Misión.

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Saben algo, cuando aceptas que tus poderes son reducidos a una tercera parte de tu máximo potencial, hasta unos cuantos guardias, con alto poder de fuego, se ven verdaderamente amenazadores.

Sin previo aviso los disparos salieron de todas direcciones de entre los árboles. Solo nuestros reflejos milimétricos nos salvaron de una muerte inminente. Mayumi, Cristofer, Kristen y yo, ahora nos encontrábamos rodeados por guardias provenientes de la base. Y lo único que nos separaba de ellos era una mugrosa construcción de tierra y barro, de hace quién sabe cuántos miles de años de antigüedad.

—Sabía que no debíamos coger ese camino —se quejó Cris.

—Yo sabía que ustedes me llevaría a la perdición —se arrepintió Kristen.

—¿Así? Pues yo sabía que eras una inútil —dije.

—¡Chicos! ¿Alguno de ustedes tiene un plan? —dijo May protegiendo a Kristen.

—¿Alguno de ustedes recuerda cómo llegamos hasta aquí?

2 Horas atrás.

—Quimera...

La figura que bloqueaba la luz reflejada por la luna, media al rededor 4.5m de altura. Sus 6 ojos eran color amarillo fuerte. Sus alas se notaban perforadas y desgastadas por incontables batallas, y de una forma que dudosamente pudiera utilizar. Sus patas traseras eran grandes pezuñas y las delanteras unas manos deformes, acompañadas de filosas garras; Su cuerpo era antropomórfico; Su cabeza de león, parecía comandar a las dos restantes; La de la cabra, estaba en su espalda y un poco por encima de su cabeza, mirando siempre hacia el cielo y hacia la retaguardia; La de la serpiente, era la punta de su cola y miraba hacia la dirección opuesta que la de la del león.

Su carné estaba pegada a los huesos y sus costillas sobresalían, parecía haber estado privatizado de alimento en mucho tiempo. Y los insectos que la rodeaban, parecían tener un festín sinfín de carne putrefacta. Con pelaje chamuscado y gusanos sobre él. La bestia presentaba una gran longevidad y se veía bastante hambriento.

*

No me dio tiempo de tan siquiera tragar saliva, cuando la bestia alargo velozmente sus garras para intentar atrapar a Cris

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No me dio tiempo de tan siquiera tragar saliva, cuando la bestia alargo velozmente sus garras para intentar atrapar a Cris. Pero este fue más rápido gracias a su anillo y de forma ágil lo esquivo.

Lamentablemente uno de los lobos, que se encontraba cerca de Cris, no tuvo la dicha de esquivar a la bestia, quién lo aprisiono con fuerza.

El lobo gimió de dolor y se retorció con agonía. En un intento desesperado mordió el brazo de la criatura para intentar zafarse y pronto la sangre se hizo visible, pero la boca del león se abrió a su máximo esplendor y le encajo los dientes alrededor del cuello, para acto seguido arrancarle la cabeza de raíz.

La manada no se quedó parada, todos atacaron a la vez y en sincronía, pero la cabeza de la serpiente escupió una intensa llamarada, la cual creo un muro de fuego entre él y sus atacantes.

Tres EspadasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora