Tired

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Había pasado una semana de la muerte de la mamá de Yoongi y Namjoon. Ellos todavía se estaban acostumbrando a la idea de vivir sin ella. Ha Neul, Sun Hee, Jimin y yo no nos separamos de nuestros amigos durante esa semana, y tampoco Young Mi lo hizo. Realmente me molestaba su presencia entre nosotros, era muy arrogante. Y lo peor, no sabía lo que significaba "espacio personal" cuando se trataba de Yoongi. Varias veces mis amigas me molestaron diciendo que estaba celosa, pero no lo estaba.

En cuanto a Mark, no había enviado más mensajes. Tal vez se había cansado de no recibir una respuesta. Quizás ya se hizo la idea de que será padre y debe hacerse responsable por su hijo. Realmente pensar en eso me hacía sentir triste, pero yo debía seguir adelante al igual que él. Ahora mi preocupación era no ser el juguete de nadie. No quería sufrir de nuevo.

-¿Te pasa algo?- preguntó Yoongi tomando mi mano.

-No, sólo estaba pensando.

-¿En qué pensabas?

-En nada, no importa- contesté seca.

-Rose, te pasa algo. Estás muy rara- volvió a decir.

-De verdad, no importa- contesté sonriendo falsamente para que me dejara en paz.

-Al parecer es muy callada tu nueva amiga- dijo Young Mi. Estabamos todos juntos en una cafetería cerca de nuestra escuela. Los muchachos habían ido a pasar un rato con nosotras y al parecer Young Mi se invitó sola.

-Me agradan las mujeres calladas- contestó él.

-¿Enserio? Pensé que te gustaban las mujeres ruidosas- sonrió pervertidamente antes de tomar un sorbo de café.

-Todo depende de la ocasión, Young Mi- contestó. -Hasta ahora, Rose ha sido perfecta en cuanto a eso, y eb cuantona todo.

-Me pregunto, ¿por cuanto tiempo lo será?- comentó.

-¿Tienes algún problema con Rose, Young Mi?- preguntó Sun Hee hablando por primera vez en un rato.

-¿Por qué lo tendría?- preguntó tomando otro sorbo de café.

-No lo sé. Tal vez porque Yoongi está interesado en ella y no en tí.

-Sun Hee, basta- le pedí en voz baja.

-¿Crees que me preocuparía por eso? Se nota que son sólo unas niñas y que no conocen a Suga.

-¿Y tú crees conocerlo?- preguntó Namjoon.

-¿Qué tiene que ver conocer a Suga con ser ruda con Rose?- preguntó Ha Neul.

-Sólo fue un comentario, no fui ruda con ella- trató de defenderse.

-Iré a tomar aire- dijo Yoongi soltando mi mano y saliendo del local.

-Iré contigo. Al parecer no soy bienvenida- dijo Young Mi siguiéndolo.

-¿No irás con él?- preguntó Jimin, pero negué. -Siempre vas con él a todos lados. ¿Ahora lo dejarás a solas con esa víbora?

-Sé que quiere tiempo a solas. Si Yoongi hubiera querido que fuese con él, no hubiera soltado mi mano- contesté tranquila.

-Escucha, sea lo que sea que esa mujer te diga, no le hagas caso- me dijo Namjoon. -Ella está obsesionada con Suga y dirá cualquier cosa para que te alejes de él.

-Ya lo intentó- comentó Ha Neul.

-¿Qué te dijo?- preguntó Jimin.

-Dijo que sólo soy una niña, que pronto Yoongi se cansaría de mí y que sólo sale conmigo por sexo.

-Es mentira.

-Dijo que no soy la primera, y es cierto- contesté.

-Eso es cierto, Yoongi ha salido con otras mujeres y ha tenido sexo con ellas. Pero él enserio está interesado en tí. Créeme, yo lo conozco- habló Namjoon.

-Está bien, Namjoon- le dije fingiendo que no me importaba. -Tengo que irme- dije al ver la hora. -Mamá y yo quedamos en pasar el día juntas- me despedí de todos ellos y fui a buscar a Yoongi para despedirme.

