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Mi bebe tiene cuatro meses y cada día la ropa ya no le queda. Todas las semanas se le tiene que comprar si o si nueva ropa. Ya está grande y el parecido a su padre es más notorio, al igual que de Jonah.

Jonah no deja de correr de un lado a otro con sus amigos, mientras que yo me encuentro sentada con Bianca en mis brazos. Observo a mi hijo en todo momento de que se encuentre bien, cuando la mamá de uno de los amigos de Jonah se sienta a mi lado.

- ya está grande tu bebe – me dice ella observando a mi hija que se encuentra dormida.

- sí, ya tiene tres meses.

- pobrecita – dice ella mirando a Bianca con lastima.

- ¿Por qué? – pregunto mirándola.

- porque crecerá sin un padre, al menos el pequeño lo pudo conocer – dice mirando a mi hijo que sigue corriendo de un lado a otro.

- existen muchos niños en el mundo que crecen sin un padre.

- pero debe ser doloroso. Y no solo para ellos, sino que también para ti, ser madre soltera no creo que sea fácil. Tener dos hijos, soportar sus berrinches y todo su alboroto – dice ella – pero lo bueno es que al menos tuviste un esposo adinerado y no es necesario que trabajes.

La mujer se para y se aleja caminando lo más elegante posible.

No puedo creer lo que acaba de decir. No me siento mal por ser madre soltera, no me siento mal por tener que cuidar a mis hijos; al contrario, estoy agradecida con la vida, que me ha dado a dos pequeños angelitos. Yo nunca pedí esto, yo nunca imagine que me pasaría esto. Yo nunca planee casarme con un hombre adinerado, no planee tener dos hijos, yo no planee que mi esposo se muera. Esa mujer está completamente equivocada, una mujer puede cuidar a sus hijos sola, puede sacarlos adelante y estos pueden llegar si quieren conquistar otros planetas.

Al llegar a casa Jonah se queda dormido al igual que Bianca. Me preparo una taza de café caliente y me siento en el sofá, prendo el televisor y empiezo a pasar canal en canal hasta parar en un programa de noticias.

Sorbo mi café despacio y disfrutando de su sabor, mientras miro las noticias donde están informando sobre un robo en una tienda de ropa, que no conozco.

Dejo mi taza en la mesita para tomar el control y cambiar de canal cuando termina la noticia del robo y vuelve a la reportera en el estudio y esta empieza a hablar sobre la siguiente noticia.

- ya ha pasado más de cuatro meses del accidente del avión EK-123 que sufrió una caída estrepitosa.

Me detengo Y bajo el control remoto para seguir escuchando. Es sobre el accidente de Harry.

- donde el cual solo hubo tres sobrevivientes, que se encontraban en estado crítico y el día de hoy han despertado al encontrarse en estado de coma.

- ¿sobrevivientes? – Me pregunto – creí que todos murieron.

- una noticia sin duda muy conmovedora y hermosa. Ya que según los doctores que han estado al cuidado de estos pacientes dijeron que las probabilidades que despierten son de una en un millón. Ya que estas personas sufrieron fuertes golpes en la cabeza, como quemaduras en el cuerpo.

- al menos están vivos – digo sorbiendo mi café.

- aunque se sabe que uno de los pacientes que ha despertado y el otro sobreviviente que aún sigue en coma no han aparecido ningún familiar hasta hora.

- ¿es que acaso su familia no se pregunta dónde carajos están? – digo indignada que existan personas con tan poco sentimiento y preocupación por su familia.

- la preocupación de los doctores en estos momentos es que el paciente que aún no despierta, al momento de despertar tenga secuelas graves como la pérdida de memoria o discapacidad, pero lo más grave es que este no despierte nunca. Mientras tanto los otros dos sobrevivientes se encuentran ya estables, según las declaraciones de los doctores. Por el momento es todo lo que se sabe.

Doy un gran suspiro y apago el televisor. Dejo la taza en el lavadero y me dirijo al cuarto de Jonah que está profundamente dormido. Me acerco a él y le doy un beso en la frente. Mi peque hombrecito, la misma imagen de su padre.

Salgo de su cuarto y me dirijo al mío, donde Bianca se encuentra dormida en su cuna. Me acuesto en mi cama y me quedo dormida pensando en lo afortunados que deben ser los familiares de los sobrevivientes.

A la mañana siguiente me levanto temprano, no porque quise, solo porque Bianca lo desidia así. Me puse a preparar tortillas de arroz y jugo de naranja para el desayuno, mientras que Jonah se encuentra en la sala mirando televisión y Bianca me acompaña en la cocina en su pequeño asiento de bebe movible.

Termino de preparar todo y llamo a Jonah a tomar desayuno. Le sirvo y este empieza a comer, cuando de repente tocan el timbre de la puerta varias veces seguidas, para luego pasar a golpearla.

Camino rápidamente y veo por el monitor quien es y me doy con la sorpresa que es el señor Cameron, el papá de Harry. Abro la puerta rápidamente y el entra rápidamente.

- ¿los niños? – dice asustado.

- en la cocina – digo señalando - ¿Qué paso? – pregunto asustada.

- el apareció. 

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