Capitulo 6

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{Maratón 2/3}

—¿Se besaron? —preguntó Travis sorprendido.

—Si. —acomodé unos discos que estaban fuera de su lugar.

—¿Y te gustó? —levantó una ceja.

—Si. —sonreí recordando los dos besos que Ash y yo nos habíamos dado.

—Me alegro por ti —sonrió.— pero explícame algo, ¿te gusta o lo besaste por que se dio el momento?

—No lo se Trav, es algo raro. Me gusta mucho, pero es más que tan sólo 'gustar'.

—Oh —sonrió.— Estas enamorada de el. —me miró de una manera tierna.

—Claro que no.

—Claro que si, ¿que es lo que más te gusta de el?

—Todo. Su sonrisa, sus ojos, sus brazos, su forma de ser conmigo, es muy gracioso, caballeroso, lindo, tierno, bonito, perfecto. —sonreí.— cada vez que lo veo siento algo raro en el estómago.

—Estas enamorada de el —canturreó.— no lo niegues.

Llegaron algunos clientes y Travis los atenidó. La tienda estaba muy tranquila así que puse algo de música, Bon Jovi para ser exactos. Después de un rato llegó una niña de aproximadamente unos 8 o 9 años seguida de una señora de edad media. La niña se puso a revisar algunos discos y después comenzó a llorar. La señora, al parecer su mamá la abrazó y le preguntó que si que le sucedía, la niña dijo algo que no entendí y se acercaron ambas al mostrador.

—Disculpa, ¿no tienen el nuevo disco de One Direction? lo hemos estado buscando por todos lados y no lo encontramos. —dijo la señora.

—Claro que si, esperen un momento. —fui hasta el pequeño almacén en la parte trasera de la tienda y revisé algunas cajas hasta que encontré el disco. Volví y la niña sonrió al ver lo que traía en mis manos. Lo pagaron y ambas se fueron felices.

A los minutos llegó Jeoff, nuestro jefe. Venía con una sonrisa así que traía buenas noticias.

—Hola Travis, sigues haciendo ejercicio ¿no? —lo halagó mientras le daba dos palmaditas en la espalda.

—Así es. —dijo Trav orgulloso.

—Hola Brooky, tan linda como siempre. —me dio un abrazo.

—Gracias Jeoff. —le sonreí.

—Bueno chicos, venía a felicitarlos por que han echo un buen trabajo, las ventas han subido notoriamente y esto se debe a la carisma de ustedes dos y obviamente a los precios y todo eso. Así que vengo con a darles su dinero y a darles vacaciones. —nos guiñó un ojo.

—Gracias. —dijimos Travis y yo al mismo tiempo.

—Gracias a ustedes chicos. —nos sonrió.

Nos pagó y se fue, dándonos permiso de cerrar temprano. Ya faltaban cinco minutos para cerrar cuando sonó la campana de la puerta, no le puse mucha atención puesto a que estaba guardando mis cosas

—Trav, tu turno.

—Yo no quiero que me atienda Travis. —volteé y estaba Ashton apoyado en el mostrador con una sonrisa.

—Hola. —sonreí.— ¿qué te trae por acá?

—Quise venir a ver a la chica más linda del mundo.

—Ya. —me sonrojé.

—¿A qué hora sales de aquí?

—Pues —miré el reloj de la pared.— estamos por cerrar.

—¿Quisieras salir a tomar algo? —levantó una ceja.

—Claro. —sonreí.— Sólo déjame avisarle a Travis. —me guiñó el ojo y fui al almacén donde seguramente esta Trav, y en efecto, ahí estaba.— Oye, saldré con Ashton, cierra tu. —le di las llaves de la tienda.

—Esta bien, cuídate. —sonrió y le devolví la sonrisa. Regresé con Ashton y tomé mi pequeño bolso. Cuando llegué a su lado me sonrió y salimos juntos.

Subimos a su auto y manejó hasta una pequeña heladería. Bajamos y Ash pidió dos malteadas de chocolate y por más que le dije que no lo hiciera, pagó por mi. Nos sentamos en una mesa al aire libre y platicamos un rato, pude notar que me estaba observando a través de los lentes de sol negros.

—¿Podrías dejar de mirarme? —sonreí.

—No te estoy mirando. —sonrió.

—Ashton, puedo ver tus ojos a través de los lentes.

—No, no puedes.

—Eres un idiota. —reí.

Y tu eres hermosa.

-—Ashton Irwin, si no te conociera mejor diría que estas tratando de coquetear conmigo.

—No es 'tratar' si lo logro. —sonrió. No supe que responderle así que me limité a reír.

Después de una hora salimos de ahí y Ash me llevó a mi casa. Nos despedimos y entré, estaba cansada y lo único que quería hacer era dormir. Abrí la puerta de mi habitación y me quedé asombrada con lo que vi.

beside you » ashton irwinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora