Pecando Con Mi Suegro (taylorlautner)

Capitulo 6

-¡Brooklyn!-cuando menos me lo pienso siento sus brazos tomar los míos y me envuelven a pesar de que trato de liberarme de ellos son como cadenas a mi alrededor y termino rindiéndome a ellos, su cuerpo calienta al mío, en esta fría noche y me resulta relajante su contacto, el olor a canela me invade y solo quiero quedarme aquí. Sé que está prohibido, sé que es un pecado. pero me gusta tanto estar en sus brazos.

-¿que sucede? Habla conmigo vamos, no puedes salir corriendo de esa forma-pero yo no puedo ni moverme-¿estas llorando?-sus manos levantan mi barbilla y a pesar de que cierro los ojos las lágrimas resbalan por mis mejillas-ven te llevaré a casa-

-no quiero ir a casa-digo sollozando ahora viéndolo, no puedo regresar a casa así, mama me haría un interrogatorio que no quiero contestar. Y el está tan cerca de mí que puedo oler su perfume, necesito salir de aquí.

-está bien, iremos a otro sitio pero no puedo dejarte ir así, estás muy alterada-se que no me dejará ir por mucho que insista así que asiento y él me lleva a su auto, lo veo recoger mi bicicleta de nuevo y meterla en la cajuela. Antes de arrancar, toma su teléfono y lo pone en su oído después de unos minutos habla.

-llevaré a tu novia a casa, cena algo y espérame, porque cuando llegue tendremos una charla sobre modales que parece que olvidaste-cuelga y enciende el motor.-este chico me sacara canas antes de tiempo, me dijeron que la adolescencia sería difícil, no sabía que tanto-

-lo siento, todo es mi culpa-digo más que avergonzada.

-ya veremos Brooklyn no seas tan dura contigo-seguimos el camino en silencio, no era incomodo pero me dio tiempo de calmarme, después de un tiempo conduciendo se detuvo en una zona arbolada.

-¿dónde estamos?-le preguntó.

-es un lugar al que vengo a escalar con Sam-sale del auto y yo lo sigo, entramos en la zona arbolada y seguimos un camino de tierra hacia un terreno abierto, con una gran montaña de roca al frente.

Tay se sienta en unas rocas más pequeñas en el piso y yo hago lo mismo.

-bien Brooklyn, cuéntame lo que pasó, por qué sin duda alguna te está afectando-

-estaré bien, en serio solo fue una estupidez-su mano toma mi barbilla y la levanta, la corriente eléctrica vuelve a atravesarnos y me suelta deprisa, de nuevo.

-vamos Brook habla conmigo, algo me dice que no es algo que haces muy a menudo, sé que no estás cómoda porque soy el padre de Sam pero te prometo que no intervendré si no quieres que lo haga-sus ojos negros no se despegan de mí y su aura tranquilizadora, llena de confianza me envuelve.

-dime qué paso-estoy tan cansada de todo que al final me rindo, es extraño pero Taylor me hace sentir cómoda y solo lo conozco desde hace poco.

-discutí con Sam-

-eso es obvio, ¿sobre que discutieron?-me tapo la cara por qué es tan vergonzoso decirle esto al padre de mi novio.

-dice que no confío en él y cree que tengo otro-

-¿eso es cierto?-lo miro más que sorprendida.

-claro que no-digo ofendida.

-entonces ¿por qué creería algo así?-vuelvo a taparme la cara.