El Asesino de mi Hermano

Capítulo 15: Las Vegas.

— ¿Estás seguro?

— Al cien por ciento.

Will estaba en la fila para comprarme un boleto de tren para ir a Glenwood Springs y lo estaba pagando él, con su dinero. Yo me negaba a hacerlo pero me obligo a aceptar.

— Toma. — me dio el no tan pequeño boleto color azul.

— Aun no me parece bien que me lo regales

— Solo calla y sube a ese tren, tienes que llegar a Utah. Te falta poco para Las Vegas. — estaba sonriendo,

El abrió sus brazos y yo me dejé caer en ellos, estos pocos días con Will me ayudaron a quererlo mucho, me recuerda a Thomas.

— Hasta pronto Ems. — besó mi frente.

— Hasta pronto, Will.

Y subí al tren que me llevaría un poco más cerca de ese imbécil. Me senté cerca de la puerta, le sonreí a Will desde la ventana y me despedí con una mano. Luego de un espantoso sonido el tren empezó a moverse, alejándose cada vez más de la estación y de Will.

11:03 a.m. caminada por el borde de la carretera camino a Las Vegas, ahora me buscaban en Colorado y Utah, me sentía en el desierto con el sol brillando a todo dar y con el estómago vacío, hace una hora que se me acabó el agua, la carretera estaba desierta y creo que me siguen un par de buitres. Para no morir de calor usaba converse rojos, shorts de jean, la camiseta blanca más holgada que tengo, mi cabello recogido en una cola de caballo y mis lentes de sol. Ya no tenía energía, no podía seguir caminando, estaba cansada, con hambre y sed. Mis piernas cedieron y caí de rodillas en la tierra, creí que moriría en ese instante. Recorrí cinco estados para morir en la tierra. Mis ojos se cerraban, sería el fin.

Abrí un poco mis ojos y vi un cartel verde con letras blancas, entre cerré un poco mis ojos para poder leer "Las Vegas 500 metros" mis ojos se abrieron como platos y me levante del suelo de un salto, solo 500 metros, aun puedo hacerlo. Empecé a correr como jamás lo hice, la clase de gimnasia del instituto debían servir para algo y ahora todos esos diez que saqué eran mi esperanza.

"Las Vegas 200 metros" reía como desquiciada, me acercaba cada vez más.

"Las Vegas 100 metros" "Voy a lograrlo, voy a lograrlo, voy a lograrlo" pensaba una y otras vez. Hasta que vi el hermoso letrero "Bienvenido a la fabulosa Las Vegas, Nevada"

— ¡SÍ! ¡TOMA ESO CALOR DE MIERDA! — estaba gritando con una sonrisota en mi rostro. — ¿VES ESTO SOL? ¡ES MI TRASERO ENTRANDO A LAS VEGAS! — los buitres estaban a unos diez metros de mí, les mostré el dedo del medio — ¡JODANSE ASQUEROSOS ANIMALES!

Unos metros más adelantes tome un taxi y me dirigí a un centro comercial, tenía que hacer unas compras y comer.

Pagué el taxi y entre al centro comercial, una ola de aire acondicionado golpeo mi rostro, hace una semana que no siento frío. Encontré el área de comida compre una hamburguesa en McDonal's amo esas hamburguesas, una soda grande y dos raciones de patatas fritas. No me importara quien se me quedara viendo por qué mis piernas tienen algo de tierra, mi cabello es un desastre y tengo algunas ojeras, que se jodan, yo solo quiero comer.

Terminé mi comida y fui directo al baño, arreglé un poco mi cabello, me sacudí la tierra y limpié mi rostro con toallas húmedas.

Luego de un rato de tratar conseguir un taxi me harté y tomé un autobús hasta una parada que quedaba a una calle de un hotel. Cuando llegue me hice pasar por alguna chica que tenía reservación y me dirigí hasta mi habitación, la seiscientos cuarenta y cuatro. Tomé una ducha y apenas me acosté en la no tan suave cama entre en un profundo y pesado sueño. Tenía que descansar mucho, estaba muy cerca de atrapar a Ryan.

Cosita:

Holaaa eh aquí un capitulo bien retrasado :D dedicado a... -redoble súper malo de tambores- ¡ANGÉLICA! Te amo hermosa e.e

Galletas, Angie.