2. All That Matters [Segunda Temporada. Part. 1]

20. El dardo

Justin no tenía ni la menor idea de adónde podrán haber ido. El celular de ella estaba en la mochila... y la maldita mochila la llevaba él. Derek ha conducido toda la noche a paso lento para localizar sus caras pero no veían nada. Ya comenzaba a amanecer y le aterraba pensar que Roman pudo encontrarlos, a Jaxon, a Vanessa o a su chica.

-Justin, ¿Intentaste llamar a Vanessa?- preguntó Derek.

-Imbécil. No tengo su número de teléfono, tenemos una idea de dónde estarán, iremos a Los Ángeles, Vanessa tiene ahí una prima que dijo que nos ayudará a mantener a salvo a ______.

-¿Los Ángeles?

-Los Ángeles.- afirmó Justin.

-¿Qué haremos una vez ahí?

-La cosa es que primero quería ir por Jack para que se regresara a Londres. Le preocupa que puedan hacerle algo.- Miró a Derek y vió que reprimía sus labios.- ¿Qué?

-Hermano, no quisiera decirte esto, pero si dejas que se comience a preocupar por alguien más, podrías perderla.- Lo miraba con advertencia. Justin no lo había pensado.

-No, no es cosa de que de la nada _____ prefiera irse con Jack que conmigo. Ella es mía y de nadie más, y lo sabe, se lo he demostrado de muchas manera, se lo he dicho, no... No soporto la idea de que ______ se aleje de mi lado.

Justin abrió la puerta del coche aún en movimiento, pero Derek frenó repentinamente haciendo que Justin se golpee con el borde y finalmente salga del coche.

-¿A dónde vas?- pregunta Derek mirando sus acciones.

«Joder, mi cabeza.»

-Iré a caminar.

-Pero...

-Déjame solo.- cerró de un portazo y comenzó a correr dentro del bosque. Quería despejarse, no saber nada por un momento, concentrarse sólo en correr y correr hasta que el pecho le rogara un descanso y lo obligara a descansar.

El solo pensar que _______ pudiera alejarse de él, le destruye el alma. Recordaba cuando la conoció. Sabía que había sido muy estúpido con ella pero en parte no se arrepentía de nada, ella fue quien me retó, fue quien la conoció de verdad a la primera, en pocas palabras, fue a quien aprendió a amar como no lo había hecho en años.

El dolor de cabeza se volvía cada vez más fuerte, ese no fue un pequeño golpe, de verdad le dolía. Además de que estaba corriendo cada vez más rápido y estar tan agitado no le ayudaba a su cerebro.

De pronto sintió una inyección en el cuello.

« ¿Qué demonios ha sido eso?» Se quitó la inyección y era un dardo con un somnífero.

Lo sacó inmediatamente pero al inspeccionarlo, el suero estaba ya estaba en su cuerpo.

Apoyó una de sus manos en un árbol esperando respirar aire fresco del bosque pero comenzaba a sentirse mareado, los ojos se le ponían llorosos y veía borroso, las cosas se movían de su lugar por todas partes pareciendo que bailaban, y entonces recordó que no había comido nada, dejó los tacos que había comprado esta mañana.

«Maldita sea, se veían tan buenos.»

-¡Justin!- escuchó gritar una voz femenina.

Justin ya estaba sentado en el piso. Enseguida su vista se hacía borrosa pero se hacía la idea de que era _______ quien estaba gritando su nombre.

-¡Justin, ayúdame!

Buscó con su mirada alguna pista o algo que indicara vida humana que no fuera él, pero sólo veía árboles.