HASTA QUE EL APARECIÓ (con Yesung)

Capitulo 36

Mis ojos se abrieron de par en par mirando aquella escena, sentí el impulso de irme pero también de quedarme y ver lo que sucedía a continuación, algo dentro de mí me decía que debía retroceder, dar media vuelta y dejar de ser una entrometida, cuando finalmente le hice caso a aquella voz, la bolsa que sostenía en mis manos cayo hacia el piso, provocando un leve sonido, pero aun así llego a los oídos de Leeteuk y la mujer que estaba con él. Los dos se separaron mirando hacia donde yo estaba, me maldije en mis adentros diciéndome una y mil veces lo estúpida que era, debí marcharme en cuanto los escuche discutir y no quedarme a oírlos.

— Lo... lo siento... —pronuncie con mi voz temblorosa, el me miro asombrado y ella solo agacho su cabeza ocultando su ojos enrojecidos a causa de las lágrimas—pensé que no había nadie...—De manera rápida levante la estúpida bolsa que había caído al piso, di la vuelta deseando que en ese momento la tierra de abriera en dos y poder ocultarme allí—

Los próximos minutos estuve en el sanitario mirando los minutos pasar en mi reloj, por un momento paso por mi cabeza la idea de no asistir a clases y de marcharme a casa, pero... ¿Qué había hecho de malo? Solo había interrumpido un beso entre mi profesor y su ex novia o novia, no tengo idea de lo que era ella para él, además esta era mi penúltima clase, no sería nada bueno que faltara. Tome valor y salí del baño para dirigirme al salón de clases. Tome asiento en mi lugar de siempre y segundos después entro el profesor Park saludando a toda la clase, todavía me sentía avergonzada, así que trate de desviar mi mirada de la suya durante las 3 horas aquí, por suerte la clase trato de hacer algunos trabajos individuales, por lo que no fue necesario tener que participar en clases, ni intercambiar algunas opiniones.

— Como ya saben la próxima clase es la última, habrá una pequeña evaluación oral, espere que todos aprueben, eso me hará sentir orgulloso de este grupo—sonrió mirando a todos—hasta la próxima clase...—se despidió tomando sus cosas, para abandonar antes que todos el salón—

Finalmente el curso quedo vacío, ya todos se habían marchado, solo me había quedado yo, garabateando sobre una hoja y esperando que los minutos pasaran y que cuando saliera de aquí ya no pudiera cruzarme con él.

Creo que no había sido buena idea pensar en hacerle un presente... ¡Dios! ¿En que estaba pensando? Me dije a mi misma mientras salía del aula, él era un profesor había cierta distancia entre él y yo, ósea su alumna, una barrera nos separaba, una barrera que no debería romperse. Si bien era cierto que habíamos tomado café en más de una oportunidad y hasta habíamos cenado y bebido un poco de vino, eso no significaba nada, el continuaba siendo mi profesor. Tal vez luego le enviara un mensaje agradeciéndole por la ayuda que me había brindado y le informaría acerca de mi nuevo trabajo. Sí, eso haría.

— Sera mejor deshacerme de esto...—dije mirando la bolsa que llevaba conmigo—

Levante la mirada hacia adelante y observe a quien pensé que ya había abandonado el establecimiento ¡Mierda! ¡Mierda! ¡Mierda! Dije en mi interior mirando hacia todos lados, buscando una salida para poder escapar "demasiado tarde" susurró mi yo interior, él ya me había visto "tranquila TN) _____ solo es tu profesor, trátalo como lo hacías con los demás, ignoralo" mire hacia otro lado caminando naturalmente como si nada habría pasado.

— (TN) _____...

— Hasta luego profesor Park...—respondí de manera educada tratando de continuar con mi paso, pero él se interpuso delante de mí impidiendo que pudiera avanzar—

— ¿Estas apurada?—no respondí, solo lo mire levantando mis cejas—tal vez me puedes conceder un poco de tu tiempo—curvo sus labios apenas, mostrando una pequeña sonrisa—