Max
Sinceramente pasó más de una hora desde que Meid se fue al baño comencé a asustarme, tenía un mal presentimiento. Así que pedí ayuda a mi hermano que se encontraba al lado mío, algo estaba pasando podía presentirlo. Con Derek decidimos dividirnos así podríamos hallarla más rápido. Entré a una especie de pasillo, al atravesarlo había una escalera que llevaba directo arriba. Algo no estaba bien.
Silenciosamente fui subiendo cada uno de los escalones, cuando me encontré arriba comencé a investigar, había más de 3 habitaciones.
-Derek, ¿alguna señal? ¿Pista o lo que sea?- Coloque mi celular para al menos, escuchar mejor la respuesta.
-Idiota, estoy detrás tuyo- Dijo para finalizar la llamada y guardar su celular.
—¿En cuáles de las habitaciones ella estaría?- pregunté.
—No lo sé, sólo hay una forma de averiguarlo- Exclamó. Tiene razón, decidí arriesgarme, al abrir de golpe la puerta encontré a una pareja asustada por nuestra reciente acción y estábamos interrumpiendo un beso o tal vez iba a ser más que eso.
—Ups, un error- Dije alejándome de la puerta. Iba a cerrar la puerta pero mi hermano lo detiene.
—Sigue así, ya es toda tuya- Dijo con un guiño al chico quien estaba petrificado por lo que había pasado, luego de eso cerro la puerta.
—Abrí esta ahora- Ordena mi hermano.
—Ábrela tú idiota- Ordené mirándolo mal.
—Bien bien, de acuerdo, tú ganas- Rindiéndose, al abrirla no había nada, estaba vacía. Cuando iba a decirme que abra la siguiente, fui corriendo, abrí la otra puerta. No había nada, todas estaban vacías o tenían ropa, abrigos, hasta cosas de mucho valor. Hasta que pensé rápido, vi el tapiz, toqué con mi dedo el tapiz su textura era extraña. Parecía haber una puerta ahí, iba a tratar de comprobarlo y abrirla, pero parece que iba a abrirse en segundos, rápidamente salimos de la habitación y fuimos a la otra de en frente, no podrían vernos, por que las luces estaban apagadas.
Salió de ésa puerta, la misma rubia ésa que trató de seducirme a bajo, pero la pregunta es ¿Qué hace ella aquí? La observé hasta que ella se fue por donde habíamos venido. Me aseguré de que no venga nadie, le hice señas a Derek que debíamos entrar ahí, él obviamente asintió con la cabeza para salir de nuestro escondite. Entramos en ésa habitación, abrimos la puerta y había una escalera que nos dirigía hacia a bajo, bajamos cautelosamente pero al hechar un vistazo, habían guardias pero como nosotros fuimos entrenados toda nuestra vida, pudimos deshacernos de ellos tan pronto pudimos. Escuché la voz de Meid, ella si estaba allí, rápidamente abrimos.
—¿Pero qué mierda sucede aquí?- Preguntó serio Derek al ver a los hombres, me preguntaba lo mismo.
—Meid, ¿Qué mierda le hicieron?- La vi en la cama inconsciente, me quede sin aliento, ahora voy a matar a éstos tres idiotas. Comenzamos a luchar cuerpo a cuerpo con ésos 3 tipos que rápidamente nos vieron, quisieron atacarnos.
Golpeé a uno, lo agarre de su camisa, no podía controlarme quería saber que le habían hecho, una parte de mí quería matarlos y lo iba a hacer pero primero necesito respuestas. Lo senté en una silla y comencé a golpearlo una y otra y otra vez hasta dejar toda su maldita cara ensangrentada.
—¿Quiénes son ustedes? ¿Qué le hicieron?- Grité enojado golpeándolo hasta que hablará, pero sólo se reía y eso me daba más rabia.
—Mi jefe tiene unos grandes planes, y la quería a ella, directo y sencillo- Dice riendo.
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Me he vuelto a enamorar
RomanceEsta NO es una típica novela de adolescentes, mi nombre es Meid Johnson tengo 16 años, tengo padre y un hermano mayor Tyler 18 años. Mi madre murió hace 5 años y mi padre mucho no esta acá siempre esta trabajando. Mi personalidad es extravagante, re...