La Princesa de mis sueños. (Maluma).

Capitulo IV

Narra Aria.

Salí afuera un segundo. No soportaba las miraditas de José. En serio, ya no lo aguantaba. Era como si me hiciera una resonancia magnética con la mirada, literalmente.

- Aria...

Me di vuelta.

- Dime Juan...

- Lo que hoy... Yo... Amm... Me quiero disculpar -Rascó su frente y su brazo- Solo dije la verdad y creo que a tus padres no les cayó bien.

Bajo su vista. Me acerqué y puse una mano en su hombro.

- Descuida. Todo estará bien. No me molesta.

Él sonrió. Quite la mano de su hombro, volví a alejarme.

- Me caiste bien -Solté- En serio. Eres agradable.

- Gracias... Tu también me caíste bien. Deberíamos salir algún día y conocernos mas.

- Mmm... Si, quizás si. Aparte tu familia le cayó bien a la mía y lo mas seguro es que nos veamos frecuentemente.

- Si... Tal vez.

Nos quedamos en silencio. Yo miraba las estrellas y él me miraba a mi. Me incomodaba un poco, pero bueno. No tanto Como José.

- ¿Puedo decirte algo? No quiero ofenderte ni molestarte.

Lo mire de nuevo. Asentí con una sonrisa.

- Yo... Te conozco de antes. -Lo mire raro- He estado soñando contigo, solo que no sabia tu nombre. -Sonreimos- No querías contarme y yo insistia. Desde que mi papá dijo que Vendríamos, te estuve soñando.

Mordí mi labio. Algo nerviosa.

- Yo igual... Solo que eran pesadillas. Empezaba con un sueño lindo, pero después era un horror. Por eso te mire con miedo hoy.

- O sea ¿Nos soñamos mutuamente? Wow. Eso si es extraño.

Soltamos algunas carcajadas.

- Es cierto. Ha sido raro. Que yo Sepa, nadie se conoce por sueños.

- A veces si... Y debo decirte que me gusta soñar contigo.

Se acercó un poco a mi.

- A mi me encanta soñar contigo Aria. Te juro, ya me tienes rendido y apenas nos conocemos personalmente.

Hablaba con un cierto tono sexy y me derretía. Jamas me hablaron Así, menos a la distancia en la que estaba. Sentía su perfume embriagador, su calor estaba Matándome y su respiración chocaba con la mía. Era algo alto y yo tenia la cabeza levantada para verlo a los ojos.

- Juan...

Susurré. Cerre los ojos, evitando su mirada.

- ¡Juan! Chico, que su padre lo espera.

Me separe bruscamente de él.

Papá, acabas de arruinar todo.

- Si, ya voy -Sonrió- Hasta luego princesa.

Tomó mi mano y dejo un suave beso sobre esta, sonreí.

- Hasta luego...

Sonrió y se dio la vuelta para irse. Y yo para no quedar mal, fui atrás de él y mi papá.

- Esa cercanía... Mmm... Ya tengo yerno.

Murmuró papá y lo mire mal.

- Apenas que lo conozco.

- ¿Y los sueños? Vamos hija, escuche absolutamente todo. De paso le avise que ya se van.

- Papá... No me digas que...

- Descuida, él si me agrada. Ademas, ya es hora que tengas novio. 

Rodé los ojos. Me acerque a Luis y salude a él y a su familia cortésmente.

- No se olviden de mañana.

Sonrió mi mamá.

- Si señora, vendremos mañana.

Mire a Juan, él me guiño un ojo y sonrió. Solo baje mi vista.

- Nada de señora Marlli. Confianza, tranquila.

Se terminaron de despedir y se fueron.

- Así que Juan eh... Me sorprendes hija.

- ¡Mamá!

Ahora resulta que todo el Reino se va a enterar lo que pasó hace minutos. Que divertido.

- ¿Qué? Como que soy boba y no me di cuenta de las miraditas en la cena. Además, papá me dijo lo de afuera. Me parece bien, Juan y Manuela al menos tienen planes a futuro. Menos ese Jose. Ahg, me cayó malísimo.

- Opino igual. Pero, por favor, no empieces con lo del novio.

- Tranquila, de aca no sale. Bueno, me iré a dormir. Descansa hija.

Beso mi frente y se fue. Solo suspire y camine a mi cuarto.

Narra Juan

Me estaba a punto de acostar cuando Manuela entró a mi habitación.

- Eh negra, mira si estaba en boxers.

- No es algo que no haya visto antes -Levanto su hombro- Aunque me daría asco y jamas te volvería a ver. En fin, iré al grano. ¿Que paso que te desapareciste un largo rato?

Solté una risita. Además de recordar lo que pasó Con Aria, obviamente.

- Aria y yo... Nos hemos soñado.

Se quedo viéndome. Le explique toda la situación y lo que había pasado. Estuve a segundos de besarla, pero justo llegó su padre y bueno, no lo hice.

- Esa cosa rara -Rió- Ustedes harian linda pareja, en serio.

- No por ahora. Quiero conocerla y ver si me gusta en verdad.

Mis mejillas ardían un poco.
Segundo... ¿Yo poniéndome rojo de solo pensar en una mujer? Oh no, estoy muy mal.

- ¡Se puso colorado!

Mi hermana me pego con un almohadón.

- Ya basta Manu. En serio.

Rei.

- Vale, yo me voy a dormir. Mañana hablamos.

Salio de mi habitación. Me acosté y enseguida me dormi.

Volví a soñar con ella. Solo que con lo que pasó ayer en la noche. Eso... Tengo una canción.
Apenas me levante, agarre la guitarra y me puse a tocar alguna melodía buena. Hasta que me salio.

- He soñado contigo una y tantas veces...

Me quede en silencio y anoté lo que acabo de cantar.

- Y cada vez que te pienso mas quiero de ti...

- ¡Juan! Ya callate cotorra y baja a desayunar.

Mi mamá abrió la puerta y hablo. Yo solo reí.

- Ya voy ma.

- Ah, y buenos dias Chico Enamorado.

La cara se me transformo.

- ¡Manuela! ¡Te mataré!

La carcajada de mi hermana debe haber retumbado por toda la casa.

- Vamos hijo, hoy tenemos que almorzar con Patrick, Aria y Melanie. Así que duchate y ponte bonito que después del desayuno nos vamos.

Asentí. Cuando mamá cerro la puerta, pegue un salto y me fui a bañar. No se porqué pero quería verla de nuevo, quería estar con ella. Algo esta mal en mi y creo que es Aria.