Marron fue un ángel. Me tranquilizó lo suficiente como para sacarme de allí sin atraer la atención de los empleados. Yo apenas tenía fuerzas para caminar, por lo que dejó que me apoyara en ella mientras salíamos a la acera y nos metíamos en el taxi que Ubb había parado para nosotras. No se quejó en ningún momento de que la sacara tan pronto de la fiesta ni trató de sonsacarme lo que había ocurrido. En cambio, puso mi cabeza sobre su regazo y me acarició el cabello mientras yo lloraba durante todo el trayecto hasta su apartamento.
En su casa, Marron me metió en la cama con un vaso de tequila solo. Aunque tenía un futón en la sala de estar, se quedó conmigo toda la noche. Me abrazó por la espalda; cuando me despertaba de las pequeñas cabezadas que lograba dar, su cálida presencia calmaba mis gritos y mi llanto. No había sentido tanta pena ni me había lamentado tanto desde la muerte de mis padres. Ni siquiera entonces me había sentido tan traicionada como en este momento.
Eso era lo peor de todo, la traición. Si hubiera escuchado antes la misma explicación de labios de Trunks, en un momento de nuestra relación en el que no me lo hubiese jugado todo, quizá habría podido superarlo. De todas formas le habría dejado. Me era imposible estar con él después de aquello. Pero habría sido mucho más fácil superarlo. Esperar tanto tiempo —sobre todo cuando habíamos hablado a fondo de la sinceridad y la transparencia— suponía una traición irremediable. Esta era la puñalada más profunda. Pero perder al hombre al que amaba con locura era una herida casi igual de profunda.
Los primeros dos días transcurrieron en una nebulosa. Marron cocinaba para mí y me metía la comida en la boca a la fuerza. Escuchó mi historia conforme yo se la iba contando, a borbotones, y la hilvanaba lo mejor que podía, de nuevo sin presionarme. A lo largo de todo ese tiempo, me rellenaba la copa cada vez que yo se lo pedía. En un extraño momento en el que conseguí concentrarme en algo que no fuera mi dolor, se me ocurrió preguntarme si habría sido esa la razón por la que mi padre se había pasado toda la vida bebiendo. ¿Habría intentado bloquear algún tipo de dolor? ¿Qué era lo que le había hecho sufrir? ¿No era triste no haberme enterado?
El resto de mis pensamientos eran recuerdos e ideas inconexas. Recuerdos dulces que se volvían amargos a la luz de la nueva información. Reviví una docena de veces cada una de las conversaciones que había mantenido con Trunks. A veces lo único que podía hacer era llorar. En otros momentos me enfadaba. Rompí más de un vaso en un ataque de rabia.
Al final, empecé a tratar de darle sentido a todo. Traté de discernir qué era real y qué no. Me imaginaba el papel que había jugado Pares en mi relación con Trunks. La forma en que Trunks había consentido mis celos, el modo en que había tolerado mis ganas de fisgonear.
«Estimula sus obsesiones —le habría dicho Pares—. No te enfades ni te molestes si hace alguna de sus locuras».
Y el modo en que me había sacado a relucir el nombre que él utilizaba conmigo. ¿Eso también habría sido idea suya? «Ponle un apelativo cariñoso. Algo así como "ángel" o "preciosa"».
Recordé el cumpleaños de Bulma. Trunks había hablado entonces con Pares y cuando llegamos a casa se había mostrado distante. ¿Le había recordado ella en aquel momento cuál era su juego? ¿Lo que se suponía que estaba haciendo conmigo?
En su favor, debo reconocer que Trunks no me había mentido. Sus palabras exactas volvían a mí con toda su fuerza: « Haré y diré cosas, puede que románticas, que no serán verdad. Necesito que recuerdes eso. Cuando no estemos en público, te seduciré. Eso sí será real, pero nunca deberá confundirse con amor».
¿Cuándo había cambiado aquello? ¿Cuándo se había convertido en real su falso romance? Si es que había cambiado. ¿Estaría él en ese mismo momento celebrándolo con su cómplice? ¿Estarían brindando por la absoluta y completa destrucción de todo mí ser?
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INTENSO DESEO.
FanfictionCon su reciente Maestría en Administración, Son Pan tiene su futuro asegurado, obtener un ascenso en el club donde trabaja y mantenerse alejada de cualquier tipo que pueda desencadenar su trastorno de amor obsesivo. Un plan perfecto. ...