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Creo que nunca me había sentido tan mal conmigo misma,me sentía vacía y a la vez no entendía el porqué me tendría que sentir así.No dependía de Bruno porque sabía que podía vivir sin estar a su lado pero en cambio perderlo era como si algo de mi se hubiera desvanecido.

Llegué a casa después del largo camino andando y el silencio inundaba la casa igual que mi soledad.No estaba acostumbrada a sentirme así pero y si tal vez esa soledad aparecía por él.No lo sabía y prefería no saberlo.

Me acerqué a la cocina y busqué una botella de vodka,estuve unos 10 minutos buscando y no la encontraba pero en este instante la encontraba necesaria,sabiendo que no lo era.Encontre la botella,la abrí y empapé mis labios con el liquido transparente.Mi garganta ardía y la sensación no era agradable pero quería dejar de pensar en Bruno.
Me tumbé en el sofá y seguí bebiendo hasta que el sueño y el cansancio provocará que me quedara dormida.

***
Un ruido me hizo despertar y en abrir los ojos encontré a Marc con un chico bastante alto y muy guapo,me fijé en la sonrisa de mi amigo y me alegraba verlo así pero los celos me invadían se le veía feliz con ese chico,se les veía como si todo fuera fácil y en canvio todo lo que tenía con Bruno era complicado.

-¿Estas bien?-Preguntó Marc mientras se separaba del chico.

-Si.Voy a casa de Bruno.-Me levanté y cogí la botella de vodka que estaba medio vacía.

-¿Estás borracha?

-No.Estoy bien.He bebido un poco.-Le dije sonriendolo.

Marc me cogió la botella y se fue con el chico a mi habitación.Yo simplemente salí por la puerta.
Comencé a bajar las escaleras todo lo rápido que pude mientras  mis lágrimas salían como siempre,por fin note todo el aire en mi cara y me sentí un poco más libre.
Las calles estaban solitarias igual que yo.No sabía dónde iba pero no me importaba,nunca me había sentido así como si no me quisiera.

¿Qué me había hecho ese chico?No tenía repuestas para esa pregunta y nadie las tenía.Vi un banco a lo lejos y me senté con la esperanza de que Bruno me viniera a buscar o me llamara.Pero Bruno no lo iba hacer.
Puse mis rodillas en mi cara intentando tapar mi cara empapada de lágrimas.Queria estar junto a él.Pero no podía hacerlo.Ambos estábamos demasiado enganchados y si ahora estoy así sin ser nada si saliera con él y se acabará se perfectamente que no podría seguir a delante.Era muy vulnerable, demasiado.

-Oye chica necesitas ayuda...-Me dijo una chica rubia.

-No.-Levante mi cara y me fijé en su mirada podía ver el dolor que tenía la mía.

-Se que si.-La chica se sentó a mi lado sin decir nada y me abrazó.

Era una chica rara,no me conocía de nada y me abrazaba.Mi suposición era que se parecía mucho a mi y sabía cómo me sentía.

-¿Amor?-Dijo después de unos minutos de silencio entre ambas.

-Si...-La mire y me apoye en su hombro y comencé a llorar.

Ella se callo y me acarició la espalda.La chica tenía la misma edad que yo o por lo menos es lo que aparentaba y era mucho más guapa que yo para mi gusto.Vestia de una forma peculiar pero que me encantaba.Era diferente.

-Me llamo Lauren.-Dijo cuando vio que mis llantos se habían calmado.

-Yo Natalia.-Le dije mientras secaba mis lágrimas con mi mano.

-El novio te ha dejado...-Dijo entre risas y paro al ver que yo no me reía.

-No éramos novios y creo que ese era el problema.

-Él no te quiere...-Susurro.

-Creo que si lo hace, él me dijo que fuéramos novios y yo le dije que solo amigos.Y se que ahora me odia.No me lo ha dicho pero lo sé.-Le expliqué intentando no tartamudear.

-Y porqué no sales con él si lo amas.-Dijo ella bastante indiferente.

-Porque se que no irá bien, él y yo no estamos hechos para salir.

-Entiendo.-Dijo desviando la mirada de mi.

Me levanté y mire mi móvil con la esperanza de tener un mensaje de Bruno pero no era así.Suspire y Lauren me miro extrañada.

-Me voy,dentro de unas horas tengo que trabajar y me tengo que quitar está olor alcohol.-Dije riendo ella hizo lo mismo.

-Claro,ya nos veremos.Trabajo en el bar de delante por si algún día te quieres venir.

Asentí y volví hacia casa.

Narra Bruno:

Siempre mi casa me había parecido demasiado grande para mi solo,pero cuando conocí a Natalia pensé que era perfecta que esta casa estaba hecha para nosotros,que podríamos recorrer cada rincón de esta casa y que nunca la veríamos demasiado grande porque nosotros seríamos gigantes.

Me tumbé en mi enorme cama y aún sabiendo que ya era por la mañana y que tenía que trabajar,me estiré para descansar.Habia pasado una noche dura,no había dormido nada.Fui imbécil pero quería estar con ella y ella me había dejado en un solo amigos.Nunca la iba odiar pero es verdad que no quería verla ni hablar con ella.Se pensaba que la única insegura era ella pero yo también lo paso mal.

Me levanté y fui a la ducha.Me vestí con algo rápido nunca me pasaba mucho tiempo eligiendo la ropa.
Cogí mi coche y me dirigí a la oficina para acabar de hablar el tema de la gira que empezaría dentro de poco.El camino transcurrió con normalidad,llegue antes de lo que me imaginaba.

Entre en el enorme edificio y a la primera que me encontré fue a Mary.

-Hola.-Me dijo acompañado de un abrazo.

-Hola.Tengo prisa.-Le di dos besos y me fui a la sala 3.

Entre y la vi.Estaba con un vestido de flores corto que le quedaba perfecto y tenía el pelo recogido con una cola.La miré y me quedé embobado mirando su dulce sonrisa,solo tenía ojos para ella.Hasta que se giró y me vio y su sonrisa desaparecido,su cara se entristeció y mi alma se apagó.
Phils apareció de la nada y me dio un suave golpe en el hombro en forma de saludo.

-¿Qué has visto para poner esa cara?-Dijo Phils riendo.

Pase de su pregunta y me aparté de él y me fui de la sala.

Era tan hermosa que solo de pensar que por culpa mía dejaba de tener esa alegría me partía el corazón.Me daba igual si yo estaba mal lo que me importaba es provocar su tristeza.
Fui al lavabo que estaba al salir de la sala y me apoye en la pared.

-¿Bruno?-Preguntó Natalia con su fina voz.

No dije nada,cerré la puerta y oí como se apoyaba en la puerta y comenzaba a llorar.Oia hasta su respiración accelerada.

-No me odies...-Dijo suspirando.

No entendía como podía pensar que la odiaba,nunca lo haría.

-No te odio.-Le dije serio,para que no notará mi voz temblorosa.

-Te amo.-Dije sin saber que decía.

-Y creo que ese es el problema.-Segui hablando.Ella no decía nada,solo lloraba y eso provocó que acabará llorando también pero no sabía si Natalia era consciente de lo que había provocado en mi.

Un Chico De Otro Planeta -Bruno Mars- (INACABADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora