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Abro los ojos y lo primero que me encuentro son un par de grandes ojos mirándome fijamente. La sonrisa de Zayn se expande rápidamente, como si hubiese estado mirandome todo este tiempo esperando a que despierte. Una de sus manos de alza hasta llegar a mi mejilla y descansar allí. Me pego a su caricia sin poder creer que aún este aquí. Su dedo se desliza hasta mis labios entre abiertos.

—Buen día.— Susurra tirando suavemente de mi labio inferior. Lo suelta antes de inclinarse y dejar un pequeño beso sobre ellos.

No digo nada, continuo mirándolo. A lo que él frunce el ceño sin entender mi silencio. Se remueve en la cama sacando su otro brazo de bajo la sabana para rodearme la cintura con el. Dejó salir un suspiro pegandome a su cuerpo.

—¿Todo bien?— Pregunta luego de segundos sin haber respuesta de mi aparte. Asiento.—Li...

—Aún estas aquí.

—¿Querias que me vaya?— Pregunta rápidamente asustado. Sus ojos pierden el brillo que tenían hace segundos, mientras deja de sonreír. Traga saliva esperando por una respuesta que no tarda en llegar.

Niego.—No.

Toma mi cara entre sus tibias manos, pegando sus labios a los mios por unos segundos. Cierro los ojos deseando poder quedarme siempre con él. Deja un último beso antes de separarse, pegando su frente a la mia. Una sonrisa crece en su cara, mientras sus ojos se elevan y me miran. Sus dedos acarician mis mejillas suavemente.

—¿Nos levantamos?— lo interrumpo rápidamente cuando veo que quiere decir algo . La expresión de su cara cae por cortos segundos, antes de volver a sonreir. Asiente.—¿Quieres desayunar?— pregunto una vez que me levanto de la cama para ir a buscar algo de ropa para ambos.

Me pongo un pantalón de algodón y tiro una igual en las manos de Zayn. Él se lo pone y se acerca a mi.

—¿Aun tiene esa remera amarilla y roja?— abre una de las puertas de ropero y comienza a buscarla por su cuenta. Corre algunas perchas hasta dar con la remera escondida detrás de todo.—¡Aqui!

Esta desgastada y de colorida por tener ya tanto uso, pero aun así Zayn se la pone con una sonrisa. Cierra la puerta del ropero y se gira a mirarme. Su mano se estira queriendo llegar a la mia metida dentro del bolsillo de mi pantalón. Rápidamente la saco y la entrelazo con la suya.

—Sí, desayunemos.

Bajamos tomados de la mano hasta la cocina. Zayn me pide que me siente, que es él quien se quiere encargar de la comida. No me opongo, a lo que rápidamente comienza a sacar cosas de la heladera para preparar el desayuno.

Tomó el control sobre la mesa y enciendo la televisión de la cocina. Tanta buena suerte que lo primero que veo son los videos de los premios anteriores, donde la pantalla esta iluminada por Zayn y Gigi tomados de las manos en la alfombra roja.

Quiero apagarlo, realmente estoy tan cansado de todo esto. Pero entonces comienzan a hablar sobre ellos, de como Gigi termino la noche sola, sin su novio a su lado. Zayn se gira al escuchar su nombre salir de una de las conductoras mientras pregunta que tan importante era lo que tenia que hacer a tal punto de dejar a su novia sola.

—Apaga eso.— pide dejando de hacer la comida para acercarse a mi. Trata de quitar el control de mis manos al ver que no tengo intensión de apagar la televisión, mientras continúan hablando de ellos. —Por favor.

—¿Por favor?— pregunto apagando una vez que desvían el tema. Lo miro a los ojos. Él me agradece mientras se sienta frente a mi.—¿Por que no quieres escuchar? ¿No es acaso esa tu novia?

Zayn no dice nada. Entonces me estoy levantando rápidamente de la silla para alejarme de él. Escuchó sus pasos seguirme por detras.

—Liam.— su brazo toma el mio, haciéndome girar.— escucha...

—Quizá deberias volver con ella, antes de que vuelva a acostumbrarme a tener solo para mi.

—Ella no es nada.

Me alejo de él, sentándome en el sillon, a los segundos me imita sin dejar de mirarme, pongo mi vista en algun punto fijo del living. Sabiendo que si lo miro, voy a quebrarme nuevamente.

