ADN. (Niall Horan)

Capítulo 16: Luke y peleonas

Holiii<3 Bueno, estaba inspirada y me puse a escribir. Total, que he hecho varios capítulos así que... MARATÓN 1/3
Punto de vista de Alba
Salgo del instituto con mi móvil en la mano marcando el número de Beth. Pero esta chica, como es normal en ella, no me contesta porque según el móvil esta fuera de cobertura. Dios, necesito un móvil nuevo. Pongo el móvil en mi oreja y salta el contestador: Hola, Soy Beth y ahora mismo no te puedo atender. Así que deja tu mensaje después de la señal. Besos!
- Beth, te he llamado unas cuatro mil veces... Dónde coño estás!?!?! Dando la vuelta al mundo o qué? Llámame cuando escuches el mensaje.
Colgué y guarde mi teléfono en mi bolsillo.
Caminé hasta llegar fuera del instituto.
A lo lejos observe un gran coche negro con un chico de pelo rizado sobre apoyado mientras fumaba un cigarro.
Mordí mi labio inferior incoscientemente al verlo. Como podía ser tan jodidamente sexy?
Di un gran suspiro y me acerqué a él. Me sonreía desde lejos marcándose todos sus hoyuelos. Cuando estaba a escasos centímetros de él arrojo su cigarro al suelo.
- Hola, linda.- Dijo sonriéndome.- Has tardado en salir.
Lo miré de arriba a bajo. Llevaba un pantalón negro algo pegado a su cintura y algo caído. Una camiseta holgada negra. Y una preciosa gabardina negra que le llegaba hasta la cintura. Y unas preciosas botas marrones. Como dije, sexy.
- Porque...-. Me acerque más a él y le sonreí.- He hecho el examen de inglés.
- Si?.- Dijo él.- Y? Cómo te fue?
- Me fue genial!!.- Emepecé a saltar.- Gracias, gracias, gracias!! Gracias, Harry!! Eres un gran profesor!! Si, si, si, si!!.- Le abrece.- Gracias.
Puso sus manos en mi cintutra y la me acarició.
- Me alegro.
-Eres mejor que, Beth.- Dije sonriendo.- Y eso que ella tiene descendencia inglesa.
Me miro frunciendo el ceño.- En serio?
- Si! La madre es inglesa.- Dije con una mueca.- Pero no se lleva bien con ella.
- Bueno, seguro que tienes hambre.- Se giro y me abrió la puerta del asiento del copiloto.
- Oh dios mio!.- Me miro asustado.- Tienes un porsche cayanne negrooooooo!!
- Te gustan?.- Preguntó sorprendido.
- Gustarme?!?! Me encantan!!!
- Pues, señorita. Sientese y disfrute del viaje.- Me sonrió amplíamente.- Comeremos en un sitio esplendido.
- Una pizzería?
- Emm... Si.
Reí y entre en el coche.
Cuando llegamos a la pizzeria, me abrió la puerta dejandome pasar primera.
- No pense que fueras tan caballero, Styles - le mire coqueta .
- Solo con lo que quiero, preciosa. Me guiñó y cogió mi mano.
Entramos y las chicas que habían allí se quedaron mirando a Harry. Normal. ¡Es el tío más sexy que he conocido! Pero me agobiaba, porque yo era su acompañante.
Se acercó a la camarera.
- Mesa para dos, por favor.- dijo Harry con su voz ronca.
- Tienen reserva? -Preguntó ella..
- Sí, a nombre de Styles, Harry Styles.- apretó mi mano.
- Muy bien, pasen por aquí - cuando pasamos babeo por Harry y a mí me miró mal, que infantil.
Nos sentamos y pedimos la comida, cuando nos la trajeron, empezamos a hablar.
- No te agobias?- pregunté.
- De qué?
- De que todas te miren- bufe.
- Celosa?. -sonrió de lado.
- Celosa? De qué?- fijé mi mirada con la suya.
Se acercó a mí
- Tranquila preciosa. En estos momentos solo quiero que me mires tú.-Me guiño un ojo-
- Oh, pues si miras a todas partes verás a tus fans. Rodé los ojos.
- Vaya, pues que miren también esto.
Se acercó a mí hasta fusionar sus labios con los míos. Era un beso dulce y tierno, aunque viniendo de Harry podría pensar que era un método fácil para llevarme a la cama.
Terminó el beso mordiendome el labio inferior.
- Vaya, eso fue jodidamente sexy.-Dije viendole.
- Besas de muerte, nena.- Me guiño.
- Las moscas se han ido.-Dije viendo como las "fans" de Harry ya no miraban.
- Normal, ¿acaso no ven al bellezón que tengo delante?- Dijo coqueto.- Quiero repetir.- Dijo acercándose a mí.
Puse una mano en su pecho empujandolo hacia atrás.
- Alto ahí Styles- avisé riendo- Solo fue para que dejaran de mirarnos, no te emociones.- Le guiñe y le sonreí.
- Nunca pensé que coneceria a una persona igual que yo- Gruñó.- Peleona, me gusta- Mordió su labio inferior lentamente.
Punto de vista de Niall.
