Capitulo 12

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Apoye mi cabeza sobre la pared de mi habitación, no había podido dormir en toda la noche, lo conseguí después de tomar unas pastillas a escondidas de mi madre, ella se espantaría si sabría que tomaba un medicamento para conciliar el sueño, lo cierto es que era la primera vez que lo hacía, esta vez lo necesitaba. Aun sentía las miradas de muchas personas sobre mí, aquí sola en la oscuridad y soledad de mi habitación estaba a salvo nadie podía lastimarme y tampoco yo podía hacer daño a nadie... ¿acaso era una mala persona? ¿Que se escondía detrás de un camuflaje? Alguien toco la puerta de mi habitación, no respondí, no tenía ganas de ver quien era.

— ¿Puedo pasar?—mi mama abrió la puerta, supe que era ella por su voz, pero no voltee a mirarla—te traje algo de comer...—paso y dejo la bandeja de comida sobre mi escritorio y encendió la lámpara iluminando un poco la oscura habitación—

Mi madre se quedó mirándome por unos minutos, pero yo parecía perdida, parecía que ni siquiera respiraba, a veces parecía que mi madre hacia un gran esfuerzo por entenderme y leer lo que pasaba por mi mente, ella era la persona más paciente del mundo, tal vez no merecía tener una hija como yo, fría y distante.

— ¿Quieres que hablemos?—pregunto mirándome, negué sin pronunciar alguna palabra—te dejare sola entonces...—dijo algo desanimada, yo sé que ella deseaba tanto que yo hablara más con ella—ah por cierto... llamo el director de tu universidad...—abrí mis ojos sorprendida—quería saber cómo estabas... él dijo... que Suho está bien... esta fuera de peligro, solo fue un golpe...—sentí que la tensión que había sobre mi cuerpo se iba desvaneciendo, no lo había matado. Aunque lo odiaba daba gracias a dios que él estuviera fuera de peligro—nada malo paso con el...—añadió por ultimo dirigiéndose a la puerta—

— No quise lastimar a Suho...—dije mirando hacia la ventana recordando el miedo que me embriago cuando lo vi al final de las escaleras con sangre brotar de su cabeza—no vi las escaleras... jamás pensé que el terminaría así...yo... no quise—mi voz fallo y preferí callarme, no quería llorar por esto, no quería preocupar a mi madre—

— Yo lo se cariño... ¡lo sé!—se acercó sentándose junto a mí en la cama—No tienes que aclarármelo a mí, yo te creo...

— Las demás personas me miraron con acusación...—dije abrazándola fuerte queriendo ya borrar esas imágenes de mi mente—

— (TN) _____ dime la verdad... ¿el intento propasarse contigo?—no quería decirle la verdad, lo cierto es que era tan vergonzoso, yo permití que esto pasara cuando no le puse un alto cuando fue necesario—

— No...—mentí sintiéndome una pésima hija—estábamos discutiendo por una estupidez... solo eso...

— ¿Estas diciéndome la verdad?

— Si mama...—agache mi rostro con miedo de que si continuaba mirándola terminara por descubrirme—

— Ok... pero si algo mas llega a pasar vas a confiar en mi ¿verdad?

— Si mama...—ella sonrió tomándome mi mano y depositando un beso allí, si pudiera pedir un deseo ese sería que ella fuera mi madre verdadera y no mi madre adoptiva—

Hable con Krystal durante la noche, ella quería saber cómo estaba, se quedó más tranquila cuando le dije que ponto volvería a clases.

Estaba a punto de acostarme para dormir cuando mi celular comenzó a sonar, vi el número que figuraba en la pantalla, no tenía este número agendado pero decidí responder de todas formas.

— Hola...

— Hola (TN) _____ soy yo.

— ¿Yesung?—era tan extraño que él me llamara—

HASTA QUE EL APARECIÓ   (con Yesung)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora