Capítulo XX

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Narra Juan.

- Bonita, no llores.

Aria sollozaba en mi hombro mientras yo la abrazaba.

- Prometiste no dejarme sola...

Apenas susurró.

- Es mi trabajo Nena, me encantaría quedarme contigo... En un mes estoy de vuelta.

Se separó de mi. Sequé sus lágrimas y sonreí.

- No llores ¿Si? Estaré bien. Hablaremos cada día. Lo prometo.

Escuche los "Aww" de toda mi familia. Rodé los ojos, haciendo que Aria sonriera.

- Te quiero.

Volvió a abrazarme.

- Yo igual bonita.

Bese su cabeza repetidas veces.

- Juan... No es por mala onda, ni corta chorro, mucho menos insensible o descorazonado pero ya es hora de irnos.

Escuche a Nick a mi lado. Asentí, apretando a Aria un poco más.

- Cinco minutos para que termine de despedirme, ya voy.

- Te esperamos en la manga para ir al avión.

Aria se separó de mi, con un intento de sonrisa.

- Cuidate mucho, por favor.

- Lo haré. Tu igual, y no hagas desastres.

Sonreí acercándome a sus tentadores labios.

- Echare mucho de menos esto.

Dejé un beso corto sobre sus rosados labios. De nuevo escuche los empalagantes "Aww".

- Te esperare aquí cuando regreses...

- Esta bien bonita. Te quiero mucho ¿Si? Ya no llores, estaremos juntos.

La bese de nuevo.

- Algún día quisiera ir contigo...

- Lo harás, no ahora, pero lo harás.

Sonreí soltando su mano para despedirme de mis papás, hermanos, tíos, primos y... Bueno... El papá de Aria.

- Cualquier cosa nos llamas.

Gritó mi tía mientras me alejaba.

- Lo haré. Nos vemos.

Sonreí y fui junto a Nick y otros compañeros.

- Esperemos que tus ensayos salgan bien y no te trabes pensando en esa chica.

Bromeó Santi A.

- No prometo nada, pero quizás no me trabe.

Subimos al avión. Mire por la ventanilla. Pude ver a Aria, corriendo y metiéndose por la manga de la cual acabo de salir.

- Dile al piloto que se detenga.

Me levanté corriendo. No se que pasa, pero tengo que estar con ella.

Narra Aria.

Miles de pensamientos horribles se me pasaron por la mente cuando Juan subió a su avión. Empecé a correr en su direccion. Quisieron detenerme mas de una vez, aunque al reconocerme no lo hicieron. Soy la princesa de España y por ende yo tengo más poder y les costaría el trabajo. Si, suena terriblemente egocéntrico pero es la verdad.
Al llegar a donde estaba Juan, lo abrace fuertemente.

- Quiero ir contigo -Lloré en su hombro- No quiero dejarte. No me interesa la ropa y demás, yo me comprare, pero llevame contigo.

Miro atrás y llamó a alguien.

- Dani, pregunta si se puede poner a alguien mas.

Escuchaba a mi papá gritar, venia hacia mi.

- Tengo miedo Juan...

- Narizón, si se puede.

Juan se separó de mi y sonrió.

- Tranquila. Sube al avión. Yo voy enseguida. Mi asiento es el tercero a la derecha.

Me dio un beso rápido y fui detrás del gran hombre.

- Veo que tienes loco al muchacho.

Comentó este corriéndose para que suba al avión.

- Lo siento que quiera irme con ustedes... Solo...

- Descuide princesa, suba tranquila.

Subí al avión. Habían varias chicas y el resto todos hombres. Eran completos desconocidos para mi, aunque yo para ellos no.

- Princesa... -Murmuró una chica- ¿Usted...?

- Si, Yovanna, viajara con nosotros.

Interrumpió Juan.

- Dijo tu papá que te cuide con El alma, sino me mata. Y que no te despegues de mi.

Besó mi mejilla.

- Te los presentare...

Juan señalo a cada uno. Las pocas chicas eran sus bailarinas. Algunas mujeres eran prensa personal y demás. El resto de los hombres eran sus músicos, mánager y seguridad. Este tipo gigante con el que hablé, era uno de sus seguridad.

- ¿Mas tranquila?

Preguntó después de habernos sentado y que el avión haya despegado.

- Si -Tome agua- Lo siento, es que tuve pensamientos horribles y no podía dejarte ir

Sonrió. Me apoye en su hombro y lo rodee con mi brazo.

- No me molesta que vayas... Es más, es mucho mejor así. Me transmitiras seguridad en mis conciertos y sera mucho mejor.

Besó mi cabeza, sonreí.

- ¿Me dedicaras canciones?

Bromeé.

- Quizás algunas.

- Solo bromeo.

- De todas formas lo haré. Es mas, sería sorpresa y acabas de arruinarlo.

Soltamos una carcajada que era fija que se escuchaba desde abajo.

- En serio, te dedicare alguna canción.

- Esta bien... Ahora solo quiero dormir un rato

- Genial... Descansa Bonita

Gire su rostro y besé sus labios. No me importaba que tuviéramos mas de 50 personas al lado, solo estar con él y desaparecer de este mundo por un segundo.

Me encanta.

La Princesa de mis sueños. (Maluma).Donde viven las historias. Descúbrelo ahora