Había llevado a Beth a un gran restaurante. Bueno, no era un gran restaurante. Pero para mi lo era. Preparaban el mejor pollo frito de la ciudad. Nando's. Si fuera millonario compraría esta empresa y le cambiaría el nombre. Poniedole: Niall's chicken. Qué? Todo el mundo tiene un sueño y ese es el mío.
- Segura que nunca has estado aquí?.- Pregunté por décima vez a mi acompañante.
- Que no! Nunca!.- Dijo riendo. Me encantaba hacerla reír. Pero la pregunta era... Por qué me encantaba?
- No te creo.
- Es la verdad.
Caminabamos para salir del restaurante después de estar una hora dentro hablando y compartiendo la comida. Me sentía jodidamente bien cuando estaba a su lado. Y eso... Me asustaba.
Le abrí la puerta del restaurante dejándola pasar a ella primero.
Abrochó mi chaqueta hasta su cuello.
- No he conocido a chica más friolera que tu.
- Que pesado, Niall!.- Reí a carcajadas.
Rocé mi mano con la suya y suavemente la cogí. Me sonrió cuando ella lo notó y me apretó la mano. Esta, es la mejor sensación del mundo.
- No estoy acostumbrada a este... Frío.
- Pero llevas aquí mucho tiempo, no?
- Bueno... Si...- Dijo como conclusión.- Pero odio este frío.- Reí levemente.
- Anda. Ven aquí.- La abracé contra mi cuerpo para darle calor. 
Nos acercamos al coche y saqué la llave de mi bolsillo.
- Niall James Horan.- Dijo una ronca voz detrás de mi.
- Luke...- Me giré hacia él y coloqué a Beth detrás mia. Este chico no me gusta nada.
- Cuanto tiempo, amigo.- Dijo acercándose. Apreté mis puños y mi cuerpo se empezaba a tensar. Creo que Annabeth lo notó, ya que cogió mi mano y me tranquilizó.
Levantó su mano con intención que se la chocará pero no le di el gusto.
- Qué haces aquí?
- Nada, solo me pasaba a saludar.- Miró a Beth de pies a cabeza.- Hola, preciosa.
- Hola.- Dijo ella algo asustada. Lo noté en su voz.
- Beth, entra en el coche.- Me miró preocupada.- Entra.- Asintió y obedeció.
- La tienes bien domesticada.- Mi sangré ardió cuando habló así de ella.
- Qué quieres?.- Pregunté seco.
- Quiero lo que es mio.
- Qué?
- Lo que has oído. Te llevaste algo que es mío.
- Yo no me llevé nada.- Dijo furioso.- Tu fuiste el que me arrebataste todo.
Rió negando con la cabeza.- Es lo que tiene... Amigo.
Todo mi cuerpo ardió y metí mi mano detrás de mi espalda con intención de sacar mi arma. Pero su mano me apretó mi hombro.
- De verdad quieres que todos sean testigos de como matas a un hombre que aparentemente no te hizo nada?.- Apreté mi mandíbula.- O peor... Quieres que ella sea testigo?.- Apunto hacia Annabeth con una sonrisa burlona.
Aparte su brazo de mi hombro con violencia.
- Es preciosa.- Dijo mirando al interior del coche.
- No te acerques a ella.- Le amenacé.
- Me he alegrado de verte.- Se alejó unos pasos de mí.- Y vigila tu espalda.- Se alejó con aire burlón.- Ah!.- Grito volviendose.- Y la suya.
Entré en el coche con violencia y cerré la puerta dando un gran portado.
Arranqué el coche y salí a gran velocidad del aparcamiento.
Miraba el contador de kilómetros.
30km/h, 40km/h, 50km/h.
Iba adelantando coches por donde podía.
70km/h, 90km/h, 120km/h....
- Niall! Para!.- Gritaba Beth.- Vamos a chocar!! Niall!
150km/h.
Salí de la ciudad a campo abierto.
- Niall!! PARA!... Por favor.
Oí su suplica desesperada y frené en seco.
Salí del coche y empecé a pegar patadas a todo lo que pillaba.
Había varios contenedores que tiré al suelo. A todo le pegaba puñetazos y patadas mientras Beth me gritaba.
Hubo un momento en que me descontrolé y ella lo noto.
Cogió mi brazo y se colocó delante de mi.
- Niall. Basta.
Mi pecho subía y bajaba rápidamente, ella intento calmarlo acariciandolo. Y dios, lo consiguió.
- Bata, por favor.- La miré a los ojos y estaban aguados. Mierda, la había hecho llorar? Pero en su cara había algo más que lagrimas... Habían gotas de lluvia. Esta tan metido en mi mente que no me di cuenta que empezó a llover. 
- Yo...
Me separé de ella unos centimetros.
Mire mis nudillos. Algo ensangrentados y rojos. Eres un puto bruto, James.
- Te he hecho daño?.- Me odiaría se le he hecho algo en ese momento en el que Niall, no era Niall. Sino James descontrolado.
Ella negó.- No.- Suspire aliviado. Se acercó a mi y cogió mis muñecas.- Te duelen.
-Cogerás un resfriado, Beth.- Me acerqué al coche y abrí la puerta del copiloto.-Sube.
Sin decir nada subió al coche.

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