Mi madre se casó con un "maravilloso" hombre, como consecuencia tuve que mudarme a otra ciudad, lo cual no me molestó para nada.
▪Nueva ciudad.
▪Nuevos amigos.
▪Nuevos enemigos.
▪Nuevos peligros.
▪Fiestas.
▪Drogas.
▪Alcohol.
Y... ¿lo...
Me encontraba en mi vestidor eligiendo que usar esta noche, obvio no iba a dejar de ir a la fiesta de Jack por el idiota de Liam, desde ese día que no hablamos.
-Claro hija- continuó -Con Thomas te compramos un nuevo teléfono -extendió su mano y me entregó una pequeña caja con un envoltorio plateado -No me gusta estar incomunicada contigo.
-Gracias mamá, no lo esperaba.
Sonrió y fue a buscar a Matt, era temprano para la fiesta pero le pedí que viniera para ayudarme a vestir.
Antes de que llegué abrí mi regalo, no puede ser. Es un iphone 7 plus color rosa, lo prendí y estaba listo para usar.
-Oh por Dios- giré hacía la puerta dónde se encontraba Matt, iba perfectamente vestido -He muerto y llegué al cielo.
Reí por su comentario.
-Patético- respondí -Pasa ya, no sé que ponerme.
-Yo tampoco sabría con tanta ropa, linda.
Comenzó a dar vuelta toda mi ropa.
-No- grité y este por la sorpresa dio un salto -Zapatos no.
-No tienes poder de decisión aquí.
Estuvo media hora buscando y buscando, yo sólo quería ponerme un jean y una remera, está frío afuera.
-No voy a usar vestido- parecía enojado, era divertido.
-Tú me pediste ayuda, ahora vas a ponerte lo que yo diga- tenía razón-Yo con tu cuerpos y tus piernas usaría vestido todos los días.
Me hizo poner un vestido corto y muy apretado, tenía un gran escote, básicamente no dejo nada a la imaginación. Era de color rosa, junto a zapatos que combinaban.
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Luego de vestirme arregló mi cabello y me maquilló, nunca creí que un amigo gay sería tan útil.
-Esta noche vamos a romper corazones- él y sus comentarios.
-Claro que sí bombón.
-Creo que debemos irnos- dijo -Sí algo pasa o nos separamos, me llamas.
