Hermosa traición [Dramione]

Dos versiones, dos bandos.

Hermione y Draco no tardaron en averiguar la verdadera fuente de los rumores.

El pequeño Scorpius apenas salía de casa, era peligroso para él, puesto que no todo lo que decían era falso: el rubio ya hacía magia.

Sí, cómo lo leen, Scorpius Malfoy-Granger, de tan solo un año de edad, hacía magia. Si se enfadaba podía destrozar cualquier cosa, si quería algo a veces lo atraía, si se aburría atemorizaba a la familia con travesuras... Pero, después de todo, sólo era un bebé.

Y era imposible negar que era hijo de Draco. Quizás lo de Herms no colara tanto, puesto que apenas se parecen, pero el niño, rubio platino casi blanco, piel pálida y ojos hermosamente grises era el retrato bebé de su padre.

La gente miraba a la pareja, con ojos de acusación, intentando descifrar si era verdad lo que se contaba.

Hubo varias revoluciones contra la ministra, y, por ende, contra el Ministerio de Magia.

El rendimiento de profesores y alumnos de la Primera Universidad Mágica Albus Dumbledore también se vió afectado.

La castaña pasaba horas enteras acurrucada en su cama, a oscuras y en silencio, acompañada únicamente de sus sollozos.

Su novio gastaba el tiempo con papeleos y gestiones.

Harry empezó a descuidar sus labores como Auror para intentar ayudar a su amiga.

Ron y George cerraron temporalmente la tienda de artículos de broma para dedicarse a animarlos.

Ginny usaba su influencia cómo periodista de la sección de deportes para llevar la verdad a las secciones principales. También esparcía noticias a su antiguo grupo de jugadoras de Quidditch.

Rose pasaba los días llorando con sus abuelos paternos, o con Teddy, mirando el cielo en silencio.

Astoria recordaba todo lo que podía de su hermana, para saber cómo pararla.

Luna publicaba una y otra vez en El Quisquilloso la verdadera versión de la historia.

Rolf y Alan se volcaron en encontrar su paradero.

Pansy y Blaise intentaban acallar los rumores a base de amenazas, Neville hacía lo mismo, pero de forma más tranquila.

Casi a diario había discursos en el Ministerio, donde Herms contaba la verdad; lo mismo pasaba en la universidad, había reuniones y preguntas de opinión todos los días.

Hasta en Hogwarts, la directora McGonagall decía la verdad en cada clase que tenía.

No había una sola persona que no conociera las dos versiones... Ahora, lo difícil era creer la correcta.

·¡Por Merlín! ¿Scorpius Malfoy hijo de Voldemort? ¡Hermione jamás lo permitiría! Además... Su cabello, sus ojos, su piel... ¡Es un mini Draco! Si la sanadora que determinó el embarazo de la castaña era incompetente no tiene que pagarlo el pobre niño. ¿Que si ya hace magia accidental? ¿Qué esperabas? ¡Es hijo de la mismísima Hermione Granger! - Esa opinión se oía mucho...

·Tienen razón, Scorp es muy pálido y sus ojos tienen un toque azulado... Es imposible que haga magia accidental y no sea malo. Su propio "supuesto" padre era un mortífago. ¿Que Hermione no querría? Por favor... Ni la bruja más valiente se negaría al apuesto y adinerado Draco Malfoy, ¿de verdad pensáis que fue por amor? Claro... Y por la niña. El interés se nota a la legua. - ...Pero quizás no tanto cómo esta.

Rápido se formaron tres bandos:

-Los que apoyaban a Hermione y Draco (llamados por los otros cómo los crédulos). Querían defender y proteger a Scorpius.

-Los que apoyaban a "anónimo", o sea, a Daphne Greengrass. (Estos eran los negados). Querían matar a Scorpius.

-Los que no sabían a quién creer o no querían meterse en conflictos, los indecisos.

Tanto "crédulos" cómo "negados" defendían su opinión con uñas y dientes. Los "indecisos" se mantenían al margen de todo.

Si esto continuaba así por mucho tiempo, podría acabar en otra guerra, y, sin duda alguna, el mundo mágico no estaba preparado para eso.

La historia... Va a terminar. No quiero que lo haga, y la estoy alargando todo lo posible, pero no puedo hacerlo mucho más. Quedan unos cuantos capítulos, después subiré varios extras... Bueno, varios... O más 😂.