#8

7.2K 574 216
                                    


#8

Capítulo #8


Estaba en problemas.

Era inevitable.

Después de mi extraña aventura nocturna, llegar a casa de Danna fue como tocar el cielo, pero de ahí baje a lo profundo del infierno cuando mi amiga comenzó su investigación. Literal, no pude dormir en toda la noche.

—Tu cara esta horrible—Steffy tan linda como siempre.

—Gracias Steff.

Camine como una especie de zombie hasta la cancha en donde ya estaban practicando fútbol, me tiré en la banca y trate de dormir un poco. Las imágenes de la noche anterior llegaron a mi mente, ¿Cómo fui capaz de ir a ese lugar? Trevor se veía tan bien, tan sexy, varonil y...

—¡Valerie cuidado! —Escuché, pero para cuando quise reaccionar el balo ya había golpeado mi rostro.

—Lo siento, no debí patear tan duro.

Estaba desconcertada, el golpe me había dejado mareada. Sentí como un líquido bajaba por mi nariz y unos suspiros de sorpresa me dijeron que no era algo bueno.

—Valerie ¿Cómo te sientes? ¿Puedes escucharme? —La entrenadora llego hasta mí, solo pude asentir a lo que decía—Llevaré a Valerie a la enfermería, ustedes sigan practicando y luego recojan las cosas. Vamos.

La entrenadora me tomo por los hombros y me llevó hasta la enfermería, tenía mi cara echada hacia atrás, podía sentir el líquido caliente queriendo salir de mi nariz.

Al llegar, la entrenadora le explico todo a la enfermera, está tomo varios algodones, los hizo un pequeño rollo y puso uno en cada orificio de mi nariz.

—Con eso debe bastar, ¿Te duele? —Preguntó mientras tocaba mi nariz.

—Algo—le respondí.

—Bien te daré unos analgésicos, la nariz se te hinchará luego, pero con esto bajará.

Asentí y tomé las pastillas, me acosté en la camilla y cerré los ojos. Genial ahora mi nariz estará hinchada y morada ¿Qué más puedo pedir?

—¡Val! ¿Estás bien? ¿Te duele? Mataré a esa idiota que no sabe patear un puto balón—la enfermera carraspeo—lo siento—se disculpó Danna.

—Estoy bien—le dije, esperando a que se calmara.

—¿Dónde está la muerta? —Steffy llego pateando la puerta.

La enfermera de nuevo carraspeo mientras llenaba unos papeles.

—Mírate pareces Rodolfo el reno, tienes la nariz como tomate.

Voltee los ojos, ¿Por qué no puedo tener amigas normales? De esas que te llevan una gelatina cuando estas enferma.

Varios minutos después la enfermera me dejo salir con algunas instrucciones.

—Hable con e la directora, dice que si te sientes muy mal puedes ir a tu casa—La entrenadora llego trotando hacia nosotras.

—Oh, pues yo estoy...

—Mal, le duele horrible la nariz

—Sí y siente como si se la hubiesen arrancado

¿Qué? ¿De qué hablan este par de locas? Yo me siento bien, si tengo una molestia en la nariz, pero solo es eso.

A través de la pantalla (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora