scott frunció el ceño confundido y miró hacia todas las direcciones hasta que pudo verlo en el costado de las tribunas con Lydia. Ella estaba un escalón arriba de él, ambos sonreían como los locos enamorados que son y un tierno beso por parte de ella fue suficiente para fortalecer los ánimos de Stiles para el juego.