"No te rindas"

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Después de ese día Emma empezó a faltar a la escuela, no rindió ninguno de los exámenes y podría ser que pierda el año; no quería admitirlo, pero entendía.

Estaba demasiada jodida como para preocuparse por un examen.

Trate de hablar con Lorenzo, pero no escuchaba a nadie, se alejo de todos sin decir nada, tambien entendía que necesitaba tiempo.

Exacto. Soy demasiado comprensiva.
En vez de estar entendiéndolos deveria estar golpeando a ambos por hacer estupideces.

Solo falta unas semanas para que acabe el periodo escolar y comiencen las vacaciones de verano.

La biblioteca nunca me había parecido tan pacifica, si me sentía perdida solo tenia que leer Romeo y Julieta para saber que las cosas podrían ir peor.

Por lo menos no me eh suicidado por el amor de mi vida, bueno al menos no ahora.

Por otro lado me siento patética al compararme con personas que pasan por situaciones mas terribles que yo para ganar algo de animo.

La pantalla de mi teléfono se ilumina avisándome de un nuevo mensaje.

Mark: ¿Por que no salimos a dar una vuelta, nena?

Apago el teléfono y lo guardo en la cartera, pero la conciencia me recrimina por mis acciones y me obligo a sacarlo nuevamente para teclear una respuesta.

Yo: Ahora no. Estoy ocupada, nos vemos luego :)

En realidad no tenia mucho que hacer, ya había acabado con los deberes y solo estaba aquí para perder tiempo antes de regresar a casa.

Solo no quería verlo, porque cada vez que lo hacia me recordaba lo equivocada que estuve a seguirle el juego a Mark, no quiero nada con él.

Doy vuelta la pagina, esta es la parte en la que...

–Karim.

Levanto la cabeza para encontrarme con los afligidos ojos de Leon.

No otra vez.

Lo bueno es que ya estaba acostumbrada a las malditas mariposas muertas que volvían a la vida cada vez que lo veía. Antes creía que eran gases.

Tengo las cosas claras, pero soy una maldita cobarde, y prefiero quedarme así.

–¿Que quieres?– me concentro mas en cerrar mi libro que en mirarlo.

–Hablar.

Clavo mis ojos en los suyos, solo podía percibir la necesidad en ellos.

Admito que siento cosas por él, pero una de esas cosas es odio ya que de alguna manera pienso que todos mis problemas iniciaron desde que lo conocí. Si lo se, solo quiero echarle a alguien la culpa de todo esto.

–Entonces habla.

El se sienta al frente mío, en cuando sus ojos vuelven a conectarse con los míos siento un escalofrío y las mariposas nuevamente volando en mi estomago.

¿En serio? Malditas mariposas zombie.

–No te eh visto en un tiempo.– comienza.

–Si...

–No eh podido dormir ¿sabes? Cada noche solo pienso en...– hace una breve pausa– que soy un maldito egoísta.

–¿Egoísta?

–Si, porque a pesar de todo lo que esta pasando necesito arreglar las cosas que pasan con nosotros.

Eres Mi Mejor PesadillaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora