Capítulo 17
Mi Familia
Pasaron unos días desde que me uní a los Cazadores de la Noche, la hoja con la información de mi padre la guardé junto al folleto y ese tonto libro de "Amor Prohibido" sólo por ser un libro lo conservo, nunca botaría eso.
En este tiempo no he hablado con Aexa, siento que no debo, ya dejé de intentarlo, pero no me gusta ver que lloré cuando está sola en el salón mientras yo estoy en el patio donde la veo sin que ella lo sepa, eso sólo me dan ganas de matar a su madre, sin embargo sé que no debo hacerlo, sólo la pondría más triste.
No sé que hacer, la sensación de mi cabeza es muy diferente a cuando las Sombras trataban de corromper mi mente, es más difícil de explicar, pero duele, duele mucho, las zonas de mi cuerpos corrompidas por el odio han crecido un poco, pero mis padres no lo saben gracias a que mi madre no se ha bañado conmigo de nuevo.
Las misiones que he tomado han sido sencillas, aunque sean asesinatos puedo decir que son sencillas gracias a las Sombras, con ellas matar es demasiado fácil, y sobre mi crecimiento, mis padres se dieron cuenta, ellos se alegran de que crezca, también me alimentan bien diciendo que quieren que sean una niña sana, son tan cariñosos con alguien que no es su hija, eso me hace sentir a gusto.
Y me siento mal al estar mintiéndoles diciendo que voy donde Aexa para charlar cuando en realidad me voy a la guarida de los Cazadores de la Noche para hacer misiones de asesinato, me odio a mí mismo.
Todavía me encontraba en el Colegio, pero no pasó nada interesante, sólo que veía a Aexa triste, aveces ella me miraba pensando que yo no la veía, pero era todo lo contrario, siempre estaba viendo lo que hacía.
El día pasó normal, pero no me sentía a gusto como para ir a hacer misiones, y ya había hecho 3 misiones más de lo que debía hacer mensualmente, lo que da un total de 8 misiones cumplidas con éxito. Voy a usar el tiempo que queda de este mes para estar con mis padres tranquilo, 13 días, podría aumentarle unos 5 días del siguiente mes.
No, eso sería mucha espera. Queremos matar rápido. No podemos esperar mucho, tonta Demonio.
"Les daré algo que matar, algo difícil. ¿qué les parece un Mercenario?"
¿Sabes dónde hay uno?
"Hay una misión que dice sobre matar a un miembro de los Mercenarios que está escondido al Este de Tharal."
Pero eso es muy largo. Demoraríamos mucho tiempo en llegar hasta ahí.
"Tch, tienen razón, ¿qué les parece entonces matar a varios humanos? Aunque claro, tal vez haya que dejar sobrevivientes, pero de que mataran a varios no hay duda."
Las Sombras se quedaron en silencio, parece que están acordando algo entre ellas mismas sin decirme nada, pasó un rato hasta que volvieron hablar, yo durante ese corto tiempo estuve usando mi Magia para distraerme.
Está bien, pero no olvides el favor que nos debes.
"Es bueno que entendieran, y sobre eso, deben saber que yo no rompo mis promesas."
Cuando Llegué a mi casa fui directo a la cocina donde estaba mi madre sirviendo la comida, yo la ayudé a hacerlo mientras le decía lo que había enseñado el profesor, omitiendo todo sobre Aexa, como siempre.
Voy a tratar de tener una mejor relación con ellos, no he sido muy cercano con mis padres adoptivos desde que me sacaron de esa mierda de lugar, y eso que estoy diciendo que debo intentar agradecerles todo el tiempo, aunque no creo poder hacerlo con todo lo que han hecho por mí desde que están conmigo.
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Reencarnando en una Demonio
FantasyUno de los grandes enigmas de la humanidad desde siempre, ha sido qué sucede con nosotros después de la muerte, durante 10 años investigué todo sobre este caso, nunca encontré nada que oficialice mis hipótesis, y sólo duré esos 10 años, pues ocurrió...