Durante los tantos miles de años qué llevan existiendo, los humanos no han podido comprender realmente qué es el amor.
El físico llega a importar los primeros 10 días, en los cuales sólo hay interés en poder disfrutar de una pasión momentánea. Después de ese lapso de tiempo entra la relación actitud-pensar, la cuál hace que la interacción continua sea mas amena y hasta placentera, pasando todo esto puedemos llegar a pensar que hemos completado el "enamoramiento".
La cuestión de casualidad, destino o suerte también puede interferir en este proceso, son tantas las veces en las cuales dos simples desconocidos se encuetran e interactúan durante horas tratando de decifrarse mutuamente, otras simplemente se conocen y nunca se despiden. Por qué también puede haber parejas que rayan el lo perfecto o ideal, y de la noche a la mañana son simples desconocidos con recuerdos compartidos, u otras las cuales no puedes llegar a imaginarte siquiera que puedan hablarse, y por un simple capricho llegan a casarse.
No conozco el por qué exacto de cada situación, pero algo es muy seguro, el amor y el desamor está donde está. Y de eso no puede haber duda.
En este sistema de cosas nada puede ser ideal por mucho tiempo, pues la envidia y la inconformidad hacen que todo individuo quiera el bien propio con el mal ajeno, en pocas palabras, quiere siempre ser superior. Las parejas ideales no existen, pero eso no quiere decir que no puede haber relaciones que disfruten de esos ideales.
Las parejas "ideales" son aquellas que por encima de ser amantes son amigos. Juegan como niños y se protegen como adultos, se burlan del otro pero se ayudan a ser mejores día a día, pueden llegar a molestarse de una manera odiosa pero el amor que llegan a sentir nadie, ni ellos ni ninguna otra persona puede negar que su amor es sincero, el amor no sólo son besos o caricias, tampoco sexo, el amor es cuidado, carino, el amor es todo y nada.