Sentado sin estar, para solo pensar en lo pesado del pasado y sus recuerdos, que son cómo chuchillas para el alma.
No ver más a quién ya marchó y nunca poder hablar con quién ya no volvió, ahora estoy tratando de encontrar una solución para calmar la bestia que quiere salir de mi pecho para dejarme aún mas deshecho, debo seguir a la flecha que me indique el camino para que no sea un burde mezquino.