Capítulo 55

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Después de la cena los padres de Shopia junto con el padre de Harry y Giha se retiran a la sala de descanso mientras que nosotros nos vamos a un cuarto donde hay una mesa grande de villar. Todos cogen un palo para jugar mientras que yo me siento en uno de los sofás individuales mirándolos jugar.

Ellos gritan cada vez que una de las bolas ingresa en el agujero de la mesa. Los miro muy atenta como se mueven en cada jugada cuando alguien me coge el hombro y doy un pequeño salto por el susto.

- ¿puedo acompañarte? – dice ella sentándose en el otro sofá individual.

- ¿tengo elección? – digo con mala cara.

- me entere de que iras a Chicago

- no me sorprende que sepas eso, ya que para espiar eres sorprendente – digo poniendo una sonrisa muy falsa.

- me alegra que te vallas

- y a mi también, así ya no tendré que ver tu cara.

- no me afectan tus insultos. Después de todo me alegra mucho ya que Harry otra vez estará solo y será mío.

- mírate en un espejo, eres vieja y el único sentimiento que tiene por ti es asco. Si él te tolera es por su padre no por ti. Aunque me valla él nunca se acercara a tu lado, él nunca te vera como una mujer. Perdiste tu oportunidad.

- fui su primer amor verdadero y el primer amor nunca se olvida.

- nunca lo fuiste, eso es lo que tú quieres creer. Solo fue una ilusión tonta que tuvo por causa de las hormonas.

- puedes decir lo que quieras. Una vez que estés lejos no podrás hacer nada para detenerme – dice con una gran sonrisa.

- pensé que este era el sector de gente joven – dice Shopia.

- que simpática – dice Giha – al menos no me siento en la mesa de niños.

- a mí me gusta estar en la mesa de niños – dice el hermano de Shopia que se llama Miguel – ya que es la mesa de fiestas.

- soy apenas un par mayor que ustedes. No veo ninguna diferencia entre nosotros.

- la diferencia es de un escalón de vida. Usted es nuestra tía y nosotros sus sobrinos – dice Shopia arrugando la nariz.

- ya vasta – dice Harry acercándose a mí – es mejor que nos vallamos

Me coge la mano y jala de ella haciendo que me pare. Camina hacia la salida sin soltarme dejando atrás a todos.

Subimos unas escaleras grandes en forma de corazón hasta el segundo nivel de la casa. Harry no me suelta la mano durante todo el transcurso. Caminamos por un pasadizo muy ancho, a los costados se encuentran puertas de madera que tienen una gran distancia entre ella. Entramos en la tercera puerta.

La habitación esta oscura hasta que de repente el cuarto se ilumina. Es grande hasta creo que es del tamaño de mi departamento.

- ¿es tu habitación? – digo caminando hacia una puerta corrediza de vidrio transparente.

- si – dice Harry

Me volteo y veo que busca algo en su closet.

- ¿creciste en este lugar? – digo sentándome en su cama.

- no. Yo crecí en Inglaterra ya que es donde vivíamos.

- entonces lo compraron después de que tu padre se casó con Giha – digo y él sonríe.

- no, esta casa ya existía. Nosotros nos quedábamos aquí cuando veníamos de visita. Pero después de la muerte de mi mamá esta se convirtió en nuestro hogar.

- dijiste que tu mamá murió cuando eras un niño.

- después de que ella murió mi padre se deprimió, él vino para acá y su trabajo era su vida, yo lo odiaba por comportase de esa manera ya que me ignoro por todo un año – Harry empieza a contarme mientras se sienta a mi lado

- Al principio los tres primeros meses viví con él aquí, pero él al descuidarme y dejarme siempre solo en casa les pedí a mis tías que me llevaran a Inglaterra, mi padre no quiso ya que yo era su hijo y era lo único que tenía, pero por tantas insistencias mías y de mis tías accedió a dejarme ir.

- ¿Qué paso durante ese año? – le pregunto mirándolo, mientras que él tiene la cabeza agachada con las manos juntas reposadas en sus rodillas.

- él se olvidó que tenía un hijo. No se dignó a llamarme ni a escribirme. Nunca llamo ni a mis tías. Lo único que hacia es depositar mensualmente en la cuenta de una de mis tías para mi manutención. No quería saber nada de él hasta que el día de mi cumpleaños llego con un gran regalo. Era diferente, se le veía más alegre, era otra vez mi papá, era la persona que fue antes de que mi mamá muriera. Él se quedó conmigo una semana, salíamos a todos lados, al principio no quería pero no fue por mucho ya que no quería perderlo como perdí a mamá – dice Harry y puedo ver cómo pasa su mano por su cara. Está llorando.

- ¿Cómo murió ella? – pregunto por la curiosidad inmensa que tengo.

- ella tenía cáncer al estómago. Era realmente muy delgada, era hermosa. Mi mamá era grandiosa. Después que ella empeoro mis amigos del colegio siempre venían a buscarme para jugar, sus mamás siempre me acompañaban a casa y me invitaban a ir a las suyas. Al principio no lo entendía pero un día no vi a mi mamá en casa.....ella estaba en el hospital. Mi papá dijo que tenía que ser fuerte.

- ¿no sabías nada?

- no, hasta que ella se encontraba en una camilla – dice y otra vez se pasa la mano por la cara – no tenía cabello y todo su cuerpo se encontraba conectado a aparatos y tenía un tubo de respiración y de suero que entraba por una vena de su mano.

- ¿Cómo lo tomaste? – pregunto y niega con la cabeza.

- llore en el regazo de mi mamá mientras que ella me acariciaba la cabeza. No quería creerlo, ya que ese día por la mañana estaba conmigo en casa riendo, abrazándome – dice Harry quebrándose – ella me despidió antes de ir a la escuela y por la tarde ella se encontraba de esa manera. No lo aceptaba. Le grite ese día en el hospital. Le dije que era una mala persona – Harry empieza a llorar más y su vos se quebranta cada vez más.

Paso mi brazo por su cuello atrayéndolo a mí. El me abraza y apoya su cabeza en mi pecho y empieza a llorar. Le acaricio la cabeza. Me rompe el corazón verlo así.

- la tuve cólera y le dije muchas cosas horrible, sin embargo ella me sonreía y me decía que me quería, que siempre estaría a mi lado aunque ya no físicamente, pero ella estaría a mi lado cuidándome aunque no la vea y que estaría en mi corazón y en mis recuerdos – siento como Harry me abraza más fuerte, pero no me quejo. No quiero hacerlo – ella murió luego de tres días en el hospital. Esos días me la pase sentado a su lado leyéndole mis cuentos. No me separe de ella al igual que mi papá. Le dio un paro cardiaco. No llore en público solo lo hice en su cuarto abrazado a la única persona que tenía. Mi papá.

Nos quedamos abrazados en ese mismo lugar sin movernos. Lo abrazo fuertemente y dejo que llore. Dejo que se desahogue.

Ha sufrido mucho, siempre fue un niño sin preocupaciones y luego su mundo color de rosa se destruyó antes sus pies sin poder prevenirlo.

En estos momentos Harry otra vez vuelve a ser ese niño indefenso que sufre mucho. Otra vez vuelve a ser ese niño sin fuerzas para enfrentarse al sufrimiento, pero la diferencia del ayer con el hoy es que me tiene a mí en estos momentos para poder enfrentarlo.

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