No me gustan los hombres,Solo me gustas tu

por favor hazme el amor

 Era el momento, era justo el momento que yo menos quería que llegara, tomé un sorbo de mi café mientras esperaba a Eunha en mi cafetería favorita, mis uñas comenzaron a arrancar la pintura blanca de la mesa de madera y podía jurar que el pánico se estaba apoderando de mi cuerpo, se suponía que la iba a ver para decirle lo mío con Jae Bum, sinceramente no sabía si sería capaz.

Mierda, mierda, mierda, yo realmente no quería decirle nada y sí, eso tal vez me hacía un cobarde, y sí, también me hacía un idiota.

Im Jae Bum

Junior llegó a mi casa derramando lágrimas, creo que nunca le había visto llorar de ese modo, me asusté demasiado cuando al abrirle la puerta corrió a mis brazos hundiendo su rostro en mi pecho.

—¿Qué pasó con Eunha, mi amor? —Le pregunté rodeándolo con mis brazos, intentando obtener información. 

Lo único que conseguí fue que llorara más fuerte.

—Bueno, no importa lo que sea, lo superaremos juntos, yo te ayudaré, ¿De acuerdo? ¿Ella dijo algo malo sobre nosotros?

Junior asintió mientras sollozaba y me apretaba fuerte contra él, como si jamás fuera a soltarme.

—¿Qué dijo? —Me aparté un poco de su abrazo para poder levantar su mentón y que me mirara a los ojos. ¿Qué le pasaba? ¿Por qué lloraba de esa forma tan desgarradora? Negó rápidamente y junto nuestros labios, me besó suavemente ya que los sollozos y el llanto no lo dejaban tranquilo.

—tranquilo, ¿Recuerdas que no nos importa lo que los demás piensen? Ella lo superara, no quiso decir lo que dijo

No sé por qué pero cada vez que yo decía algo para tranquilizarlo, lo hacía llorar aún más, que pésimo novio era yo.

—¿E-Están t-tus padres? —Preguntó mientras intentaba limpiar las lágrimas de sus mejillas.

—No, ellos... salieron.

—Ven aquí

Rodeó mi cuello con sus brazos y me besó tan profundamente que me sentí como si se llevara mi alma consigo mismo. Sus lágrimas mojaban mi pecho, ya me estaba asustando.

—Estoy listo, Jae Bum —Susurró en medio del beso.

—¿Listo para qué?

—Hazme el amor. Ahora

Me besó de nuevo ahogando sus sollozos en mi boca.

¿Qué? Pero... ¿Acaso lo decía enserio?

—¿Estás bien, Junior ? —Intenté apartarme pero él se quejó y volvió a besarme.

—No te alejes, Jae Bum por favor... por favor hazme el amor —Lloraba pero me pedía tal cosa. Le correspondí al beso poco a poco, disfrutando su lengua y el calor que emanaba su boca, su aliento a café.

Toqué con cuidado sus muslos para hacerlo alzar una de sus piernas indicándole que me rodeara la cadera, eso hizo y con sumo cuidado de no tropezarme subí las escaleras hasta mi habitación. Al llegar lo primero que hice fue colocarlo sobre la cama y apartarme para mirarlo.

—¿Ya me dirás que te sucede? —Y es que él seguía siendo un mar de llanto. Me respondió poniéndose de pie y volviéndome a besar, esta vez arrastrándome con él hacia la cama, los besos eran tiernos y sin prisa, como si él quisiera guardar en su memoria cada sensación.

Mis manos tomaron su cadera para acomodarlo en una mejor posición, una en la que mi pelvis rozara su miembro, ¿De verdad haríamos el amor de nuevo?