Los ojos de Liam se abren de golpe. Puedo ver que su cara pierde el color, y como su pecho sube y baja con rapidez, al igual que mis lágrimas. Rápidamente se aleja de mi, sentándose en la orilla de la cama dándome la espalda, sus hombros comienzan a subir y bajar con rapidez, se que esta llorando, y sus sollozos me lo confirman. Me debato en si acercarme a él, o quedarme donde estoy.
—¿A donde te iras?—Susurra y me quiero golpear al escuchar lo rota que suena su voz. Se gira mirándome de reojo, puedo ver sus lágrimas bajar por sus mejillas una tras otra.
—Liam..
—No, Liam nada. ¿A donde te irás?—Interrumpe volviendo la vista al frente, dejando de hacer contacto visual conmigo.—¡Estabamos tan bien! Podíamos con ellos.—Sus sollozos se hacen cada vez más fuerte.
Gateando llegó hasta él, abrazándolo por detrás, se tensa, para al segundo, ya me tiene en su regazo, apretándome a él con fuerza, su cara se esconde en mi cuello, mojándolo con sus tibias lágrimas. Y no pudo creer lo rápido que las cosas cambian, siempre era yo quien buscaba protección, ahora es al revés, y no se que hacer. Porqué es mi culpa.
—Me gustaba pensar que nuestro amor iba a llegar mucho más lejos de donde llegó.
Me alejo de él, y lo miro a los ojos, estoy confundido. Sus ojos están rojos, y llenos de lágrimas, y sigo pensando que son los ojos más hermosos que vi, pero no es tiempo de halagados, no cuando todo está tan mal.
—No vamos a dejar de estar juntos, Liam. Yo te prometí que íbamos a estar juntos por siempre.—Susurro, pegando mi frente a la de él, jugando con nuestras narices. Cierro los ojos, y pego mis labios a los suyos. Me sorprendo al ver la rapidez con la que se aleja de mí.
—Suenas tan egoísta Zayn. No puedes decir que te iras, pero aún así seguiremos juntos. Tu seguirás con tu vida lejos de mí, ¿y aún pretendes que me quede sentando esperando a que te acuerdes de mí?
Sus lágrimas vuelven a bajar por sus mejillas, juega con sus dedos, evitando mi mirada. Trago saliva con dificultad al saber que en menos de un día ya no nos veremos, ya no voy a tener su cara a centímetros de la mía cuando dormidos, ni voy a despertar por sus besos, ni que voy a escucharlo cantar en la ducha, tampoco voy a ser el causante de su sonrisa, y menos de su risa. Y sólo quiero volver el tiempo atrás, y no haber tomado ese decisión justo cuando estaba cegado por el enojo. Porqué Liam vale cada prohibición que ellos pedían, porqué Liam vale todo, pero me he dado cuanta tan tarde de eso, cuando lo estoy perdiendo.
—No lo entiendo ¿que hice mal?, ¿que fue lo que no te gusto de mi?, ¿mis ojos?, ¿mi sonrisa?, ¿mi voz?—Susurra sollozando. Mis lágrimas tapan mi vista, apretando con fuerza mis ojos, dejó que se deslicen por mis mejillas.—quizás ¿no fui lo suficientemente tierno para ti? ¿o no fui tan gracioso como lo creías?, ¿querías mas seriedad en mi?—Habla con rapidez sin dejarme decir nada. Sólo estoy a centímetros de él, escuchando como se echa la culpa.—de cualquier manera creo que ya no importa pues te vas a ir de todas formas.
Lo abrazo con fuerza, y él me corresponde al segundo. Pegándome a él todo lo más que puede. Su rostro vuelve a esconderse en mi cuello. Lo siento temblar bajo mis brazos, y sus lágrimas deslizarse por mi cuello, una tras otra.
—¿Que has hecho, Zayn?—Susurra sin despegar su cara de mi cuello, se pega más a mi, abrazándome por la cintura.—¿Por que has hecho eso, bebé?
—Lo siento tanto, fue el enojo, ellos no quería incluir mi canción en el nuevo álbum. —Murmuro.—nuestra canción. —corrijo. Y por primera vez en el día, Liam me dedica una pequeña sonrisa, pero no llega a sus ojos tristes. —Y el enojo, me hizo ir a hablar en Modest, Liam pedí salirme de la banda, pero aún siguen manejando mi vida.
—Eres un idiota.
—Lo sé, te estoy perdiendo, y es lo más idiota que he hecho. Me ordenaron no poder tener contacto con ninguno de ustedes. Pero le dije que contigo lo haría de todas formas.—Aclaro rápidamente.
—Ya no importa nada, Zayn. Los chicos son parte de mi, no puedes decir eso, a ellos también les va a doler el que te vayas. Deja de ser tan egoísta, de sólo pensar en tu bien estar. Si ahora te irás, es porqué sólo pensaste en ti, y en lo mejor para tu vida. No en mi, ni en ellos, no pensaste en lo mucho que nos iba a doler el que te vayas, te alejes de nosotros.
—Liam...
—Así que cuando mañana o no se cuando te vayas, por favor no mires atrás, porque seguro voy estar destrozado, y no quiero que me mires de esa manera.
Limpia rápidamente sus lágrimas que comenzaron nuevamente a caer por sus mejillas sin control. Miro mi reflejo en sus ojos, y no puedo creer que sea yo el causante de tanto dolor, no cuando me costo tanto poder estar con él, luego de tantos años de suspiros por lo bajo, y sonrisas que sólo eran para él, aunque Liam no lo sabía. No puede creer que esperar tantos años para por fin poder besar sus labios, tomar sus manos, y compartir mi cama con él, se vayan a la basura en un abrir y cerrar de ojos.
—Se que posiblemente mañana eso ya no exista. Por favor, dejame estar contigo una última vez.
—Hazme el amor, Li.—Pido a través de lágrimas.