Crazy For You •KNJ BTS•

Capítulo 10.

El tiempo que JungKook le había dedicado a aquella canción no había sido en vano. El joven invirtió su preciado fin de semana e incluso algunas horas de sueño.

La razón era una. Estaba enamorado.

YoonSo había pasado de ser su asistente a la persona más importante en su vida.

Llegar a quererla había sido la mejor decisión que pudo haber tomado.

Recordó cuando descubrió aquellos sentimientos.

YoonSo solía ser una chica demasiado callada y con carácter fuerte. Le gustaba su sonrisa, que no solía salir frecuentemente ni sin razón aparente. Al chico no le gustaba la idea de agregar pleonasmos al momento de describir a la joven, pues en realidad no hacía falta. JungKook sentía lo que sentía y no estaba dispuesto a cambar nada.

Pero ¿Por qué las cosas habían resultado de dicha forma? YoonSo había sido la única mujer en su vida que se había atrevido a corregirle. Se pasaba la mayor parte del tiempo cuestionando el comportamiento del muchacho y repudiando su falta de interés. Al principio, para JungKook era un suplicio estar al lado de la joven, pero con el tiempo, el chico comprendió que lo qué YoonSo hacía no era por otra cosa que por preocupación.

Darse cuenta lo maravillo. Pues nunca en su vida nadie se había tomado la molestia de corregir sus errores. Gracias a la chica JungKook había logrado cambiar su mentalidad, yendo de lleno al camino para volverse un hombre de verdad.

Sin embargo, para JungKook nunca fue fácil demostrar sentimientos. Inconscientemente, molestaba a YoonSo frecuentemente, haciéndola trabajar de más o insultándola con pequeñeces. A veces, la obligaba a quedarse hasta tarde terminando proyectos atrasados, con el fin de poder estar con ella un poco más de tiempo.

Pero hubo algo que lo motivo a hablarle a la chica sobre sus sentimientos.

Recientemente, YoonSo le habló sobre su nuevo amor. La forma en la que JungKook miró a la joven expresarse sobre aquel desconocido, hizo que el muchacho se estremeciera de temor. Sabía que aquel sentimiento no era justificable, pues la joven desconocía lo que Jeon sentía.

Su laxo corazón se rompió por primera vez.

JungKook no se dio por vencido, pues una cualidad de que tenían los Jeon era la tenacidad.

Un día se puso de pie y se alisto para la escuela, llamó a Yoongi y le preguntó sobre el chico que había comenzado a cortejar a su hermana.

— ¿Qué clase de persona es, hyung?

— No tengo ni puta idea Kook. —Yoongi bufó al teléfono. — Falta una hora para que mi alarma suene y tú te atreves a despertarme para preguntarme algo tan estúpido como con quien coge mi hermana. Eres maravilloso.

— Hyung, a veces creo que eres un estúpido. — Soltó sin pensar. — ¿Cómo puedes hablar así de algo tan delicado?

— Delicado mi trasero. YoonSo ya es un adulto, sabe lo que hace.

— Está bien... —Suspiró. — Si cooperas te diré lo que Jimin le contó a mi hermana el otro día sobre ti.

— ¿Neul te dijo algo?

— Diablos, no. Pero los hermanos tenemos nuestros métodos. Hablaban por el teléfono de la casa, simplemente descolgué el teléfono que hay en mi habitación y me puse a escuchar. Hay veces en el que esos dos son realmente entretenidos. Además, Hoseok quería saber que pensaba Neul sobre él.

— ¿Bueno o malo?

— No lo sé...

— Ahg, está bien. — Yoongi suspiró. — YoonSo ha hablado mucho de ese bastardo últimamente. Dice que la trata demasiado bien y que es muy tierno. Pero le molesta no poder pasar el tiempo suficiente a su lado por estar contigo. Hasta donde sé, no se ha acostado con él, aún. Ahora habla, rata.