Tres Espadas

Guerrero imparable.

—No... —jadeo—. Estaré muerto para ese entonces —dice Cristofer con naturalidad. Como si no fuese la gran cosa, por eso decidí no tomarme enserio sus palabras y seguir adelante.

Además, "¿por qué debería de preocuparme, por un tipo que acabo de conocer?".

—Pues no hay de otra —dejó de pensar y comienzo a cargar mi ataque, el cual no fallaría al estar a corta distancia y probablemente me otorgaría la victoria en un instante—. Tendremos que acabar con esto ahora.

Reproducir vídeo ahora y escuchar hasta que termine la pelea.

—Digo lo mismo —inhala profundo y cierra los ojos.

Se coloca de lado, levanta sus brazos poniéndose en guardia. Su pierna izquierda se colocó delante, mientras que la derecha va hacia atrás (como si fuera a patear algo que está en frente de él). Su postura es firme y justa, contiene un momento el aire en sus pulmones, y al exhalar, su cuerpo expulsa una onda de calor. Habré los ojos dejando ver un brillo color amarillo en sus iris.

—¿Eso es, imp...? —alarmado no termine la frase y antes de que él intentara hacer algo, libero mi ataque.

Cristofer hizo el movimiento típico de una patada giratoria, pensé por un instante que bloquearía mi ataque, pero lo que hizo, fue algo que pensé que será imposible de hacer sin una espada. Denicha lo avía explicado muy bien.

"Lo que llamas corte fantasma, no es más que cortar el aire con tu espada, aplicando una gran cantidad de fuerza".

"¿Cortar el aire con una espada, tiene mucho más sentido, que cortar el aire con una patada, no?", porque este este tipo lo había logrado.

—¡Demolición! —grita y una onda cruza el espacio superando la velocidad del sonido e interceptando mi corte fantasma amistad de camino.

Mi ataque se des hace en el aire, pero el del continua hasta golpearme de lleno. Salgo lanzado contra la jaula y una descarga eléctrica es aplicada al instante. No tengo tiempo para quejarme, cuando ya Cristofer con el pie por encima de su cabeza, lo deja caer sobre mí con gran potencia, sin embargo, logro girar a tiempo para esquivarlo. Al ponerme de pie, un puñetazo me da la bienvenida sobre la mejilla. Recorrí una larga distancia en dirección opuesta, pero antes de encontrarme con la reja metálica, incrusto la espada en el suelo de la arena para frenar.

No me detengo a pensar las cosas, el por qué no uso la energía hasta ahora, no me importo. El objetivo es simple, ganarle a este tipo a toda costa. Para eso necesitaría usar mis tres espadas o cualquier metal alargado y ligero.

"Como los barrotes de esta jaula por ejemplo", un foco se enciende sobre mi cabeza.

Me doy la vuelta y con unos cuantos cortes rápidos, ya tenía en mis manos, dos tubos de acero. Cristofer me toma por la playera, pero al darme vuelta lo recibo con un tubo en la cara. Este escupe sangre y uno de sus dientes, me mira feo y el brillo amarillo en su iris se apaga. Desvía mi espada con su A.P.P... Produciendo chispas al roce, sin embargo, dos tubos golpean con fuerza sus costillas.

—¡Ahg! —Este arquea su cuerpo, a causa del dolor.

Coloco la espada en la boca y con los dos tubos en las manos cargo contra él, atacando rápido y con precisión sus puntos débiles. Él no se queda atrás y se defiende con gran velocidad. El sonido de los metales chocando entre sí, retumbaban en todo el lugar y se mezclan con los gritos de los fanáticos embravecidos por la emoción.

—¡Sha cae! —un grito mal pronunciado sale de mi boca, con desesperación.

—¡Tu primero! —responde con furia y lanza dos patadas simultáneas, que me golpean en el pecho haciéndome tirar la espada de la boca.