Viktor mantenía la calma aunque por dentro una tormenta de ira y preocupación estuviera arrasando con él. El platinado sabía muy bien que los cristalinos ojos verdes del tigre lo miraban atentos a cualquier fallo, a la mínima equivocación se delataría y quedaría expuesto a su feroz ataque.
Pero mantener la calma aún sabiendo que Yakov los había metido en problemas no era fácil.
Estaban en una de las oficinas de Viktor, en esta ocasión en la que se encontraba en su burdel más grande. Yuri había solicitado una reunión con él y Yakov, así que bastante intrigado por la rara formalidad del rubio, Viktor aceptó; debía admitir que no estaba preparado para los hechos que ocurrieron después.
El rubio llegó exactamente a las 16:00 luciendo un traje azul y corbata negra, su cabellera -más larga de lo usual- iba recogida en una discreta coleta; iba solo y únicamente cargaba con él un pequeño DVD portátil. Todo en su actitud delataba la frialdad con la que se movía en ese mundo.
Apenas fue recibido por la amable sonrisa de Viktor e intercambió un saludo formal con Yakov, colocó el reproductor que llevaba sobre el escritorio del platinado y oprimió el botón que daría inicio a su entretenida película. De inmediato se vio en la pequeña pantalla a varios hombres ensangrentados e inconscientes, amordazados y atados en lo que parecía ser un sótano o una bodega. Viktor reconoció de inmediato a un hombre canoso que trabajaba para Yakov, lo que confirmó sus sospechas: sus socios habían hecho algo a sus espaldas.
Con calma y sin levantar el tono de su voz, Yuri les preguntaba a los dos pobres diablos que seguían conscientes, la razón por la cual se hicieron pasar por sus hombres y se llevaron toda la mercancía que recientemente había llegado al país para él. Cada vez que se negaban a contestar o daban una respuesta insatisfactoria, el rubio los golpeaba brutalmente con un bate de madera.
Durante diez minutos, Viktor y Yakov observaron en silencio el interrogatorio de Yuri y su forma cruel y dolorosa de obtener información. De alguna manera, el rubio los identificó y los llamaba por sus nombres, incluso sabía desde qué empresas se habían colado y cómo burlaron la seguridad del puerto que Tolenka Babicheva manejaba, les dio santo y seña de los nombres claves con los que se movieron para robarlo y hasta les dijo que los miles que recibieron como pago no valdrían nada una vez que sus familias estuvieran esparcidas por los bosques sirviendo de alimento para los animales salvajes.
En ese momento, los hombres que seguían en una cruel agonía, le dieron el resto de la información que guardaron tan duramente. Cuando admitieron trabajar para Feltsman y Nikiforov, Viktor sintió que estaba a punto de perder el control.
-Quiero mi mercancía de vuelta el jueves a las 10 de la mañana -dijo Yuri después de cerrar el DVD-, o quédense con ella, pero páguenme para el mismo día los seis millones que di.
Sin decir nada más, el rubio salió de la oficina tras una seria mirada de Yakov y la amable pero falsa sonrisa de Viktor.
El platinado esperó a que le informaran que Yuri había salido del edificio, antes de inclinarse sobre su escritorio y enfrentar, muy molesto, a su mayor socio.
- ¿En qué diablos estabas pensando, Yakov? -los azules ojos del alfa dejaban en claro la ira que sentía en ese momento.
-Todo estaba bien calculado, Plisetsky no debía darse cuenta hasta que fuera muy tarde -le dijo Yakov con toda la calma que pudo reunir.
- ¿Pensabas decirme algo o te quedarías con todo el premio? Me involucraste sin decirme nada, así que espero que tu respuesta sea afirmativa.
-Sabes que sí te lo pensaba decir -la respuesta del hombre mayor no convenció a Viktor.
![](https://img.wattpad.com/cover/105870892-288-k600400.jpg)
ESTÁS LEYENDO
¿Quién eres?
FanficYuuri le temía a aquel frío y cruel hombre, sin embargo lo amaba. ¿Quién eres realmente, Yuri? Editado por la bellisíma @Aoi0000 Ninguno de los personajes de Yuri on Ice me pertenecen, solamente los tomo prestados a modo recreativo.