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Levi entró a la habitación de su hermana esa tarde, la encontró sentada en en suelo mirando el álbum que iba dentro de uno de los cds de Kloss, se sentó a su lado y observó lo que estaba haciendo —. ¿Te acuerdas de la chica que te dije que me gustaba hace como tres meses?—le preguntó, ella asintió —. Pues ahora me gusta otra, o eso creo.

—Es Nina, ¿cierto?—él asintió, Irene suspiró y volteó a verlo—. No tengo la mejor relación con ella, es alguien bastante ingenua, un poco torpe y muy terca cuando se enfrasca en un tema pero a pesar de eso, es una chica de buen corazón y creo que podría hacerte bien.

—Ya no salgo con chicas—dijo orgulloso —, pero todavía siento que lo que sea que tenga con ella, no da para nada. Ella me parece alguien fenomenal y de verdad me gustaría tener algo serio.

—¿Se lo has dicho?

—¡No me cree!—exclamó y se lanzó hacia atrás golpeándose fuerte la cabeza —, falange.

—Torpe—se rió —¿Acabas de decir falange?

—¿Acaso no puedo usar un hueso humano para expresar mi dolor?

Su hermana lo observó con el ceño fruncido, prefirió no responder a su pregunta y cambió el tema—. Invita a salir a Nina, llévala a comer. A un lugar de verdad no esos sitios que tú frecuentas.

—Mis sitios son los mejores —comentó orgulloso y se levantó del suelo—. Me iré a ver a Andy, debo contarle mi problema, necesito de alguien que sepa de opinión femenina.

—Se supone que debes preguntarme a mí, soy mujer.

—Tu idea es que la invite a salir, ya lo hice y adivina...seguimos igual —rodó los ojos—. No sé para qué tienes una página de consejos si no das buenos —la chica se llevó una mano al pecho.

—Me dueles, Luciano—Levi frunció el ceño.

—Te prohíbo llamarme así—respondió molesto, Irene sonrió, encontró su punto débil.

—Ese es tu nombre, ¿Nina lo conoce?

—Mi nombre es Levi, y Nina sólo conocerá ese—se levantó del suelo—. Me iré con alguien que sí sepa dar consejos.

—A ver si te atreves a ser claro en Nina y besarla.

—La única razón por la que no la beso es porque no quiero que ella piense que es una más del resto, no quiero que crea que soy una persona promiscua y altanera—comentó—. De verdad creo que me gusta y me gustaría hacer las cosas bien, al menos por una vez en mi vida.

—Desconozco esa seriedad en ti.

—A veces debemos ser serios para poder ver lo que necesitamos en nuestra vida.

N/A: Me voy a hacer spam y les diré que pueden pasarse por mis historias de Positivamente No y La Musa y Marie; ambas están empezando así que seria lindo que la leyeran. Gracias.

A Él SÍ Le Gustas TantoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora