"Un lugar para los sobrevivientes"

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-Vaya. Me lo veía venir- Howard nos miraba con el semblante serio.

-Howard, por favor, déjame explicarlo- Shasta se separó de mi y corrió detrás de Howard, el cual se había metido cabizbajo en el bosque. La silueta de Shasta desapareció entre los árboles.

"Garlopo" Newt estaba a mi espalda, mirándome con el ceño fruncido. "Acabas de hacer plopus tu amistad con Howard y perder tu oportunidad de tener algo con Shasta, porque está claro que ella prefiere a Howard, de no ser así, no habría ido corriendo detrás de él para darle explicaciones... así que... Garlopo" El tono de Newt era molesto y resentido, su enojo guardaba más motivos que los expresados en sus palabras.

Me sentí palidecer. Había besado a Shasta, ella, la novia de Howard, y yo, el ¿novio? de Pan, Howard era mi amigo... Había arruinado todo con sólo una miertera acción.

"¿Te olvidaste de mí?" Newt me miró con el rostro rojo por la furia "Me dejaste plantado, para que sepas, también hiciste plopus lo que teníamos, maldito larcho miertero" no gritó, pero habló con la suficiente fuerza como para que sus palabras me impactarán igual que bofetadas.

Mis piernas se doblaron y me hubiese caído de rodillas si no fuese por el árbol que usé de apoyo.

Había perdido a Howard. Había perdido a Shasta. Había perdido a Pan. Pero por sobre todos esos nombres, que dejaban de tener importancia en mis pensamientos confusos, había perdido a Newt.

"Shank, no pienses eso" Newt me miró cariñosamente "Estoy enojado contigo y estoy en mi derecho, pero no me vas a perder nunca, siempre estaré aquí, a tu lado y cada vez que me necesites voy a acompañarte, ¿buena esa?" me puso una mano en el hombro, dándome suaves palmaditas, asentí con el llanto en la garganta "Ahora, respira, Pan no tiene por qué enterarse, déjale las cosas en claro a Shasta, y arregla las cosas con Howard..." se detuvo unos momentos a meditar mejor las cosas y luego agregó "mejor, primero arregla las cosas con Howard y luego van los dos a hablar con Shasta, olvídate de Pan, jamás se enterará, pero si la culpa te carcome y deseas decirle, pues... nunca está demás echarle la culpa al otro, Shasta, en este caso" me sonrió animadamente.

Suspiré y me dirigí por donde se habían ido Howard y Shasta, seguí el rastro de ramas rotas y hojas mullidas hasta que me topé con Howard sentado en un pequeño acantilado, tenía las piernas colgando y las balanceaba desanimadamente. Estaba solo. Me acerqué procurando hacer ruido para que se percatara de mi presencia, si lo hizo, no me di cuenta, pero de todas formas me senté a su lado sumisamente para no asustarlo.

-En el fondo lo sabía- susurró Howard y luego me miró tristemente, sus ojos azul caribe reflejaban una profunda soledad- Shasta, a lo largo de su vida, a buscado risa y, aunque no lo creas, yo era bastante sarcástico y risueño pero, en situaciones serías, no mantengo tanto la risa como Shasta... en cambio tú si, y eso es lo que necesita Shasta, alguien que viva la vida así como "Hakuna Matata".

-No sé qué shuck es Hakunga Makaka.

-Hakuna Matata- me corrigió- es de una película infantil... significa, "Vive y se feliz" bueno, esa es una de sus interpretaciones... en fin, no importa... -miró sus zapatillas balanceándose en el vacío- Desde que te conocí temí que conocieras a Shasta... y cuando ustedes se conocieron supe que esto pasaría en algún momento... No fui capaz de terminar con ella, ni de decirle que sabía lo que se avecinaba... Estaba... Estoy- se corrigió- demasiado enamorado de ella, esa chica llegó a iluminarme la vida, le debo mucho... Y por eso es que no intervine, no soy capaz... jamás podría hacerle daño, yo... ella me salvó la vida... Shasta no lo sabe, pero es cierto... yo había perdido todo, no tenía nada a lo que aferrarme... y ella apreció, apareció con su risa y su personalidad de mierda pero que me subía el ánimo... Si estoy vivo es gracias a ella, así que no pienso intervenir en ninguna de sus desiciones, la dejaré hacer y la ayudaré en todo lo que desee... -me sonrió y sentí lástima de sus ojos apagados- si te parece muy tonto lo que digo, me dices... -suspiró.