No me gustan los hombres,Solo me gustas tu

controla tus celos

—¡Bunny! ¡Hemos llegado! —Gritó Junior en cuanto entramos por la puerta de su casa.

—¿"Bunny"? —Le pregunté casi en reproche, estaba celoso, estaba malditamente celoso.

—Así le decía cuando éramos pequeños —Me sonrió.

—¡Ya voy! —La voz del mal tercio sonó desde arriba.

—Yo quiero un apodo también —Me quejé, él soltó una risita y acercó sus labios a mi oído.

—Tú eres mi bebé —Y entonces me puse contento.

—Qué bien que llegas, Zhuzhu —Kim Yugyeom lo tomó por la cintura y lo jaló hacia sí para besarlo en la mejilla.

Al instante todos y cada uno de mis músculos se contrajeron, apreté mis puños y mandíbula, cerré mis ojos e intenté respirar con normalidad, "uno, dos, tres..." contaba mentalmente para tranquilizarme ya que si no lo hacía agarraría a golpes al idiota que primero llamó "Zhuzhu" a mi junior y que segundo, lo tomaba de esa forma y se atrevía a besarle, es que simplemente Kim Yugyeom quería morir esa tarde.

—¿Podrías soltarlo? —Pregunté en el tono más tranquilo que pude, traté de ser amable, de verdad lo intenté.

—¿Uhm? —Kim Yugyeom abrió sus ojos, sus labios seguían posados en la mejilla de Junior .

—Que lo sueltes, imbécil —Reclamé con autoridad, en cuanto Kim Yugyeom lo soltó, mis brazos se apoderaron de la cintura del pelinegro y mi quijada se hundió en la unión su cuello y hombro.

—Mío, jamás vuelvas a tocarlo de esa forma —No sé por qué lo dije, ni sé de donde saqué el valor, o cómo me atreví a reclamarlo como de mi propiedad pero se sentía bien. Kim Yugyeom arqueó una ceja mirando interrogante a Junior , este no supo hacer otra cosa más que colorear sus mejillas de rojo y arrastrarme con él hacia su habitación dejando al chico solo en la sala.

—¿Puedes controlar tus celos? —Me reprendió.

—¿Puedes decirle que no te toque ni bese? —Mi pregunta había sonado como reclamo, porque, Kim Yugyeom sí podía tomarse esas libertades con él, pero yo no.

—¡Es un amigo! ¡Me lo reclamas como si yo fuera un gay reprimido! —Sus blancas manos se pasaban por su cabello con desesperación, queriéndome hacer entender. Que poca paciencia.

—¿Entonces no te gusto? Si no eres gay, significa que no significo nada para ti, al menos no como más que amigos —La situación me estaba cansando, definitivamente Jinyoung no sabía lo que quería, ni siquiera me quería, yo solo era un juego para él y por más que me muriera por estar con él, nada iba a cambiar.

—¿Por qué tienes que seguir haciéndome a un lado? —Insistí.

—Es complicado, Im Jae Bum .

—Me queda claro, puedes olvidar todo, olvida esa mierda de ser mi novio y todas las estupideces que te dije, solo sigamos siendo amigos, actuemos como si nada hubiera pasado, después de todo eso era lo que tu querías.

No sé si era posible que estuviera más furioso, no sé si era sano el ritmo acelerado que mi corazón tenía o si al estar casi llorando me veía débil, eso me lo había buscado yo solo, me había echado la soga al cuello, sabía que enamorarme no me convenía y menos de Jinyoung, mucho menos de él.

—¿Qué dices? —Sus ojos se abrieron en señal de sorpresa y me miró como si le acabaran de decir que él moriría en una semana.

—Lo que escuchaste, ahora debo irme a casa, tengo cosas que hacer, te veo mañana —Mi mano quiso tomar la perilla de la puerta pero el pelinegro no me lo permitió.