A través de la pantalla (Completa)

#30

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Capítulo 30

Trevor salió del auto dando un portazo y comenzó a caminar hacia nosotros, no se veía para nada feliz.

—Hola, Valerie—Dijo.

—Trevor que sorpresa—Quise golpearme por eso.

Daniel miraba a Trevor y luego pasaba su mirada a mí, estaba segura qué no entendía nada y yo tampoco.

—Daniel él es Trevor—los presente—él es... —¿Qué es Trevor?

—Un amigo, cierto Val—Trevor le dio la mano a Daniel y este la tomo, segundos después la aparto ya que Trevor se la apretó muy fuerte.

—Me pareces conocido ¿Eres de la iglesia?

—No—Me apresure a decir—él es... vecino mío ¿Cierto?

—Si, bien ya nos vamos. Sube al auto—¿Qué?

—No yo no me voy, estoy con Daniel—Le dije, grave error.

Trevor poso su vista en mí, se veía enojado como si en algún momento fuese a saltarle a Daniel y a golpearlo. De un momento a otro vi cómo se agacho y me tomo en sus brazos y camino hasta el auto.

—¡Pero qué haces! ¡Bájame! —Comencé a patalear y a gritarle que me bajara, pero no hizo caso.

Daniel iba detrás intentando que Trevor me dejara.

—Escucha gafitas, ella se ir conmigo así que vuelve a tu casita a hornear galletas—Trevor dejo a Daniel con la palabra en la boca, rodeo el auto y entro.

—Déjame salir, eso fue muy grosero Trevor.

Él no dijo nada, ni siquiera me miro solo arranco el auto y nos fuimos lejos de ahí.

El camino fue silencioso, no puedo creer lo que había hecho, pero ¿qué le pasa? Fue tan grosero, pobre Daniel. Al llegar a su casa, baje del auto dando un portazo y camine hacia el otro lado, por nada del mundo pienso entrar a su casa después de lo que hizo.

—¿A dónde crees que vas? —Dijo mientras me agarraba la mano.

—A mi casa, no quiero estar frente a un grosero. Lo que hiciste no tiene nombre.

—Oh vaya, así que te enojas porque arruine tu cita con gafitas.

—¿Gafitas? Se llama Daniel y si estoy enojada, no tenía porqué llegar y tratarlo así y mucho menos cargarme y tirarme en el auto como si fuese un saco de papas.

—Que sea la última vez que salgas con ese nerd—No dejaba mi mano libre pese a que estaba intentando zafarme con todas mis fuerzas.

—¡Estas demente! ¿Quién te crees? Yo salgo con quien quiera, no eres nadie para decirme que hacer—Me plante frente a él, no iba a permitir que controlara así mi vida.

—Claro que tengo derecho ¿Sabes por qué? Porqué tú Valerie eres mía, no permitiré que alguien más toque lo que es mío.

Me quede helada—¿Qué? ¿Ahora soy un objeto? Estas mal Trevor, yo no soy tuya ni de nadie.

—Claro que lo eres, ¿O se te olvida todo lo que te he hecho? Yo he sido el primero en besarte, en tocarte, en llevarte hasta la locura máxima. Eres mía.

¿Cómo puede decir eso? Estamos a la mitad de la calle, Dios que vergüenza.

—¿Te estas escuchando? Suenas como si hablaras de un objeto, no soy de tu propiedad por más cosas que hayamos hecho.