—Tu no puedes venir y decir que no es nada.— Susurro frunciendo el ceño, rechazando su tacto cuando su mano quiere tomar la mia. .— No puedes decir eso, si es por ella que me has cambiado. Algo tiene que ser en tu vida, para que cada maldita foto que te tomen está tomando tu mano.

—Es lo que ellos piden.— susurra. Rápidamente lo miro, ya no me esta mirando. Sus manos entrelazadas paracen ser lo más interesante en este momento.

No tiene que decir otra palabra más, porque ya lo se todo, también lo vivi, pero pensé que yéndose de la banda Zayn era libre para mostrarse con quien quisiera, sin que le tengan exigir. Trago saliva pasándome las manos por la cara sin tener idea que decir.

Sus ojos se alzan para poder mirarme cuando luego de minutos no digo nada. Corro rápidamente la vista de él, mirando cualquier otra cosa.

—Bebé...

—No.— susurro.— basta, ya. Estoy tan cansado de repetir siempre lo mismo, de verte y saber que voy a sufrir porque de alguna forma u otra tienes que irte. Esto no me hace bien.

Sus dedos toman mi barbilla obligándome a mirarlo, su cara completamente cambiada, no hay rastro de las sonrisa que tenia solo hace minutos. La yema de sus dedos se pasan con suavidad por mis mejillas llevándose las lagrimas que nunca supe que solte.

—No llores por favor, no soporto verte llorar.— deja sus manos descansar sobre mis mejillas, sus ojos brillan por las lágrimas acumuladas. Asiento tratando de dejar de hacerlo soltando un sollozo.—perdón por cada lágrima que te hice derramar, no merezco ninguna. Perdón por ser un cobarde y no poder mostrarle al mundo que la única persona que amo eres tu.
Junta nuestras frentes. Sus labios buscan rápidamente los mios, dejando pequeños besos húmedos. Se separa luego de segundos, lo suficiente para mirarme a los ojos.

— Perdón por todo, eres lo que más quiero en este mundo, y lo único que te hago es llorar.

Escondo mi cara en su cuello, abrazándome con fuerza a su cintura sin decir una palabra. Zayn me envuelve en sus brazos de la misma forma. Sus labios buscan mi oído.

—Dejame solucionar todo, voy a dejarla, lo prometo.— se quiebra cuando termina de hablar, como si fuese a llorar.

Saco mi cara de su cuello para poder mirarlo. Me sorprendo al ver lagrimas sobre sus mejillas sonrojadas y sigo pensando que es lo más hermoso que puede existir. Quiero sonreír cuando lo escucho, pero me siento egoísta al pensar que lo estoy atando a mi.

—No lo hagas.— murmuró con todo el dolor de mi corazón. Él ceño de Zayn se frunce en completa confusión. Trato de no volver a llorar al saber que tengo que dejarlo ir nuevamente.— Tu la quieres, no puedes hacerte esto.

Desenreda sus brazos que me rodean para alejarse unos centímetros de mi cuerpo. Me acomodo apoyando mi espalda contra el respaldo del sofá. Su celular comienza a sonar interrumpiendo cualquier cosa que quiera decir.

Bajo la vista al aparato sobre el bolsillo del pantalon que continua sonando, Zayn no hace nada por sacarlo de alli y atender. Al subir la vista y pedirle que lo haga, me encuentro con sus ojos mirándome fijamente, sin prestar atención a nada mas.

—¿No piensas entender?— susurro. Zayn saca el celular del bolsillo, la pantalla iluminada con la llamada entrante, "Gigi" es lo que leo. Me remuevo incomodo sobre el sofá sin saber bien que hacer.

Su dedo se desliza y entonces el ruido se deja de escuchar. Vuelve a guardar su celular en su bolsillo y ahora mucho menos se que decir. Escuchó un pequeño suspiro, que luego se hace mas grande queriendo volver a tener mi atención. Pero continuó mirando su bolsillo, esperando el momento en que vuelva a sonar el celular.

—¿Sabes cuantas veces le dije que estaba bien...— Su mano se desliza hasta mi muslo, donde aprieta suavemente. Lo miro.— y no me lo pregunto dos veces?, ella no me conoce.— susurra. Se acerca los centímetros que nos habíamos separados. Nuestras narices se rozan, mientras continua mirándome.— ¿Como podría quererla?

I won't mind. ›ziamDonde viven las historias. Descúbrelo ahora