Extra.

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Pov Rose.

La cena de esta noche como la de hace meses atrás se supone que es importante, en la anterior salí del closet por las circunstancias, y gracias a Emma pude mantener las apariencias delante de Sabrina. Quisiera decir que me encuentro bien, más mis sentimientos solo se congelaron en el tiempo, dejándome en la niebla de lo que alguna vez sentí.

¿Se puede dejar de sentir?

Aquella pregunta atormenta mis noches, al no saber que es lo que precisamente mueve mi vida. ¿Cuales son mis metas? ¿Cuando me detuve a pensar en eso? ¿Lo había hecho realmente?

Heme aquí frente a mi vestier viendo cada una de mis prendas buscando una que encaje con mi estado de ánimo, si es que eso es posible. Siento la puerta de mi cuarto abrirse y mis ojos chquean quien puede ser, noto a mi hermana en el marco de mi puerta mirándome con aquellos ojos, escaneando mi rostro como lo ha hecho la mayoría de los días. Fuerzo una sonrisa que estoy segura salió como una mueca y ella prosigue a sentarse al lado mío.

¿Que te pondrás? —como todo este tiempo, pasa de preguntarme su verdadera duda, y trata de entablar una conversación vaga y vacía

En realidad no sé —le respondo poniendo mi vista otra vez en la variedad de vestidos —no quiero vestirme así la verdad

¿Y como quieres vestirte? —me pregunta, puedo sentir su mirada en mi

Un blue jean y una franela negra —se que está sintiendo sin necesidad de verla más coloca su mano sobre mi hombro y mis ojos automáticamente la miran y como dije tiene una sonrisa

Entonces vistete como tú quieras —termina de levantarse y cierra aquellas puertas abriendo las de al lado, en donde hay varios pantalones, saca unos rasgados en las rodillas y una camisa algo elegante pero negra al fin —recuerda que lo que importa es que te sientas bien tu misma, con tu persona

Gracias —me levanto y tomó la ropa que me voy a poner para llevarla al baño —¿que te vas a poner tu?

Bueno, ya que quieres cambiar un poco el estilo de esta familia, me pondré algo casual como tú hermanita —,y es allí cuando una genuina sonrisa sale en mis labios, volteo a verla y veo cómo me guiña el ojo —casual pero hermosa me veré —Camina hacia atrás de forma infantil hasta que sale de mi cuarto

Al final me meto en aquella ducha con una ligera sonrisa, las gotas de agua colisionan contra mi cuerpo borrando cada momento del día, limpiando mi alma o intentándolo.

Al salir me miro en el espejo, mi cabello ha crecido un poco, mis ojos oscuros están  más apagados desde hace un tiempo, y aunque trate de no verlo, también estoy más delgada.

Me coloco primero el pantalón, salgo y enchufo el secador, y en menos de 15minutos ya mi cabello esta completamente seco, término por colocarme la camisa, y prosigo a maquillar de forma ligera mi rostro. Al cabo de minutos coloco mis zapatos negros y salgo del cuarto. Al bajar la escalera me topo con mi  madre en un hermoso vestido blanco, y al verme se impresiona más sólo me sonríe.

De verdad que tengo una hija hermosa —aquello me hace reír

Y yo una madre preciosa —ella también ríe y se acerca abrazandome —¿y eso que no estás como siempre?

No se, hoy quería algo más al natural. ¿No te molesta? —pregunto insegura

Por supuesto que no, es diferente pero si es lo que quieres, no me voy a molestar —me Alejo de sus brazos y doy una vuelta sobre mi propio eje pero antes de decir algo tonto mi padre aparece en la sala

El cielo de tus ojos. (Lesbico) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora