Capitulo 4.

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-No conoces "Infierno" verdad?-, yo había dejado los vestidos en la cama y lo miraba con una ceja levantada y una mano en la cintura.

Nick negó con la cabeza y bebió un sorbo de su cerveza.

-Y que es lo que haces con Lin para divertirte?-, me encogí de hombros y volví a la selección de prendas.

-Ella es residente de cirugia y casi no tiene tiempo para nada-, lo dijo como algo obvio y se encogió de hombros.

-Pues hoy vendrás conmigo a conocer "Infierno"-, me acerqué a el y le di una palmadita en su pecho,
-anda, ve a arreglarte que el auto estará aquí en menos de dos horas-, le señale la puerta de la habitación con la cabeza.

-Como crees Sam!, mañana debo ir de nuevo a trabajar por la mañana-, el se sentó en el sofá de la habitación y continuó bebiendo la cerveza.

-Como si no hubieras ido a trabajar después de tu última fiesta!, pero si estás seguro-, me encogí de hombros,
-te seguro que hoy tendremos una de las mejores fiestas y me divertiré sola-, le di una mirada de soslayo y una sonrisa ladeada.

-Está bien Sam pero debo ir a trabajar temprano-, Nick se incorporó y salió de la habitación.

-Date prisa princesa, tu carroza no te esperará!-, levante la vos para que alcanzará a oírme en la puerta del departamento y él sonrió.

Tenía que buscar algo espectacular para vestir, debía verme despampanante esta noche... porque de repente estaba pensando esto?.

Me di un buen baño relajante de espuma en mi nueva tina y salí renovada para una noche loca. Opté por un vestido estraple color verde que resaltara mis ojos, la parte de arriba era en lentejuelas ajustado hasta la cadera y luego una  mini falda hasta medio muslo algo transparente. Solté mi cabello y le hice unos rulos anchos, maquille mis ojos en estilo ahumado con verde y negro... muy dramático, y use unas sandalias altas color negro.

El timbre sonó, supuse que era Nick y fui a abrirle.

-Wow! Sam te ves... muy bien!-, me dijo Nick con un claro tono de sorpresa en su vos y con sus ojos bien abiertos... había logrado mi cometido y eso me hizo sonreír pagada de mi misma.

-Tu no estás nada mal, ven pasa, el auto estará aquí en unos minutos-, le sonreí y abrí más la puerta para que pasara.

Nick llevaba unos jeans azul claro, una camisa beige y un saco café brillante sobre ella, tenía unos mocasines color café y olía igual a como se veía... debería ser un delito verse así de bien!.

El citofono sonó y el portero de la noche me aviso que un auto me esperaba. Nick y yo salimos del departamento y en el ascensor tuve la impresión que el miraba mi trasero... pero solo fue impresión.

Salimos del edificio con la incrédula mirada del portero... no creo que él sea tan amargado como todos lo hacían ver! y fuimos a la limusina que envío la revista.

El chofer de la Limo me saludo formalmente y se presentó, abrió la puerta y nos permitió entrar a mi primero y luego a Nick.

En el camino a la disco le pregunte a Nick por su trabajo, resulta que como predije tenía 29 años y era cirujano de tórax, trabajaba en dos hospitales diferentes y básicamente ganaba muy bien, tenía su vida resuelta... cualquiera lo envidiaría pero yo no lo hacía, me parecía demasiado aburrido tener tanto dinero y no saber disfrutarlo.

Llegamos a "Infierno", el chofer volvió a abrir la puerta de la Limo y Nick salió primero, me extendió la mano y la tome para salir del auto.

CUANDO TE CONOCÍ @MiaRuzoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora