Volveré, lo prometo. (FanFic Rubius y tú)

Fiesta, alcohol y confusiones..

_____ P. O. V.

Él me miró con una amplia sonrisa, y yo no reaccioné.

-Vamos a la barra a tomar algo.. Al menos para mí. -sonrió mientras señalaba mi camisa.

Me cogió de la mano y me llevó a la barra sentándome en un taburete y sentándose él en otro atrayéndolo a mí.

-¿Quieres algo? Yo invito. -dijo a mi izquierda.

Miré al camarero que tenía en frente y dije:

-Lo más fuerte que tengas.

Realmente no sabía por qué estaba tan nerviosa. ¿Le odiaba o le echaba de menos?

-¿Estás bien? -colocó su mano en mi muslo mirándome a los ojos.

Asentí con la cabeza aunque realmente no me encontraba muy bien. Seguía mirando al frente, paralizada.

**

-¿Sabes? Ese tío es un imbécil. -dijo dando un trago- Lo de hoy, el Online, lo ha hecho a propósito.

¿Se refería a Edd? Si, sin duda. Pero.. ¿estaba celoso?

-Si hay algo seguro, es que ninguno de los dos te trataron bien. Pero si no aportan, que se aparten.. que hay otros que queremos llegar a conocer a la señorita Castro.

Le miré sorprendida y él me guiñó un ojo sonriendo.

-Aunque me da la sensación de que.. esta vez me pasarás tu WhatsApp. ¿Con quién vas a venir de marcha si no es conmigo? Porque.. te veo algo sola.. ¡Y yo soy la mejor compañía!

En ese instante me crujió el cerebro. ¿Se estaba auto-criticando? No.. imposible. ¿Entonces..?

De repende abrí más mis ojos cuando caí en lo que estaba ocurriendo.

-¡¡Marcos!! -dije lanzándome en sus brazos.

-Vaya.. si que tenías ganas de venirte de marcha conmigo.

**

Fue un alivio saber que realmente no era Rubén, sino Marcos, el chico al que tanto se parece. Estuvimos bailando y bebiendo. Bebimos mucho, demasiado. Algunos que nos conocían empezaron a grabarnos y a hacernos fotos.

-Creen que eres Rubén. -le dije bastante bebida.

-Seré quien tú quieras.. -sonrió acercándome a él.

Marcos me dijo que me llevaba a casa, para que no tuviera que irme andando sola. Y la verdad no recuerdo mucho, solo que fuimos andando, bueno, tambaleándonos agarrados más bien, hasta un portal.. y allí.. se me borró la memoria completamente. Es como si hubiera una gran nube espesa que no me deja recordar nada.

**

Parpadeé forzosamente al ver como la luz entraba por la ventana. Sonriente, me estiré y acurruqué en mí misma al recordar lo bien que lo pasé la noche anterior gracias a.. ¿¡Marcos!? De repente noté como una ligera presión en mi cintura no me dejaba moverme. Traté de incorporarme, pero el fuerte dolor de cabeza por la resaca, y dicha presión en la cadera me lo impedían.

Volví a abrir y cerrar mis ojos rápidamente al ver que.. aquella no era mi habitación. Nerviosa, levanté lentamente la sábana y allí estaba lo único que no quería encontrar: un brazo. Lo recorrí con la mirada hasta que acabé observando el rostro.. Marcos.

Levanté de nuevo la sábana temiéndome lo peor, y, como no iba a ser menos, estábamos en ropa interior. Bueno, casi. Él sí, pero la única ropa interior que yo llevaba, era la parte de abajo. Arriba, tenía puesta su camisa. Aunque eso no quitaba que hubiese pasado algo aquella noche.