My destined ||Suga Y Tu||

Sesenta y cuatro

Jin Pov.

Sabía que no era mía.

Estaba asustado, no quería admitir que él tenía razón.

Pero había perdido nuevamente contra el. Yo no podía ganarle, ni tampoco podré hacerlo, jamás.

Pero necesitaba confirmar que _____ decía la verdad, quería confiar en sus palabras. Yo aún la amaba, demasiado.

Quería ser feliz a su lado.

Pero si es sólo para que YooRi pueda vivir con ambos padres, y no es nada romántico realmente, no quería hacerlo, no quería vivir engañado toda mi vida.

Necesitaba escuchar aquéllas palabras de su parte, pero al estar en frente suyo, las palabras no salían de mi boca.

¿Si le digo que ella es hija de YoonGi, que pasará con nosotros?

Tenía miedo.

No pude decirle la verdad.

Y al parecer, YoonGi tampoco planeaba hacerlo.

"Nunca hice nada bueno por ti..Se feliz, y cuida bien de ambas."

Fue lo único que dijo antes de alejarse.

Le mintió a TaeHyung y los demás, diciéndoles que ella era realmente hija mía.

Todo está bien ahora, ¿No?

¿Pero porqué dolía tanto?

No se sentía nada bien.

Lo siento, _____.

YoonGi Pov.

¿Tomé una buena decisión? No estaba muy seguro.

Pero ya no había vuelta atrás.

Decidí que iba a mudarme y a olvidarlo todo.

¿Cuantas cosas habían sucedido que nos prohibió a mi y a _____ a estar juntos? El destino habló, lo único que sucedía cuando lo estábamos eran cosas malas, no dejamos de lastimarnos mutuamente.

Pero ella parecía muy feliz en este momento.

No quería arruinarlo.

Igual YooRi, ella quería mucho a Jin.

— ¿Podría darme otro? — hablé, frunciendo el ceño levemente.

— ¿Seguro? Hombre, es una bebida fuerte.

— Tengo un buen aguante.

— Para seguir consciente luego de cuatro copas lo creo.— respondió riendo levemente, mientras me encogía de hombros y tomaba con rapidez la siguiente.

Me levanté dispuesto a salir del lugar.

— Ya, ¡he dicho que quiero otra! — pude escuchar aquélla voz familiar detrás de mi.

Ella estaba allí. ¿Desde cuando? ¿Como no pude notarla antes? ¿Y quién era el?

Estaba hablando con un chico, cual no era Jin, gritando más bien, mientras el le entregaba otra copa con una sonrisa en su rostro..Asqueroso.

No lo hagas YoonGi, no te metas.

Me dije eso a mi mismo.

El hombre reía, acercándose aún más a ella.

No es de tu incumbencia YoonGi, ve a casa.

Mi mente seguía diciéndome aquello.

— ¿Que diablos haces? — pero antes de darme cuenta me encontraba en frente de el, dispuesto a golpearle y borrar aquélla sonrisa.