Martes.
¿A quién puede interesarle historia? Porque a mi no, llevaba cinco minutos en esta clase y ya me estaba durmiendo. Es la segunda clase de la mañana, pero todavía no estoy muy despierta.
-Perdón profesor- tal vez ahora me despierte -Me retrase pero no va a volver a suceder.
-Era muy extraño que no llegara- respondió el profesor -Adelante señor Lewis.
Jack asintió al profesor y su mirada se dirigió a mi junto con una sonrisa, una muy linda sonrisa, la cual devolví de la misma manera.
Se dirigía hacia mi.
-Jack, te guardé un lugar junto a mi- una morocha increíble hizo que dejara de mirarme.
-Perdón Abby, se lo prometí a Lola.
Quedé perpleja, no esperaba eso, siguió su camino y se sentó a mi lado, su perfecto perfume invadió mis fosas nasales y sus intensos ojos claros me miraron.
-Hola Lola- dijo -¿Te molesta si me siento aquí?.
Molestarme? Cambia de lugar con Liam y vive conmigo.
-La verdad me gusta sentarme sola, pero da igual.
La clase seguía aburrida y no me desperté como pensé, me dormí aún más, Jack es súper aplicado en clase. Llevaba escribiendo tres hojas y yo ni siquiera puse la fecha.
-¿No te duele la mano por escribir tanto?- pregunté cuando el profesor se retiró por un momento y el rió.
-No, me gusta mucho historia.
Su sonrisa.
-Pensé que iba a despertarme en esta clase contigo, pero me estoy durmiendo más.
-Lo siento- respondió sincero -El viernes puedo ayudarte a despertar.
-¿El viernes?.
-Sí, hago una fiesta por mi cumpleaños y quería invitarte, Liam no está de acuerdo, no le caes bien, pero a mi sí.
¿No le agrado pero tuvo sexo conmigo? Más idiota aún.
-Me encantaría ir- y molestar a Liam.
-Perfecto- volvió a sonreír, quiere matarme.
-Silencio alumnos, ya regresé.
Dormir un poco más.
(...)
-Lola, despierta- una voz conocida se escuchaba a lo lejos.
Abrí mis ojos poco a poco y vi a Jack.
-La clase terminó.
Me levanté rápidamente ya nadie quedaba en el salón.
-Lo siento- respondí.
-No te preocupes, vamos al almorzar.
Llegamos a la cafetería y estaba llena de gente igual que ayer, pero no encontraba a Matt.
-Voy a buscar a un amigo.
-No, ven conmigo- respondió -Invita a tu amigo si quieres.
No me agradaba comer con Liam y Fatima, pero sé que les va molestar mucho y a Matt le va a encantar.
Asenti, él fue a sentarse y yo busqué a mi amigo. No lo veía por ningún lado, a lo mejor hoy no vino.
-Al fin te encuentro linda- conozco esa voz.
-Matt- me giré y lo abracé -Vamos, tengo un regalo para ti.
Nos acercamos a la mesa de los chicos malos.
-¿Qué hacemos acá?.
-Shhh- respondí -Jack.
Este se dio cuenta de mi presencia al igual que el resto.
-Lola, te esperaba, sientense aquí- señaló dos lugares a su lado y la sonrisa de Matt era impresionante, quedaba al lado de Nicholas.
Liam parecía no entender nada, me miraba con desprecio y su pecho subía y bajaba a gran velocidad. ¿Qué le pasa?.
-Lola, ven conmigo- no me dio tiempo a sentarme.
-Luego, tengo que comer- este ya estaba parado, todos nos miraban.
-¡QUE VENGAS TE DIGO!- salté del susto, en la cafetería se formó un silencio increíble.
-Me tienes harta con tus ordenes- grité igual que él, pero lo seguí.
Me llevó a un salón vacío y cerró la puerta tras de mi.
-¿Qué mierda haces en mi mesa con mis amigos?- seguía gritando y ya me alteraba -Te dije que te alejaras de mi, eso incluye mis amistades y los lugares donde yo estoy.
Estaba histérica y lo empuje como reflejo, chocó con la pizarra y se lo notaba sorprendido. Estaba a centímetros de él, podía mirarlo a los ojos, pero estos se habían oscurecido.
-Estoy harta de ti y de tus ordenes- respondí de la misma manera -Voy a estar con quién quiera, no fui a molestarte.
Tomó de mis hombros y me giró, ahora yo estaba contra la pizarra, el parecía acercarse cada vez más como si eso fuera posible.
-No es por molestar, es peligroso.
¿Peligroso?
-Deja de decir estupideces- respondí -Jack me invitó.
-¿Jack?- preguntó -Olvidé que eras una zorra que se acuesta con el primero que conoce ¿ahora es el turno de él?.
Sólo se escuchó el sonido de mi mano al golpear su mejilla y no lo puse evitar, lloré frente a él.
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TRAFICANTES
RomanceMi madre se casó con un "maravilloso" hombre, como consecuencia tuve que mudarme a otra ciudad, lo cual no me molestó para nada. ▪Nueva ciudad. ▪Nuevos amigos. ▪Nuevos enemigos. ▪Nuevos peligros. ▪Fiestas. ▪Drogas. ▪Alcohol. Y... ¿lo...