Let's Make A Deal

Miss Right

Habían pasado unos días desde que Mark y Yoongi pelearon. Yoongi y yo no nos separamos en ningún momento excepto para dormir e ir al trabajo y escuela. Pero siempre estabamos en contacto gracias a los celulares. Pero cuando estabamos libres, pasábamos el día en mi casa o en casa de su padre. Ayudabamos a nuestros padres a cocinar, veíamos televisión y hablábamos de cualquier cosa con ellos. Eramos cómo una pareja normal de novios, sólo que no era oficial nuestra relación.

-¿Que haces?- le pregunté al verlo en su escritorio, tan concentrado mientras escribía en un papel. Había ido a su casa a ver películas, pero me quedé dormida en el sofá. Cuando desperté, ya no estaba a mi lado y el televisor estaba apagado.

-Sólo estoy escribiendo algo que me vino a la cabeza- dijo guardando el papel en una carpeta.

-No sabía que escribías- comenté acercándome.

-No es nada impresionante- dijo tímido.

-¿Escribes historias? ¿Poemas?...- pregunté curiosa sentándome en su regazo con su cuerpo entre mis piernas, mirándolo a los ojos.

-Canciones- contestó.

-¿Puedo escuchar una?- pregunté sonriente, pero él negó. -Por favor, sólo una- dije levantando mi dedo índice.

-Estoy trabajando en una- dijo suspirando. -Pero no está terminada. Sólo tiene unos versos- puso sus manos sobre mi cadera y me quitó de encima para buscar un papel.

-Okay, está bien. La leeré- dije mientras él lo buscaba. Me entregó el papel y me senté en su cama mientras él me observaba detenidamente mientras yo lo leía.

"¿Cómo puede una persona ser así?
Empiezo a sentir que soy el único que vive en este mundo
Tú pasas a mi lado
Un dulce viento te ha llamado soplando desde mi corazón
Incluso si no te pones maquillaje
Te pondrás tu perfume llamado atracción
Nunca creí que había un dios
Pero ahora me haces creer, porque para mí, eres una diosa
Tanto si eres joven o vieja, si tienes un hijo oculto
No me importa, porque te amo
Si estoy contigo, dondequiera que vayamos es un jardín de flores
En lugar de sostener tus bolsas, me tomas de la mano
En lugar de los celos y la envidia, tú entiendes mi naturaleza
Contigo, dibujo mi futuro
En medio de nuestros zapatos de pareja hay un par de zapatos de bebé"

-Es hermosa- comenté sonriendo. -No sabía que tenías este talento.

-Es inspirada en ti- comentó.

-¿Ah?- pregunté pensando que había escuchado mal.

-Tu me inspiraste a escribir esos versos. Y aún quedan algunos por escribir- volvió a decir acercándose a mí, tomó mis manos y se arrodilló antes de basarlas. -Te quiero- dijo con un brillo en los ojos mientras sonreía tiernamente.

-También te quiero- dije antes de besarlo. Yoongi sonrió entre mis labios y se levantó del suelo haciendo que me acostara sobre la cama para luego meterse entre mis piernas. Comenzó a besar mi cuello haciendo que soltara una risa nerviosa.

-Deberíamos aprovechar el tiempo. Tu mamá está de turno, y papá salió con Namjoon al supermercado. Jimin y Sun Hee iban a una cita; así que dudo que llamen para molestar- dijo coqueto. Comencé a reír por sus repentinas palabras, pero tenía razón, no habíamos tenido tiempo de estar a solas. Con la escuela, el trabajo, nuestros padres y amigos a nuestros al rededor; no habíamos tenido nada de privacidad. -¿Qué dices? ¿Aprovechamos el tiempo?- preguntó sonriente, y yo asentí mordiendo mis labios, tratando de ocultar mi sonrisa, la cuál él no pudo reprimir.

