Destruyeme, amor [CORRIGIENDO]

capítulo 3

'Hay días que no sé ni lo que siento'

El despertador sonó dando comienzo a otro nuevo día. Estiré la mano hasta dar con el, y lo apagué con un gruñido. Me pasé las manos por la cara y suspiré. Me deshice de las mantas que emanaban en mi cuerpo y me levanté caminando a mi armario. 

Saqué de este un pantalón negro y una camiseta gris corta, con bambas negras. Cogí mi mochila y bajé al comedor. Estaba por abrir la nevera para comprobar si había comida pero lo vi una estupidez y salí de casa. El día anterior, cuando vine a casa, miré si había algo para cenar, pero no había nada. 

Salí de casa y comencé a caminar hacia el instituto. Era mi último año, y estaba deseando que se terminara. 

Levanté la vista al escuchar la puerta de un portal cerrarse. El chico del bar estaba apoyado en esta, moviéndose nerviosamente. No se había dado cuenta de mi presencia, y eso era un alivio. Noté como miraba y se movía hacia los lados, se podía apreciar desde lejos ojeras debajo de sus ojos. También pude notar que estos estaban algo rojos. Mientras me iba acercando, notaba que sorbía su nariz seguidamente, lo que me hizo sospechar lo que le sucedía.

-¡Hunter! -gritó un señor dándole palmadas en la espalda.

Él lo saludó y sonrió mientras reía nerviosamente. 

Cuando supuse lo que le pasaba a Hunter, aproveché un semáforo en rojo y paré mientras lo miraba disimuladamente. 

Notaba como Hunter hacía movimientos con las manos, y hablaba torpemente.

Finalmente el chico entró con él al portal que minutos antes Hunter había salido. 

Podía equivocarme, pero estaba segura de que Hunter se drogaba.