Capítulo 12

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Antes de comenzar, quisiera agradecer su apoyo y comprensión, en serio que fue una gran ayuda en los momentos difíciles en donde los ánimos hacían mucha falta. Graciaaas ❤❤❤

Dedicaré capítulos a las bellas personas en muestra de agradecimiento

- - - Sugerencia aceptada - - -

¿Cuántas muecas puede una persona hacer?

La duda que abarcaba la mente de Malia, específicamente teniendo esa duda con Scott.

¿Cuántas muecas puede Scott hacer?

Lo recordó triste, alegre, enojado... Incluso lo imitó en alguno de los casos.

¿Por qué lo hacía? Simple, para así poder prepararse para dar una explicación acertada y coherente dependiendo a la reacción de él al confesarle la verdad.

Si fruncía las cejas y abría ligeramente la boca, significaría que estaría confundido. Pero si apretaba los dientes dejando a ver parte de su marcada mandíbula, estaría furioso.

Definitivamente, alguna de esas dos reacciones tenía que ser, era completamente imposible que el alfa se alegrara de que Malia le estuviera ocultando un secreto. Y para cada una de las reacciones, había una explicación diferente pero con la misma idea.

Entre algunas muecas que imitaba, no faltaba cuando estaba completamente concentrado, cuando reía por cualquier razón absurda o incluso cuando estaba a punto de estornudar.

Todo tipo de gestos le vinieron a la mente. Sin embargo, enfocó su mente en uno en especial. Recordó cómo el día anterior él la miró. Nunca había visto que Scott se comportara de esa forma, al menos no con ella. Los toques de las yemas de sus dedos nunca habían sido tan decididos y a la vez tan delicados. Recordar su cálido aliento chocar contra su cuello le seguía provocando un escalofrío en toda la columna. Vio muy bien que sus oscuros ojos se centraban completamente en que ella estuviera bien. De sólo volver a tener en mente que él se preocupó más que ella, le causaba cierta confusión y un sentimiento de rareza, no de la mala, claro, sino como si se tratara de haber descubierto algo nuevo.

-¿Qué haces?

Toda nube de pensamiento se desvaneció al escuchar la voz de James. Malia estaba acostada sobre su cama y sólo elevó un poco la cabeza para verlo.

-¿Hum?

-Por un momento te creí poseída y comenzaste a hacer esas muecas que en todo exorcismo hacen. Te faltaba girar por completo la cabeza para creérmelo en serio.

Ella no hizo mas que rodar los ojos tratando de no mostrar cualquier rastro de vergüenza, tal vez había sido demasiado obvia.

-Sólo ejercito mi cara. También es importante.

-Claaro.

Aquel tono indicaba que las palabras de Malia no le llegaban ni a los talones. Más que eso, decidió no darle importancia, si insistía en convencerlo más obvia sería la situación.

Al tiempo que ella se levantó de la cama, James se acurrucó del otro lado.

-Así que, hoy será el gran día.

Ella suspiró al tiempo que buscaba dentro de su armario.

-Sí, el día de hoy.

Pensarlo le causaba la sensación de miedo. No quería ver a Scott enojado. De alguna u otra forma, no hay forma de salvarse y salir intacta ante cualquier reclamo o regaño, pero, pensando más en las posibilidades, tal vez podía aligerar la caída.

And now? - ScaliaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora