Reencarnando en una Demonio

Capítulo 28 - Felicidad

Bueno, me di cuenta que la Historia de Reencarnado en un Semi-Dragón no puede ser continuada debido a que me quita tiempo y que en mi colegio están dejando mucha tarea, así que no la seguiré subiendo, aunque si aparecerán algunos hechos en esta historia, después de todo es el campeón de alguien que no ha sido mencionado. Los que leyeron la historia sabrán la conversación que tuvo con ese ser, eso es todo.

Capítulo 28

Felicidad

Aveces el tiempo pasa rápido, dos años, si, han pasado dos años desde que me volví la Sub-Líder de los Cazadores de la Noche, y no me gusta lo que pasa ahora, mi apariencia se asemeja mucho a alguien de 15 años, mi cuerpo... pues ha crecido muy bien, al punto en que algunos Furiens no me ven con odio, sino con deseo, me repugna, si tuviera mi mentalidad como la del Demonio del Mundo Antiguo, puedo asegurar sin ningún problema que trataría de acercarme a alguien para sacar provecho de eso, sin embargo gracias a que actúo de esta manera, ¿distante? Si, eso es, gracias a esa actitud sólo me causa asco el ver a esos seres, sigo siendo menor de edad, al menos en este cuerpo. Creo que no debo decir que han habido bajas en la población, algunos hasta me dieron una nalgada, no saben el placer que sentí al vengarme de esos tipos, ver como su sangre sale a chorros de su cuello al cortar sólo con mis garras.

Incluso en el Gremio, he recibido confesiones, todos jóvenes, parece que son los más ignorantes respecto a lo que los Demonios han hecho a Dariagmna, a los que dejaban el tema una vez les decía que no, sólo porque no quería tener más trabajo, los dejaba vivos, pero... los que se pasaban de la raya, como intentar besarme, abrazarme, tocarme más de lo debido, no me importaba el trabajo extra que me ocasionaría. El viejo con respecto a esto me dijo que evitara matarlos, ya que no quiere que me sobrecargue de trabajo por culpa de las hormonas de los jóvenes, oh, claro que si, les cortaré la cosa que les hace hombres, a ver si así siguen con sus malditas hormonas.

Aunque quitando la repugnancia que siento ante eso, me causa gracias el como han tratado de acercarse, flores, ¿quién usa flores hoy en día? ¿Piensan que de verdad eso funciona? Si es así, pues yo no voy a caer con eso, más si sé que una vez fui hombre. Si tuviera que elegir a una pareja, prefiero mil veces a Aexa que a un hombre.

Sobre Sen'ry, pues murió, antes que hayan confusiones, no, no fui yo, al parecer en una misión que fue para conseguir información sobre los Mercenarios que están merodeando uno de los Poblados Humanos cerca de aquí, fue emboscada, estos tipos pueden resultar una amenaza ya que esto se mueven únicamente por el dinero o en otro caso, para aumentar sus fuerzas. La primera vez que recibí la cantidad de miembros de esa... ¿Organización? Si, creo que eso es lo que es, bueno, la cosa es que sus números son demasiados, un aproximado de un millón de Mercenarios, todos entrenados para exterminar un pequeño pueblo por si solos, el hecho de que estén aquí puede ser malo, por lo que Sen'ry fue y pues... falló en la misión, mis Sombras estuvieron molestas por no poder probar esa extraña fragancia que desprende su cuerpo.

Aparte de las confesiones, trataron de tomar mi puesto, aunque me gustaría descansar como antes, la paga es buena, sólo por esa razón mato a los que se atreven a revelarse contra mí, claro que siempre los torturo y digo la razón del por qué en la sala principal del Gremio, para que todos escuchen, supongo que así no intentarán hacerlo. Aunque eso también llevó a que hicieran apuestas conmigo, si ellos ganaban yo sería suya por una noche, cabe decir que ellos no pudieron tener ninguna noche conmigo, y nunca más podrán pensar en eso ya que están muertos.

-Sub-Líder.- Escuché que me llamaban mientras tocaban la puerta.

-Pasa.

-Vengo a informar.