Capítulo veintisiete.
[...] Hacerle saber que estaba allí, que a pesar de todo, yo estaba allí. Y así fue, pero él no dejaba de llorar.
—Estoy aquí, tranquilo.
—Creí que se había marchado —susurró aún llorando.—Estaba preparando el desayuno.
—Me ha asustado, no lo vuelva a hacer... creí que la había perdido —me abrazó con más fuerza.
—Ahora... suelte el arma, por favor. ¿Qué pensaba hacer?
—¿Terminar con todo? —dejó el arma en la cama.
—Esa no hubiera sido una solución, es mejor que se dé una ducha. ¿Le parece?
—Está bien, pero se quedará, ¿no es cierto?
—Es evidente que si, ahora vaya a ducharse, yo estaré preparando el desayuno.
—Sí, pero antes debo hacer algo muy importante.
—Lo puede hacer después.
—Lo necesito ahora.
En ese momento supuse lo peor, pero me apego a él, aún lagrimas se deslizaban por sus mejillas. Su mirada reflejaba tristeza, temor. ¿Sería temor a que yo lo abandonara? Esa situación me dolía, dolía verlo en ese estado. Me miraba fijamente ¿En qué pensaba?Lentamente, nuestros labios se unieron, esa vez me besaba con dulzura, realmente se sentían los sentimientos, lentamente se fue alejando. Una sonrisa se dibujó en su rostro.
—Dije que la besaría.
—Me gustaría apreciar más seguido esa sonrisa —dije un tanto atontada.—Mientras esté a mi lado, todo puede ser posible.
Salió de la habitación, me puse a recoger las cosas que había tirado. Luego me dirigí a la cocina. Estaba preparando el café y oí pasos. Era él. Di media vuelta y lo encontré. El cabello mojado, un tanto alborotado. En simples palabras estaba hermoso. Sonrió y se acercó a mí.—¿No va a ducharse?
—El café casi está listo, desayunaré y luego me ducharé.
—Me parece perfecto, hoy debemos ir a una cena familiar.
—¿Con los padres del señor Rose?—Así es, anunciaran algo muy importante.
—¿El compromiso del señor Rose con Sarah? —pregunté de mala gana.—No, es algo de negocios, si no he entendido mal.
—¿Pero ella asistirá?
—No lo creo, o al menos eso espero.
—¿Entonces debo asistir?—Claro que si, ahora iremos a preparar su vestuario.
—Creí que hoy descansaríamos —casi hice un mohín, pero reconsideré esa idea.—¿Quiere ir a una playa?
—Con la piscina me conformo.
—¿Está segura? Podríamos ir a una playa, aunque pensándolo bien, creo que no sería lo más conveniente —hizo una mueca de desagrado.—Tiene razón, iré a ponerme algo cómodo.
—Aun no hemos desayunado —me recordó.
—Cierto.
Me ayudó a preparar la mesa, desayunamos charlando de cosas de su trabajo. No quería preguntar algo incómodo. No quería arruinar ese momento.
(...)
—Ya, déjeme —dije entre risas—. ¡Me va a ahogar!
—No sea exagerada, solo la estoy salpicando.
—Puedes tutearme, Izzy —dije sin pensarlo ni un segundo. Al principio no quería que me tuteara porque no le conocía bien, además, nuestra relación era solo por un trato. Pero ahora que eso ha cambiado, no me molestaba en absoluto. Luego de ver cómo me sonreía, volví a hablar—: Hiciste que me entrara agua en el ojo —me quejé, él se acercó y besó la punta de mi nariz.
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Amor por conveniencia ; Izzy Stradlin.
Fanfic«Ten cuidado de aquellos que fingen amor por interés y amistad por conveniencia, porque ni sus palabras ni intenciones son honestas.» Fecha de publicación: 25.02.18. Hermosa portada hecha por: @vintagesoul