Volvió a besarme con más intensidad y fiereza que antes, mordiendo mis labios y tirando de ellos haciéndome soltar algunos quejidos. No estuvo satisfecho de mis labios hasta que estos se hincharon y ya no sentía nada, sonrió bajando sus besos por mi pecho, por encima de mi ropa, hasta llegar a mi pantalón. Desabrochó el botón y quitó mi pantalón, comenzó a besar mis muslos y a morderlos delicadamente. Besó castamente mi entrepierna por encima de mis bragas y comenzó a acariciarla suavemente con sus manos. Sintiéndo las cosquillas que provocaba la suave tela de mis bragas contra mi vagina. De pronto, Yoongi quitó mis bragas, haciendo que mi puslo aumentara en cuestión de segundos. Entonces volvió a meter su rostro entre mis piernas y besó mi clítoris delicadamente. Mientras acariciaba mis muslos para mantener mis piernas abiertas, Yoongi pasó su lengua por toda mi entrepierna, humedeciéndola con su toque. Cerré mis ojos y me agarré fuertemente de las sábanas mientras él seguía acariciando mi vagina con su lengua, chupando delicadamente mis labios vaginales y acariciando mis muslos. Mis caderas comenzaron a moverse levemente contra su boca, aún tenía mis ojos cerrados y mis manos aferradas a las sábanas, respiraba fuertemente con la boca abierta gracias a la excitación que todo esto me provocaba.

-Quítate la ropa- me ordenó separándose de mi cuerpo. Ambos nos quitamos el resto de la ropa y nos miramos a los ojos una vez más. Yoongi se inclinó para besar mi cabeza y luego mis labios, acepté su beso sin importar lo que había hecho hace unos segundos. Probando por primera vez mis jugos a través de sus dulces labios. -Girate- me pidió. Con el corazón en la boca, hice lo que me pidió. Volteandome boca abajo en la cama, sin poder mirar su rostro; no pude evitar sentirme nerviosa. Estando arrodillada en la cama, con el pecho y la cabeza sobre el colchón, Yoongi apartó mi cabello hacia un lado de mi cabeza. Dejando mi espalda completamente visible para él, comenzó a besarla y masajearla, haciendo que me relajara un poco. Agarró fuertemente mis caderas y penetró fuerte y lento dentro de mí,  haciéndome gemir por lo bajo cuando sentí su miembro entrar en mí. Siguió moviéndose contra mi cuerpo sin piedad, en la habitación retumbaba el sonido de su pelvis chocando contra mi trasero. El cual saltaba en su sitio con cada embestida que su cuerpo daba contra el mío. Podía escuchar su respiración agitada y los leves gemidos que brotaban de su dulce boca. No podía verlo, pero sabía que estaba igualbde excitado que yo, y que también estaba a punto de soltar su orgasmo, al igual que yo. Mi vientre dolía, y mi entrepierna comenzaba a contraerse alrededor de su miembro. Yoongi se inclinó sobre mi espalda y besó mis hombros y mi cuello mientras seguía moviéndose rápidamente, y aumentando aún más la velocidad de sus movimientos, buscando nuestros orgasmos. Corriendose dentro de mí, y yo a su alrededor, sin vernos a los ojos mientras lo hacíamos.

Pero debía admitir que disfruté ese momento. Disfruté esa nueva experiencia sexual con Yoongi, tal y como disfruté las anteriores. Entonces me di cuenta, que cada una de las veces que estuvimos juntos ha sido diferente, en lugares distintos, de formas distintas, pero lo disfrutaba de la misma forma. Cada vez era una nueva aventura con este hombre, y debía admitir que amaba eso. Lo amaba a él por hacerme sentir de esta forma, porque nunca me había sentido así con mi ex novio. Lo amaba porque me hacía sentir única y deseada.

-Eso estuvo...increíble- dije sin aliento cuando me abrazó por la espalda y beso mi oreja.

-¿Te gustó?- preguntó, por su tono, sabía que estaba sonriendo.

-Mucho- contesté asintiendo.

-A mí también- respondió contra mi oído.

-Yoongi... Quiero hacerlo oficial- comenté luego de unos segundos, con la respiración más calmada; pero con el corazón palpitando rápidamente a causa de los nervios.

-¿Que cosa?- preguntó curioso.

-Nuestra relación. Quiero que seas mi novio...mi novio real- dije sin voltearme, no quería mirarlo a la cara. Tenía miedo de ver su expresión.

-Rose...yo no quiero que seas mi novia- contestó fríamente. Por un momento mi corazón se detuvo, me quedé completamente congelada. No sabía que pensar. -Quiero que seas mi esposa- susurró en mi oído.