Salí del local despidiéndome de mis amigos con la mano. En cuanto abrí la puerta el sol me cegó la vista con su fuerte resplandor. Miré a la izquiera buscando a Yoongi, pero no lo vi. Miré a la derecha encontrándome con dos siluetas que me parecían conocidas. Estaban con los cuerpos pegados, ella tenía sus manos en la nuca de él, y él tenía sus manos en las caderas de ella. Manteniéndose cerca el uno del otro mientras sus labios se movían al compás. Me quedé congelada mientras los veía besarse frente a mí, sintiéndome estúpida por creer en sus mentiras.

-¡Rose, dejaste tu...!- Ha Neul salió del local encontrándose con la misma escena que yo. En cuanto Yoongi la escuchó, empujó a Young Mi a un lado y miró a mi dirección, encontrándose con mi mirada.

-Pueden seguir con lo que estaban haciendo. Sólo venía a despedirme- dije antes de darme la vuelta. -Gracias, Ha Neul- le dije a mi amiga tomando la libreta que había dejado en la mesa.

-No. Rose, espera- Yoongi trató de detenerme agarrandome del brazo. -Déjame explicarte- dijo mirándome directo a los ojos mientras levantanba la mano en un gesto para que me calmara.

-No tienes que explicarme nada. ¿No recuerdas que nuestra relación es falsa?- le dije tratando de actuar fría. -Mi plan no funcionó. Mark va a tener un hijo con Hae Won. No tenemos porque seguir fingiendo. Puedes hacer lo que quieras- le dije antes de volver a alejarme de él.

Me sentía tan estúpida, había caído en sus palabras. Él jamás querría estar conmigo, soy estúpida, patética y fácil de engañar. Estúpido Yoongi, me había hecho creer que alguien podría quererme, que yo podría darme una segunda oportunidad con alguien. Me hizo pensar que yo podría ser amada y que podría ser felíz después de todo. Pero él sólo estaba jugando conmigo. Young Mi me lo advirtió, debí hacerle caso a ella y a mi sexto sentido. Pero le creí, como siempre fui estúpida y le creí. Estaba harta de ser engañada, de ser siempre la víctima en la historia. Estaba harta de llorar por personas que no saben valorarme.

Llegué a casa reteniendo las lágrimas. Me encontré con mi mamá en la cocina. La saludé fingiendo que no pasaba nada, y me quedé observándola mientras cocinaba. Intenté despejar mi mente viendo lo serena y felíz que lucía mi mamá esa tarde, pero era inevitable sentir tanto enojo por dentro. Aún así me las arreglé para ocultarle todo lo que sentía a mi mamá. Pasé la tarde hablando con mi mamá, viendo películas y comiento palomitas. Mientras que ignoraba toda llamada entrante a mi celular, en su mayoría eran de Yoongi. El celular de mi mamá comenzó a sonar sobre la mesa.

-¿Quién será?- preguntó en voz alta tomando su teléfono. -Es del hospital. Tengo que contestar- me avisó. Salió de la sala dejándome sola en el sofá. Mi celular volvió a vibrar avisando una llamada entrante, era Yoongi otra vez, así que rechacé la llamada una vez más. -Malas noticias. Mi compañera está enferma y no puede ir a su turno nocturno. Tendré que cubrirla- dijo mamá tirándose en el sillón.

-Está bien mamá. Si quieres ve a descansar antes de tu turno.

-Tendré el sábado libre. Así que iremos de compras- dijo levantandose del sillón. -Será un día de madre e hija.

-Está bien. Ve a descansar. Te amo- le dije, ella contestó lanzándome un beso y se fue a su cuarto.

Otra noche que pasaría sola. Pero esta vez no me quedaría encerrada en mi cuarto. Esta vez no me quedaría llorando por un hombre que decidió que no era suficiente para él y me usó. Decidí salir de casa en la noche y buscar algún bar e ir a despejar mi mente con el alcohol.

Let's Make A DealDonde viven las historias. Descúbrelo ahora