TRAFICANTES

22

(Maratón 1/2)

Domingo.

Unas manos rodeaban mi cintura y sabía perfectamente a quién le pertenecían. Me desperté por el sonido de la puerta, alguien la estaba tocando, pero no podía abrir mis ojos.

-¿Quién es?- la voz me salió media adormilada y fui abriendo mis ojos poco a poco.

-Soy mamá hija ¿puedo pasar?.

Ahora sí me desperté por completo, mi mirada iba dirigida a la puerta y a Liam, lo empuje al suelo para que mamá no lo vea, pero el muy idiota se quejó.

-¡Lola!- lo dijo casi en un grito y yo le hice señas de que se callara.

-¿Estás con alguien hija?- preguntó -Voy a entrar.

Al entrar yo me encontraba sentada en mi cama como si nada hubiera pasado, ella miró para todos lados y por suerte la ropa de Liam no sé veía.

-Creí oír a alguien- le restó importancia moviendo su mano y me habló -Te despertaba para que bajes a desayunar, Thomas y yo tenemos una noticia.

-Claro, en seguida bajo- respondí.

-¿No sabes dónde está Liam?- preguntó -Fui a su cuarto y no está ahí.

-No mamá, sabes que él siempre se va.

Asintió y se fue.

Liam y yo comenzamos a reír por lo que acababa de pasar, se levantó del suelo y se sentó a mi lado para abrazarme.

-Creo que debemos decirle a tu madre y a Thomas.

-No lo sé, tengo miedo de que mamá no lo tome bien.

-Aunque no quieran tendrán que aceptarlo.

Beso mi frente y fue a su cuarto a prepararse para baja. Yo hice lo mismo. Hice mis necesidades, me bañé y cuando estuve lista bajé.

Mamá y Thomas estaban muy cariñosos y contentos, me gusta verla así. Cuando vivíamos solas se la pasaba triste y cansada, era algo que no me gustaba.

-Aquí estoy- al escucharme se separaron, era un desayuno mucho más amplio de lo normal, debe ser una gran noticia.

Me senté junto a mamá y ambos me miraban sin decir nada, era un poco incómodo.

-¿Por qué esta reunión?- dijo Liam bajando las escaleras.

Yo lo miraba como idiota, esa camiseta negra se apretaba a su cuerpo y no podía pensar en otra cosa que no sean sus músculos y sus tatuajes.

-¿Dónde estabas?- preguntó mamá -Fui a tu cuarto y no te encontré.

-Estaba en mi baño, no viste bien- me miró y sonrió cómplice.

-¿Pueden decir de una vez la noticia?- ya me estaba poniendo de mal humor.

Comencé a comer, había un silencio increíble.

-Tu madre y yo- hizo una pausa -Vamos a tener un hijo.

-Estoy embarazada hija.

Me atragante con mi propia comida.

-¿No estás un poco grande para eso mamá?.

-¡Lola!- me regaño -Tengo treinta y ocho años, no estoy tan grande.

-Ya viene en camino, no puedo decir nada- no me gustaba en absoluto la idea de tener un hermano.

Ese niño va a llorar por las noches, va a gritar todo el tiempo, en resumen, arruina mi paz.

-Yo los felicito- habló Liam -Me alegro por ustedes.

Vi un poco de tristeza en su rostro y me entristecio demasiado, quería abrazarlo. Yo no tengo a mi padre, pero a él le faltan ambos y eso debe ser muy duro.

Suspire.

-Yo también estoy feliz por ustedes mamá- la abracé y comenzó a llorar.

Cuando terminamos de abrazarnos y felicitar a los futuros padres comenzamos a desayunar.

Todos reímos y estamos muy felices, es muy raro ver como mi vida cambió y lo feliz que me hace eso.

Tiempo después mamá comenzó a levantar todo, pero antes de que desapareciera a la cocina, Liam habló.

-Nosotros también tenemos que decirles algo- mi mirada se cruzó con la suya y no podía decir ni una palabra.

-¿Qué sucede cariño?- habló mamá.

-Liam.

-Lola- continuó ignorandome -Estamos de novios y estamos muy felices.

No puedo creer que lo haya hecho.

A mamá se le cayó todo y comenzó a negar con la cabeza.

-No, no puedo aceptar eso, Thomas haz algo.

-Eso complicaria todo en esta casa, nosotros podemos llegar a separarnos por su inmadurez.

-¿Inmadurez?- estaba irritada -¿Estar enamorada de Liam es una inmadurez? No saben de lo que están hablando.

-Lola calmate- habló Liam.

-No me importa lo que pienses Lola, esto se termina ahora, aunque tenga que mandarte a otro país.

-¡¿QUÉ?!-grité- Tú no aceptas esto mamá, pero hubo muchas cosas que tu hiciste que yo no aceptaba. Como venir aquí de un día para el otro y dejar toda mi vida atrás. Yo no aceptaba eso en aquel momento y tuve que hacerlo. Liam me hace feliz, me siento protegida con él y si no te interesa que sea feliz, entonces no pienso quedarme un segundo más aquí.

Subí a mi cuarto y escuchaba como Liam me seguía, al llegar a mi cuarto agarré mi mochila y comencé a guardar un poco de ropa.

-¿Qué haces?- habló él.

-Me voy, si tu quieres te puedes quedar.

-Jamás te dejaría sola.

Fue a su cuarto y tiempo después ambos estábamos bajando las escaleras.

-Lola, no salgas por esa puerta- la ignore, Liam tomó mi mano y salimos juntos.

Subimos a su auto y comenzó a conducir.

¿A dónde íbamos? No lo sé, pero mientras esté con él nada me importa, me da toda la seguridad y el cariño que necesito, con eso me alcanza.

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"Me asusta la manera en que te amo, es como si antes de ti no hubiera nada y después de ti tampoco."

Marcela Novoa.